Los detalles de Lone Star de Schiaparelli tienen su origen en el surrealismo de Elsa. Daniel Roseberry utiliza esta influencia para expresar su concepto de feminidad a través de la obsesión de la maison: la anatomía.
Daniel Roseberry ha viajado al pasado a través de los detalles de la colección de Schiaparelli para Otoño-Invierno 2025-2026. Concretamente, el diseñador se remonta al legendario vestido esqueleto de Elsa Schiaparelli de 1938. A partir de este diseño, Roseberry ha configurado una anatomía que hemos podido ver, disfrutar y archivar en Lone Star, una de las propuestas donde resulta más patente la tensión entre lo duro y lo delicado en la feminidad moderna.
Fotografías oficiales de la colección Lone Star de Schiaparelli. Crédito: @schiaparelli
Daniel Roseberry, para Lone Star y los detalles que incorpora, viaja a 1938, inspirándose en el vestido esqueleto de Elsa Schiaparelli.
Después de Back to the Future, donde Daniel Roseberry sitúa la forma, el detalle y el simbolismo en el eje central de su juego creativo, llega el momento de echar la mirada atrás. Para la colección de Schiaparelli Otoño-Invierno 2025-2026, Lone Star, perteneciente a la línea Ready-to-Wear, el diseñador recuerda la importancia del vestido esqueleto de Elsa Schiaparelli de 1938.
Se ha tratado de un diseño que ha transportado, por un lado, al surrealismo más puro gracias a la representación de la anatomía humana. A través de un vestido de cóctel negro y ajustado, nos hemos encontrado ante una pieza con una clara inspiración en Dalí, artista con el que Elsa Schiaparelli ha colaborado estrechamente. Una colaboración que ha permitido a Roseberry seguir trabajando sobre la base de la anatomía y trasladarla a su colección Lone Star.
Roseberry incorpora este surrealismo en detalles como ojos y bocas aplicados en los bolsos.
¿Dónde está presente esta inspiración en la colección Lone Star de Schiaparelli? A través de la fascinación que aún hoy ejerce el surrealismo de la década de los cuarenta, el diseñador lo incorpora mediante bordados anatómicos que esculpen vestidos de noche; orejas y ojos dorados que brillan en joyas y cinturones; y tachuelas surrealistas que trazan constelaciones sobre la piel de los pantalones. Sin olvidar que el asa redonda del bolso Soufflé incorpora amuletos de devoción. Así es como Roseberry integra el concepto de la anatomía en su visión de la feminidad.
El oro es el principal material que se utiliza para estos detalles.
Los detalles de la colección de Schiaparelli se han basado en la importancia de la anatomía del cuerpo femenino.
En esta colección, Lone Star, ha sido imposible no detenerse en cada uno de los detalles de Schiaparelli. En particular, han destacado los ojos, las orejas, los labios y las manos, que se han transformado en adornos. De este modo, el cuerpo se ha convertido en un lienzo surrealista. No ha habido duda de que Roseberry ha sido un diseñador que ha seguido y se ha sumergido, hasta límites insospechados, en la manera en que Elsa Schiaparelli ha incorporado el surrealismo a la moda.
Y no lo ha hecho sola: como ya hemos mencionado, colaboró estrechamente con Dalí y también con Jean Cocteau. Este último, poeta, dramaturgo y pintor francés, ha creado en los años treinta abrigos y vestidos con manos y rostros ilustrados por él. Así, la moda se ha elevado a la categoría de obra de arte portátil.
Como cierre sobre la incorporación del concepto de anatomía por parte de Roseberry, destaca el uso del color. El diseñador ha optado principalmente por el oro y, en menor medida, por la plata, para centrar la atención en la silueta humana. De este modo, juega con la obsesión que han tenido todos los directores que han pasado por la maison: el esqueleto, que actúa como caparazón de la fuerza femenina.
Descubre en la web oficial de Schiaparelli cómo son los detalles de esta colección, Lone Star.
