Tiraya lleva toda la vida en la música: productor, compositor, cantante, dj, encargado de montar las mejores fiestas… De hecho, es el curator y creador de las sesiones de Mazo Madrid
Tiraya es el nombre del pueblo de la madre de Rafael Rodríguez. Y, fruto de su relación con su madre y la melomanía de su familia, empezó a tocar la percusión con once años en su Venezuela natal. Con 20 años y circunstancias familiares, tuvo que mudarse a España y con 21, empezó a estudiar música pero, por falta de dinero, tuvo que pararlo. Por suerte, con 29, decidió dedicarse de lleno a la música y apostar por él mismo. Y menos mal que lo hizo.

Conocer a Rafa es conocer historia de la música contemporánea… Ha tocado con Elvis Crespo en La Resistencia, ha pinchado en ciudades como Londres, Berlín, México DF o Los Ángeles y ha compartido cabina con Baiuca, Dengue Dengue o Chancha Vía Circuito…
¿Cómo recuerdas esa primera epifanía musical en Tiraya, el pueblo venezolano queacabó dándole nombre a tu proyecto?
(Tiraya) La casa de mis padres en Tiraya era una epicentro de fiesta, de comer rico y un hogar de verano para todxs lxs amigxs de la familia. Venían de todas partes de Venezuela a estar unos días con nosotros, quedándose en casa hasta 35 personas. Algo realmente asombroso cuando tienes en cuenta que la casa tiene solo 3 habitaciones, pero como buenos venezolanos, todo el mundo era bienvenido y siempre encontrábamos la manera de apañar con hamacas, tiendas de campaña y colchones sueltos sin cama.
Una de esas noches de completo over booking unos primos se pararon a saludar, y al poco rato y sin mucha pretensión, pillaron un cubo de fregona que usaron a modo de tambor, otro de ellos rompió dos botellas por la mitad, unió las partes superiores, como si fuese una Matrioshka pero de botellas de cervezas partidas a la mitad antes colocando un trozo de bolsa plástico entre ambas botellas, y eso sonaba como una trompeta.
Entre los dos montaron un fiestón no tenía sentido. Recuerdo sentir la música a la vez que escalofríos y ansiedad junto con alegría y curiosidad, muchas emociones a la vez y muy fuertes, hasta tenía un poco ganas de llorar. Fue espectacular.
El productor venezolano Tiraya (@__tiraya__). Todas las fotos son de Edu Gómez
“También recuerdo que a la vuelta de los toques, los de percusión nos íbamos a la parte de atrás del autobús a tocar tambores y versiones random de canciones que nos gustaban y era increíble”
Empezaste en una banda escolar de estilo marching band con repertorio latino.¿Qué queda de esa formación inicial en lo que haces hoy?
(Tiraya) Aparte de buenos amigos que aún conservo, de esos años me queda todo el conocimiento en cuanto a la música latina en general, algo que me ha ayudado mucho.También recuerdo que a la vuelta de los toques, los de percusión nos íbamos a la parte de atrás del autobús a tocar tambores y versiones random de canciones que nos gustaban y era increíble. Recuerdo con mucho cariño esos momentos. En Fresquísimo, mi primer Ep, hay un tema de tambores llamado cvbs que son las iniciales de Cruz Vitale Banda Show. El nombre de esa banda.
“Al principio de llegar a España la música para mi era como un sueño lejano, mi única misión era trabajar, no había hueco para nada más”
¿Qué te hizo volver a la música después de dejarla durante años por falta de apoyo y necesidad de trabajar?
(Tiraya) Si, al principio de llegar a España la música para mi era como un sueño lejano, mi única misión era trabajar, no había hueco para nada más. Así estuve un tiempo largo, luego empecé a compaginarlo con proyectos de versiones. Unos años más tarde llegué a un punto en que mi trabajo me producía un nivel de infelicidad, ansiedad y estrés abismal, y no sé, cómo me caí que no era ese curro sino el tipo de curro o de vida que llevaba lo que me estaba matando, así después de meditarlo mucho decidí intentar hacer lo que siempre he querido hacer que era tocar y hacer música. Al principio (y adía de hoy a veces) fue muy complicadísimo, pero también considero que he tenido suerte y poco a poco las cosas han ido saliendo. Me ha ayudado mucha gente por el camino, empezando por mi familia y mi ex pareja. Si no, no habría podido siquiera intentarlo. Si estáis leyendo esto, gracias siempre :) <3.

