
La historia de esta vivienda empieza con su dueña: Empar, comisaria, mediadora y gestora cultural. Tras varios años en Valencia, decidió regresar a l’Horta Nord para asentarse en Alboraia junto a su pareja. Para esa nueva etapa encargó a Maria Aucejo la rehabilitación de un dúplex de 72 metros cuadrados.
Antes de la obra, el apartamento estaba muy compartimentado y con materiales añadidos que ocultaban su potencial. A causa de ello, Maria Aucejo, al frente de Ema-estudi, apostó por liberar estancias, ganar luz natural y dar continuidad a la circulación interior de este dúplex en Alboraia. En la planta baja organizó el salón, la cocina-comedor, un estudio y un aseo; en el piso superior dispuso los dormitorios, otro baño y el lavadero. Como el espacio era estrecho y alargado, la arquitecta ideó una cocina triangular que abre diagonales y facilita la conversación, colocó el lavabo en la zona de paso para evitar pasillos incómodos y enlazó el lavadero con el distribuidor, de modo que la claridad natural se extendiera hasta la escalera.

Materiales con memoria
Concluida la dimensión funcional, Maria Aucejo dirigió su atención hacia la memoria material de la vivienda y la manera de fundirla con elementos nuevos. Conservó el zócalo alicatado preexistente y lo usó como guía para elegir los colores de los baños, donde predominan los azules y los tonos mostaza. El mármol macael, presente en el lavadero original, pasó a cubrir también las encimeras de la cocina y aseos, y así generó una continuidad que conecta todas las zonas del inmueble. Además, la arquitecta recuperó el tono natural de la madera en la escalera y la dotó de una barandilla con malla. Por último, dejó a la vista pilares y forjados de hormigón para mostrar su textura en contraste con la cubierta de madera de la planta alta.



Técnica a la vista
En cuanto a la climatización, la arquitecta resolvió el sistema con un conducto de acero inoxidable que atraviesa la cocina-comedor, queda visible en algunos tramos y se oculta en otros, lo que ayuda a mantener la altura de este dúplex en Alboraia y a convertir la instalación en parte del diseño.


El estudio de Maria Aucejo Mollà
Ema-estudi se fundó en 2019 bajo la dirección de Maria Aucejo Mollà (Valencia, 1993). Con sede entre València y Barcelona, el despacho trabaja con un equipo reducido que se adapta a cada encargo mediante colaboraciones específicas. Tal como nos comenta, su práctica no se centra en la cantidad de proyectos, sino en seleccionar aquellos donde pueda implicarse de principio a fin.
Aucejo subraya que la clave de su labor reside en la cercanía con el cliente y en la flexibilidad durante el proceso: “Trabajamos con mucha empatía durante todo el proceso, escuchamos e implicamos al cliente en la toma de decisiones y acompañamos en el proceso siendo muy creativos y resilientes con los cambios e imprevistos”.



Asimismo, la arquitecta incide en que la información que reciben de quienes habitarán la vivienda resulta determinante: “Cuanta más información nos den, más nos podremos poner en su lugar y encontrar la mejor manera de resolver los retos”.
Además de la relación con el usuario, el estudio le concede mucha importancia al contexto y a la memoria de cada espacio. “Estudiamos el contexto o las huellas de otros habitantes en caso de intervención en proyectos ya construidos y nos preguntamos cómo poner en valor la memoria de los lugares”, explica Aucejo.


Ficha técnica del dúplex en Alboraia
Arquitecta y dirección de obra: Maria Aucejo (ema-estudi).
Colaboradores: Adrián Ripoll, Paula Castellanos, Alejandro Precioso.
Cliente: Empar, comisaria y gestora cultural.
Superficie construida: 72 m².
Ubicación: Alboraia, Horta Nord, Valencia.
Programa: planta baja con salón, cocina-comedor, estudio y baño; planta alta con dos dormitorios, baño y lavadero.
Constructora: Recoluxe.
Carpintería y mobiliario a medida: Lebrel.
Fotografía: Pol Masip.
Materiales empleados:
-Zócalo cerámico preexistente utilizado como referencia cromática.
-Mármol macael en lavadero original ampliado a encimeras de cocina y baños.
-Pilares y forjados de hormigón vistos.
-Cubierta de madera en planta superior.
-Alicatados de Ceràmica Ferrés.
-Pavimento porcelánico de Peronda.
-Conducto de climatización en acero inoxidable visto.
Periodo de ejecución: junio de 2024 – julio de 2025.
Tiempo de desarrollo: un año desde los primeros bocetos hasta la finalización.