Miguel López se define como diseñador conceptual. En 2016 termina la carrera de moda en el CSDMM. Su proyecto fin de carrera habla de los trastornos mentales.
¿Dónde has estudiado moda y en qué año terminaste los estudios? Estudié moda en el CSDMM y acabé mis estudios en el 2016.
¿Cómo valoras la formación recibida? Diría que completa. En los 4 años que dura la carrera aprendí de todo. Patronaje, confección, estilismo, fotografía, empresa, producción, marketing, critica de moda, etc. Es una formación que te prepara para cualquiera de los futuros que la moda puede ofrecer. No se limita al diseño, hay muchas más profesiones en este mundillo en el que me he metido.
Aparte de estudiar moda, ¿has estudiado alguna otra carrera? Empecé en Arquitectura, pero una profesora me aconsejó pasarme a Diseño de Moda. Me decía que mis proyectos eran muy textiles y llenaba los margenes de mis cuadernos con figurines. No duré mas de dos años, pero me dí cuenta de la estrecha relación que hay entre la arquitectura y el diseño de moda, ambos comparten el mismo enemigo, la gravedad (creo que es lo que decía Christian Dior)
¿Es esta tu primera colección? ¿Cuál es el concepto de esta colección? Más que colección es mi proyecto de final de carrera. Me inspiré en los trastornos mentales y como van cambiando a la persona conforme nace, crece y muere. Es una colección que me ha llenado mucho ya que está dedicada a una persona cercana. Intenté entender y sentir lo mismo que esta persona y acabé aceptando muchas de mis fobias como el miedo a la muerte. Ha sido un proyecto muy complicado mentalmente y ha cambiado mi forma de entender al ser humano y cómo se comporta.
¿Qué tal ha sido la aceptación de tu primera colección? Diría que ha sido un poco mix, algunos les ha encantado y otros simplemente no. Entiendo que no es para todo el mundo y que cada persona tiene sus gustos. Las prendas no son nada comerciales, o por lo menos no pretendí que lo fueran. Son pura expresión. Cada una de ellas tiene su propia historia y por tanto son completamente diferentes. Eso a mucha gente no le ha gustado porque consideran que en una colección las prendas tienen que respirar el mismo aire. Creo que es una forma de entender la moda muy carca y que limita muchísimo a la hora de crear. Vale, creamos colecciones alrededor de un tema, pero yo no quiero crear bloques de prendas, quiero crear piezas completamente individuales y respeten el concepto de una forma completamente única.
¿Qué premios has obtenido hasta la fecha? ¿De qué forma han repercutido esos premios en tu carrera? Pues premios pocos, a ver, acabo de acabar la carrera y creo que me falta mucho por recorrer todavía antes de ganar premios. Por ahora me llevo el tercer Premio a la Excelencia que mi universidad me entregó. Me alegró bastante saber que mi trabajo estaba reconocido y me motiva a seguir hacia adelante. De todas formas ese premio no era solo mío, todos mis compañeros me ayudaron bastante a crear la colección, así que me alegra saber que comparto este premio con muchos amigos y familiares.
¿Has cumplido tus expectativas con esta primera colección? ¿Cuándo veremos la segunda? He cumplido muchas expectativas, por ahora acabar la carrera, que no es poco. Pero también me ha creado nuevas. He visto mis limitaciones y mis puntos flojos en esta colección y la verdad es que estoy deseando poder volver a crear y superarme un poco más. Por ahora no tengo ninguna otra colección en mente.
¿Cómo te definirías como diseñador? Podría decir que soy un diseñador conceptual. Le doy mucho valor al concepto y siempre se trata de algo personal. Mis diseños son como sesiones de psicología, sacan lo mejor y lo peor de mí. Pero me encanta poder materializar todo lo que pienso. Por eso siempre me encargo de todo, patronaje, confección, bordados, etc. Todo el proceso es completamente personal. Dicho esto, me definiría como un diseñador conceptual y maniático.
¿Cuáles son tus principales referentes? Tengo dos tipos de referentes. Para crear siempre yo mismo y mi familia. Mi inspiración siempre viene de vivencias personales y son las referencias que uso como diseñador.
Como persona mis referentes son Los Seis de Amberes, Cristobal Balenciaga, Galliano y muchos más. Me encanta ver la vida de estas personas y me inspiran mucho personalmente.
¿Has trabajado o trabajas para alguna otra marca? ¿Dónde te gustaría trabajar? Hice mis prácticas en The 2nd Skin & Co. Aprendí mucho en el taller. Sobre todo a trabajar bajo presión y con tantos proyectos al mismo tiempo, clientas, colecciones, producción. Fue como un cubo de agua fría cuando me dí cuenta de que mantener una marca conlleva muchos sacrificios y esfuerzo, es como tener un hijo. Ahora me he mudado a Londres y con suerte en un futuro podré trabajar en algún estudio de alguna marca importante. Por ahora trabajo en Vivienne Westwood, en la tienda. Es una forma interesante de conocer la marca y el cliente aunque espero poder subir un poco más y, quien sabe, acabar en el estudio.
¿Ves factible vivir de tu propia firma? Ahora no, ahora en lo único que pienso es que seguir formándome trabajando y haciendo algún master. Soy muy joven todavía para atarme a una firma y todo lo que ella conlleva. En un futuro quizás sí, aunque ya lo saben mis amigos más cercanos, si alguna vez tengo una marca nunca podré dirigirla, me limitaré a estar en el taller trabajando directamente con las telas, los patrones y las maquinas de coser. Dirigir no es lo mío.
¿Cuáles son tus próximos proyectos? Formarme. Es un proyecto de vida. No pienso en nada más que en seguir creciendo, viajando y conociendo. Estoy deseando volver a sentarme a coser, no lo niego, pero si lo hago será para hacer algo para una persona o para mí mismo.
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Diseñador: Miguel López
Fotógrafo: Andrés Diaz Ruiz
Modelos: Malejandra Andreu + Luis Mba Ndong
Postporducción: Alvar Carbajal López
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