Estudiaste batería durante jornadas maratonianas. ¿Qué aprendiste de ese momento de disciplina casi monásticas?
(Tiraya) Fue muy loco en general. Básicamente me metí en el local 10 horas al día durante un año. No fue nada fácil, no vengo de un entorno disciplinado, pero hice todo lo que pude y pillé un nivel bastante decente que me permitió girar y grabar discos proyectos muy chulos. También estuve 2 años de orquesta tipo verbena compaginado con una banda de versiones para bodas. Aprendí a respetar mucho más a la peña que toca bien bien de verdad, esa gente ha echado muchísimas horas.
“También estuve 2 años de orquesta tipo verbena compaginado con una banda de versiones para bodas. Aprendí a respetar mucho más a la peña que toca bien bien de verdad”
¿Cómo influyeron proyectos como Flora Dance, Playa Nevada o Monteavaro en tu visión musical y tu forma de tocar?
(Tiraya) Aparte de todas las cosas buenas que te da crear algo con otras personas. Creo que aprender a escuchar es con lo que más me quedo de esa época. Con Flora Dancejammeabamos bastante, y eso me ayudó a aprender a escuchar y acompañar. Algo que creo que es vital entender.
¿Qué aprendiste de la experiencia con bandas de versiones y orquestas? ¿Qué te impulsó a decidir que ya no querías tocar para nadie más?
Aprendí que no quería hacer versiones ni tocar en orquestas nunca más lol. Ahora en serio, aunque sí es cierto que pasar por una orquesta te curte y te da muchos skills, algo que agradezco, las condiciones laborales y el repertorio no era lo que buscaba. Es un sector de la música precario a veces.
“Mi amigo Manu me impulsó a producir y sin darme cuenta estaba ya haciendo temas de electrónica fusionada con mis influencias en ese momento, que eran la salsa, una de las constantes musicales en mi vida y el house old school”
¿Qué querías contar cuando lanzaste tu primer EP Fresquísimo y cómo describirías ese sonido?
(Tiraya) Mi amigo Manu me impulsó a producir y sin darme cuenta estaba ya haciendo temas de electrónica fusionada con mis influencias en ese momento, que eran la salsa, una de las constantes musicales en mi vida y el house old school. No sabría cómo describirlo la verdad, electrónica fusión. Fresquísimo viene de mi partida de Flora Dance. La realidad me echaron como un perro y yo estaba picadísimo jajaja. Ahora lo pienso y me río porque, además, los integrantes de la banda y yo somos cercanos a día de hoy. Pero en ese momento me dolió muchísimo. Eran mis amigos y las personas con las que compartí casi dos años de mi vida de una manera muy intensa. Pero eso, viene de quiero hacer algo que lo sienta mío y de nadie más que yo tenga opinión. No es el lado mas luminoso desde donde hacer las cosas pero así fue como empezó. Luego eso se fue diluyendo por suerte.

“Mi primera vez pinchando fue en un concurso de djs que montó la sala Maravillas, el cual perdí jaja. Luego de ahí ya me ofrecieron la residencia en Siroco y hasta ahora no he parado”
¿Cómo fue el salto de productor a DJ? ¿Qué encontraste en la cabina que nohabías sentido sobre el escenario?
(Tiraya) A mi me coincidió el empezar a producir y sacar temas con ir al festival portugués Paredes de Coura, un festival realmente increíble e inspirador que recomiendo a todo el mundo. Una de las noches fue el set de Jayda G. Una dj británica que pincha soul, house y disco. El set para mi fue como una revelación, a partir de esa noche no tenía nada más en la cabeza que pinchar. Al llegar a Madrid me pillé una controladora de 30 € casi de juguete y a darle. Mi primera vez pinchando fue en un concurso de djs que montó la sala Maravillas, el cual perdí jaja. Luego de ahí ya me ofrecieron la residencia en Siroco y hasta ahora no he parado. Y no sabría como explicarlo, pero al menos para mi, es mas jarto a nivel de conectar con la gente el hacer un cierre para 400 personas como dj que tocar para 3000.También he de reconocer que yo nunca he tocado mis canciones para 3.000.

