El restaurante Ekö Bistró acaba de abrir en la madrileña calle Sagasta y, a simple vista, tiene muy buena pinta. Se nota que hay trabajo detrás, un ojo atento a los detalles y una idea bien armada de lo que quiere ser.
Al mando de Ekö Bistró, dos nombres jóvenes: Íñigo Uribe Paredes, chef madrileño de 25 años, y Eden Monoyez, sumiller francés de 26. “Partimos de lo tradicional, porque por algo los clásicos lo son, pero le damos una vuelta: ofrecemos algo nuevo sobre algo ya conocido”, explican. Uribe viene curtido de los fogones de Mario Sandoval; Monoyez se formó en Burdeos, y juntos han construido un proyecto donde la cocina gala lleva la voz cantante, realzada, eso sí, con pinceladas de nuestra amada gastronomía española.
Imágenes superiores: 1) Milhojas de Pistacho 2) Selección de taramas Petrossian
Dos formas de disfrutar y descubrir: barra o salón.
Ekö Bistró ofrece un formato barra que está disponible de 13 a 23.30 hrs. Allí puedes probar su selección de Taramas Petrossian (16€) que vienen servidas con pan sardo, un Tartar de Tomate con helado de lima (9 €) o su Brioche a la carbonade flamenca (14€), entre otras delicias, y acompañarlo con uno de sus sugerentes cócteles como, por ejemplo Ophelia (12 €) . Este cóctel fresco y cítrico esconde Haku vodka, lima, hibiscus, vermut blanco y espuma de lichi. Los platos de barra se pueden pedir también en el salón, pero no al revés. Al final de artículo te dejamos las dos cartas: la del salón y la de barra.
Algunos de los platos de Ekö Bistró en salón
En su carta, nos llaman la atención varios de sus platos. Empezando por los entrantes, despiertan nuestro especial interés el Éclair de foie gras con Macallan y mole negro (16€), el Carabinero flambeado en curry y coco (24€), o el Carpaccio de remolacha, vinagreta francesa, pistacho y helado rulo de cabra (16€). Y, puestos a elegir, difícil pasar por alto la Ostra Black Pearl (9€) o los Portobellos rellenos de mojama y gratinados con piccalilli (16€).
Íñigo Uribe Paredes y Eden Monoyez.
En los principales, Ekö Bistró mantiene su singularidad, poco común incluso en una ciudad tan repleta de lugares donde comer bien como Madrid. Vemos el influjo de nuestro país vecino en el Lenguado a la Meunière con trompeta de la muerte (35€) o en el archiconocido Ratatouille (18€). En cambio, el Pez limón a baja temperatura, con salsa de berberechos y tirabeques (22€) une materia prima nacional y técnica extranjera: la cuisson à basse température, sistematizada y popularizada en la restauración gala de los setenta.
Lenguado a la Meunière con trompeta de la muerte.
Brioche a la carbonade flamenca.
Ostra Black Pearl.
Y en los postres, la historia se repite: Francia, Francia y más Francia. El Baba au Rhum Brugal 1888 (9 €), las Milhojas de pistacho (11 €) o el Choux de vainilla y frambuesa (7 €) confirman la devoción por la pâtisserie de la patria de Voltaire. Solo en Recuerdos de infancia, pan con chocolate (10 €) Íñigo Uribe Paredes cambia de registro y versiona, a su manera, una de las meriendas más típicas del imaginario ibérico.
La carta líquida
La propuesta líquida de Eden Monoyez traza el recorrido de su autor. En Londres descubrió el sake japonés, en Edimburgo el whisky, y de ambos lugares trajo el gusto por beber con curiosidad. Su menú reúne referencias escocesas y niponas, a las que se suman algunas cervezas. En la barra, Alessandro Pardo comanda una coctelería que respeta el clasicismo sin renunciar a probar caminos nuevos, con creaciones que se nutren de la pintura y la poesía, y una sección de mocktails, fórmulas sin alcohol.
Caramelo salado, otro de los postres del local.
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Ekö Bistró
Dirección: Sagasta, 23.
Horario: de lunes a domingo de 12 de la mañana a 1.30 de la madrugada.
Horario del restaurante, de 13 a 16.30 y de 20 a 23.30. Barra abierta ininterrumpidamente.
Ticket medio: 60 euros.
Tel.: 915 78 37 87
Aquí puedes ver la carta general del salón
Aquí puedes ver la carta de barra y bebidas
