
Conceptual y artístico, sacando lo mejor de sí mismo, Langarica —la marca de Bruno Langarica— representa una oportunidad de cambio para la moda sin género, a través de la reinterpretación de las prendas tradicionales.
Bruno Langarica tiene 22 años y es un diseñador de moda cuyo nombre empezará a sonar con fuerza en 2026. Su trabajo, inspirado en el folclore andaluz y la poesía, se fue consolidando en el taller de JCPajares, donde experimentó y definió los mensajes que desea transmitir a través de sus nuevas propuestas. Uno de los looks que ha puesto todas las miradas sobre él es el que ha llevado el cantante Mayo en el festival Coca-Cola Music Experience 2025, una auténtica carta de presentación para la industria.
Entrevista: Míriam Martínez.
Bruno Langarica. Crédito: @langarica.studioo / Arriba: Diseño de la colección, Ornement de retou.
“El propósito principal es vestir a estas nuevas masculinidades que no tienen miedo a disfrutar de la moda”
¿Cómo definirías Langarica en el panorama actual de la moda?
Langarica es una marca emergente muy pequeña que está dando sus primeros pasos en la industria y que, poco a poco y con la ayuda adecuada, intenta posicionarse en el panorama nacional y consolidar su identidad. Desde el principio fue creada para disfrutar y pasármelo bien con la moda y la costura de una manera más personal. Mentiría si dijera que no sueño con que algún día se desarrolle de forma mucho más profesional, pero ahora no me centro en eso; mi prioridad es disfrutar del proceso.
Para conocer mejor Langarica, ¿quién es su diseñador?
Aunque Langarica somos muchos de una forma u otra, su diseñador soy yo: Bruno Langarica, un joven logroñés de 22 años, a punto de convertirme oficialmente en diseñador de moda. A pesar de mi juventud y de aún no tener el título, puedo sentirme muy orgulloso de todo lo que he logrado en este mundo: desde trabajar como asistente del diseñador JcPajares hasta participar en desfiles y concursos, y alcanzar diversos logros con mi pequeña marca.
Así es la visión de la masculinidad de Langarica: look de la colección Subversio y olé. Crédito: @losjuanchys
“Es una masculinidad que apuesta por la exageración, por llamar la atención y por llevar al extremo el sentimiento de reivindicar la ornamentación”
Nosotros entendemos Langarica como una marca masculina orientada a vestir nuevas masculinidades. ¿Hemos acertado?
Exacto, ese es el objetivo principal de la marca, aunque sin descartar vestir también a mujeres, ya que, evidentemente, la ropa no tiene género. Pero, como he dicho, el propósito principal es vestir a estas nuevas masculinidades que no tienen miedo a disfrutar de la moda y que se sienten cómodas usando lo que desean, sin importarles la opinión de los demás.
Te conocimos por el look de Mayo en su concierto de Coca-Cola Music Experience 2025. ¿Cómo surge la colaboración con el cantante? ¿Nos puedes describir el look?
Antes ya había trabajado con Carlota, su estilista, y un día recibí un mensaje suyo que decía: Tenemos esta propuesta y muy poco tiempo, pero hemos pensado en ti para hacerlo, ¿te animas a la locura? Obviamente, no dudé ni un segundo en aceptarlo, especialmente con un equipo como Carlota y Mayo, que hacen todo tan cómodo y tan guay. Me contaron que Álvaro tenía bastante clara la estética que quería para el look y, tras un par de bocetos mezclando sus inspiraciones con un poco de la identidad de Langarica, creamos esa fantasía de conjunto.
Imagen de la colección Centuria Neutra.
“Langarica es una marca emergente muy pequeña que está dando sus primeros pasos en la industria”
Aparte de Mayo, ¿te gustaría vestir a otro cantante de este mismo estilo? ¿A quién?
Me encantaría seguir vistiendo a artistas que, como Mayo, encajan a la perfección con nuestra filosofía y que, a la vez, forman parte de mis referentes y cantantes favoritos, como Guitarricadelafuente, Leo Rizzi o incluso Amaia. Así, sin cerrar otros caminos, como ya he dicho.
Tu colección más reciente es Ornement de Retour. Cuéntanos, ¿de qué trata?
Es una colección que busca recuperar el derecho al adorno masculino, apoyándose en la estética camp. Queríamos que el arte de ornamentar la estética y la vestimenta masculina —que a partir del siglo XVIII fue duramente reprimido— volviera a estar presente, pero con la diferencia de que, esta vez, no implique una diferenciación de clases ni una lucha de estatus. ¿Por qué, si Luis XIV se ponía un tacón altísimo y una peluca era considerado más “macho”, si lo hago yo ahora me llaman maricón?
En esta propuesta, uno de los fundamentos de tu marca es la artesanía. ¿Cómo la introduces en esta colección?
Exacto, la artesanía siempre está presente en nuestras colecciones. Por un lado, se puede ver en el bordado a mano, que es una de nuestras señas de identidad. Pero, además, en esta colección presentamos dos prendas repletas de flores de organza creadas a mano, pétalo por pétalo, hasta conseguir unas 500 flores que repartimos entre una falda y un corsé.

“¿Por qué, si Luis XIV se ponía un tacón altísimo y una peluca era considerado más macho, si lo hago yo ahora me llaman maricón?”
Para aprender más sobre tu moda, ¿en qué debemos fijarnos de esta nueva colección para entender tu visión de la moda masculina?
Para mí, la moda masculina es una moda sin límites. Es una mezcla perfecta entre lo que comúnmente y, desafortunadamente, entendemos como prendas de hombre y de mujer. Por ejemplo, pantalones muy anchos con cortes más “masculinos” combinados con corsés que ciñen la figura y que están adornados con flores o bordados.
En la descripción de tu nueva colección, destacas la masculinidad camp. ¿Cómo nos la puedes explicar?
Es una masculinidad que apuesta por la exageración, por llamar la atención y por llevar al extremo el sentimiento de reivindicar la ornamentación. Es una masculinidad a la que, sobre todo, no le importa lo que otros puedan opinar sobre cómo visten y se muestran al mundo.

Eres una de las voces más jóvenes de la industria y nos gustaría saber: según tu opinión, ¿qué cambiarías o qué le falta a la moda española?
Creo que tenemos la suerte de vivir en un país que apoya y da mucha visibilidad a diseñadores jóvenes y emergentes como yo. Sin embargo, aún faltan oportunidades que se alejen de la precariedad, para poder formarnos y aprender dentro de la industria de la mejor manera posible: trabajando sin ser explotados.
A la hora de inspirarte o desarrollar tus ideas, ¿qué marcas, diseñadores o personas te influyen?
Cuando empiezo una nueva colección, siempre busco un concepto principal, que suele estar relacionado con colecciones anteriores o con las señas identitarias de la marca. A partir de ahí, comienzan a tomar protagonismo varios de mis referentes, como Palomo Spain, Egonlab o personas más cercanas, como mi tío Iván.
¿Tienes ya planes para 2026?
De momento, planeo presentar mi próxima colección a principios de año, que servirá como mi TFG para convertirme oficialmente en diseñador de moda. A partir de ahí, quiero seguir invirtiendo y trabajando para que Langarica no deje de crecer, y también desarrollar algún que otro proyecto que me hace mucha ilusión, aunque todavía está por desvelar.