“Duty Free empezó con ese concepto, como una fiesta ecléctica y de bastardeo en cuanto a música y concepto de club se refiere. En una misma sesión pinchaba house, slow tempo, reggaetón oldschool, merengue, folktrónica, tech house, r&b, cumbia, salsa, guaracha, techno o los chichos”
¿Por qué decidiste empezar a montar tus propias fiestas? ¿Qué te faltaba en la escena que quisiste crear tú mismo?
Quería pinchar de manera más continua y no era fácil conseguir fechas, recuerdo que mandar muchos mails y no recibir contestación alguna, así que me centré en la residencia de los jueves en Siroco y le di el nombre de Duty Free. Me faltaba una fiesta con más variedad musical, no me hace mucho sentido lo mismo durante 6 horas,bpor mucho que me guste termino perdiendo interés. Duty Free empezó con ese concepto, como una fiesta ecléctica y de bastardeo en cuanto a música y concepto de club se refiere. En una misma sesión pinchaba house, slow tempo, reggaetón oldschool, merengue, folktrónica, tech house, r&b, cumbia, salsa, guaracha, techno o los chichos. ¡Era divertidísimo! Aunque ya mis sesiones ni de cerca no son así, mantengo ese espíritu. Con los años he aprendido a hilar mejor y más elegante.

¿Qué filosofía hay detrás de Duty Free, Nuebo Club o Mazo Club, y cómo las fuiste hilando con tu discurso artístico?
(Tiraya) Para resumirlo se podría decir que la filosofía del equilibrio y la variedad. Hay momentos de la noche que un house entra brutal, así como otros que es el techno, o latin core e incluso una buena salsa baúl. Mi discurso y las fiestas se han ido juntando porque al final son un poco lo mismo, defender cierta variedad y cierto giro en cuanto las cosas. Eso para mi es lo que lo hace interesante. Tampoco es siempre así, hay fiestas o festis en las que el público va a algo en particular y no soy cabeza de cartel, yen esos me ciño al guion. Algo que por suerte también me gusta.
“Hay momentos de la noche que un house entra brutal, así como otros que es el techno, o latin core e incluso una buena salsa baúl”
¿Qué te llevó a reivindicar el eclecticismo en la pista como un acto casi político dentro de la cultura club?
(Tiraya) Primordialmente porque no había nada así. Y sobre todo porque a la gente le encanta y se lo goza. En Mazo Club en una noche puede haber un dj de urban otra de latin core y otra de techno, y la pista está on fire desde que empieza hasta que acaba. ¿Cómo no defenderlo? Hablando de Mazo Club, la siguiente es el 27 de septiembre :).

¿Cómo reacciona el público cuando lo sacas de la lógica de un solo género durante toda la noche?
(Tiraya) Al principio habían caras jaja, a día de hoy todo el mundo lo pilla y les encanta. Si los timetable están bien organizados, nadie se aburre ni siente la necesidad de cambiar de club a mitad de la noche.
“También creo que ahora nadie se casa con nada y eso me parece buenísimo, a veces cotilleo en las playlist en las que la gente mete mis temas y en las mismas listas hay temas de Sabina, Vera Fauna, Post Malone y Amaia”
¿Sientes que has conectado especialmente con la nueva generación de clubbers? ¿Qué te devuelven ellos que no encontrabas antes?
(Tiraya) Creo que sí, yo en parte también soy un nuevo en el mundo clubbing. Antes estaba fuera de la electrónica e iba a garitos muy diferentes. También creo que ahora nadie se casa con nada y eso me parece buenísimo, a veces cotilleo en las playlist en las que la gente mete mis temas y en las mismas listas hay temas de Sabina, de Vera Fauna, Post Malone y de Amaia. Un poco lo que te comentaba antes, las pillan al vuelo.

