
Con dos velas ya encendidas, es el momento de hablar de Onoé, un restaurante de Madrid cuyo propósito es que quien cruce su puerta descubra el verdadero sabor de la cocina libanesa.
Y tenemos razones de peso para afirmarlo, ya que Rayan El Hamoush y Reem Jundi, creadores del restaurante libanés Onoé, legan en cada uno de sus platos las recetas que formaron parte de su infancia y perfumaron sus hogares, aunque adaptadas a su estilo. Quizá esa sea la razón por la que los comensales regresan y reservan un hueco, tanto en su estómago como en su memoria, para este lugar ubicado en el barrio Salamanca (Madrid).

Una carta para compartir en Madrid
La carta del restaurante libanés Onoé se sustenta en el concepto del mezze, que, como explica en sus páginas, es “una forma social de compartir la mesa con una variedad de pequeños platos servidos como aperitivos o tapas”. En ella, Rayan y Reem fusionan culturas, y podemos encontrar especialidades libanesas tan tradicionales como el Hummus mezcladas con chorizo (15 €), pulpo (24 €) o solomillo al pesto (24 €).

Rayan El Hamoush y Reem Jundi.

Hummus con pulpo.
Ahora bien, si hay un protagonista indiscutible en esta cada de comidas, ese es el Shish momo (15 € media ración / 29€ ración), la obra del padre de Reem elaborada con solomillo de ternera, crema de cacahuete, hummus y muhammara. Además, el establecimiento les da una vuelta de tuerca a sus shawarmas de pollo (10 €), ternera (11 €) y pato (13 €), supliendo el pan de pita y sirviéndolos en un taco mexicano.
Novedades del restaurante libanés Onoé
Con motivo de este aniversario, llegan novedades a la carta de este local en Madrid. El Tzatziki de remolacha (8 media ración/ 13 € ración), las Hojas de parra (8 € media ración/ 15 € ración), la Batata harra (8 €) y la Ensalada griega (10 € media ración/ 18 € ración), con tomate, pepino, pimiento verde, cebolla, aceitunas kalamata, queso feta, zaatar y vinagreta, son apuestas repletas de color, textura y atractivo.


Batata harra.

Tacos de shawarma de pollo.

Tacos de shawarma de ternera.
Para los más golosos también hay sorpresas: el restaurante Onoé suma a su menú dos postres libaneses clásicos donde los haya. Hablamos del Knafe (8,5 €), pastel de pasta kataifi relleno de queso y cubierto con almíbar y pistacho, y de la Muhalabiya (6 €), pudding de leche y agua de azahar.

Sidra libanesa Wata.

Helado de Tahini con miel.
Por último, también se puede disfrutar de nuevos vinos libaneses y sirios, entre ellos el Château Marsyas, en blanco (38 €) y tinto (49 €), y el Domaine de Bargylus (58 €).