Has compartido cabina con artistas como Baiuca, Populous o Chancha Vía Circuito. ¿Qué te llevas de esos encuentros?
(Tiraya) Todos son gente maravillosa. Algo que me llamó la atención las primeras veces era la ética laboral impecable con la que hacían todo, algo que para mi, que era más punky a la hora de hacer las cosas, me ayudó mucho a mejorar mi manera de trabajar.
“Pinchar fuera siempre es especial, conoces gente increíble y conoces las ciudades desde otro sitio muy diferente a cuando vas de turista, algo que me encanta”
¿Qué impacto tuvo para ti pinchar en ciudades como Londres, Berlín, Ámsterdam o Los Ángeles? ¿Se recibe tu propuesta de forma distinta fuera?
(Tiraya) Pinchar fuera siempre es especial, conoces gente increíble y conoces las ciudades desde otro sitio muy diferente a cuando vas de turista, algo que me encanta. En cuanto a la propuesta, siempre es muy bien recibida, no diría mejor o peor que España o Madrid, pero sí que es diferente, como con más excitement.

También has girado por México. ¿Qué diferencia encuentras entre las escenas de club en Latinoamérica y en España?
(Tiraya) En México el público es increíble. Ciudad de México Es uno de mis sitios favoritos para pinchar o tocar del mundo, la gente se implica muchísimo y si están disfrutando te lo dejan ver. Aparte se come riquísimo. Es un sitio muy especial.
“Ciudad de México Es uno de mis sitios favoritos para pinchar o tocar del mundo, la gente se implica muchísimo y si están disfrutando te lo dejan ver”
¿Qué significó para ti formar parte de Zuaraz y del colectivo Jazz Bizzies? ¿Cómo nutrían esos proyectos tu faceta rítmica y colaborativa?
(Tiraya) Ha sido un regalo de la vida. La calidad musical y humana de ambos proyectos es estratosférica, y su visión del directo y de la música en general me ha aportado un montón, eso es algo que valoro muchísimo. Aprovecho para mandar un abrazo gigante a Sebas, Santi, Manu, Xoan y Eva de Zuaraz y a Nico, Maite, Pablo y Jesús de Jazz Bizzies :).

“Ahora mismo me encuentro en un punto de pelea constante contra mis complejos y mis rayadas. Es decir, haciendo un disco”
¿En qué punto se encuentra ahora tu proyecto Tiraya y qué puedes contar del álbum en el que estás trabajando?
(Tiraya) Ahora mismo me encuentro en un punto de pelea constante contra mis complejos y mis rayadas. Es decir, haciendo un disco. Intentando no tomarme tan en serio y escribiendo bastante, algo que antes no hacía pero que de un tiempo acá me apetece. Y bueno, ando escuchando mucho UKG, 2Step, House, Bolero, Techno, y estoy muy contento con las ideas que están saliendo. Espero poder terminarlo antes de que acabe el año.
¿Cómo defines hoy tu sonido: desde qué géneros partes y a qué lugares nuevosquieres llevarlo?
(Tiraya) Intento sonar fresh, pero no sabría cómo definirlo. Yo parto de Salsa, Guaguancó, Bolero, Reggaeton, Merengue, Cumbia, y ya luego aquí descubrí el house, el techno, la música brasileña, disco, el flamenco, el hip hop en general, todas esas influencias coexisten en mí, me gustaría tener un sonido así de variado a la vez que coherente.
¿Qué espacio quieres seguir construyendo con Mazo Club más allá de la pista:comunidad, disidencia, escena o algo aún más grande?
(Tiraya) Creo que ya hay algo de escena creada en cuanto a clubbing no monotemático, y espero que cada vez haya más. Y por supuesto nos encantaría seguir creciendo y que esto cada vez llegue a más personas, poder llevar la fiesta al punto de hacer un Open Air o un festival sería un sueño. De momento vamos a empezar a llevarla a ciudades,algo que nos hace muy felices.
Tiraya pinchará el 1 de agosto y el 27 de septiembre en la fiesta Mazo Club
