
Efímera inicia su andadura con una exposición colectiva de cuatro artistas locales y una muestra dedicada a la construcción de su identidad visual.
El pasado viernes 3 de octubre, Murcia fue testigo del nacimiento de Efímera, un nuevo espacio de arte contemporáneo que se sitúa en el cruce entre creación, pensamiento y prácticas multidisciplinares, con una dimensión editorial que prolonga la experiencia más allá del espacio físico a través de XYZ, su revista trimestral.
Imagen superior: Vistas de la exposición con obra de Pilar Acosta. Foto © Pilar Morales
Vistas de la exposición con obra de Paco Vivo. Foto © Pilar Morales
El arte de lo efímero
La exposición inaugural, El arte de lo efímero. Gotas de eternidad, reúne a cuatro artistas locales —Pilar Acosta, Iván Arana, Mario Rubio y Paco Vivo— en un recorrido que explora la materia como lugar de memoria y resistencia. En paralelo, se presenta Mirar atrás. Seguir adelante, un proyecto del artista y diseñador Diego Lizán que desvela el proceso creativo detrás de la identidad visual de Efímera, concebida como un sistema abierto y mutable que crecerá con el propio espacio y se conectará con su línea editorial a través de la revista trimestral XYZ, donde se publicarán textos, imágenes y propuestas críticas que amplían el diálogo iniciado en sala.
Vista de la exposición. Foto © Pilar Morales
Impulsada por Belén Vera, fundadora y directora de Efímera, esta doble propuesta marca el tono del proyecto: un espacio vivo que reivindica lo local, se abre a lo internacional y entiende la exposición no como un fin, sino como el inicio de un relato compartido. “La gran ventaja de ser un espacio en transformación es la maleabilidad, la capacidad de adaptarse y reaccionar a los continuos cambios que atraviesa el arte contemporáneo. Nuestro reto está en sostener esa apertura de manera coherente, pero creo que en esa tensión entre cambio y coherencia es donde Efímera encuentra su fuerza y su singularidad.” —Belén Vera.
Inauguración de Efímera entre amigos. Foto: © Pilar Morales
Un refugio para la creación contemporánea
Efímera nace como un lugar alternativo dentro de la escena murciana, un espacio libre de convenciones donde el arte contemporáneo no solo se muestra, sino que se vive. No es una galería al uso, sino un proyecto en construcción permanente, en el que cada exposición funciona como un capítulo de un relato colectivo. La filosofía de Efímera se centra en celebrar lo transitorio, lo experimental y lo procesual, reivindicando el valor del arte local y poniéndolo en diálogo con otras voces nacionales e internacionales. Aquí, lo efímero no significa fugaz, sino intenso: un acontecimiento que deja huella, que invita a pensar y a habitar el presente de manera consciente.

Vistas de la exposición con piezas de Iván Arana. Foto: © Pilar Morales
“Murcia es mi lugar de vida y de observación, y desde aquí quiero abrir un espacio que dialogue con lo que ocurre en el mundo. Efímera no nace desde la periferia, sino desde un punto de cruce, desde un territorio que puede aportar su propia voz y, al mismo tiempo, conectarse con discursos tanto nacionales como internacionales.” — Belén Vera
Mario Rubio. El filo
La exposición inaugural: cuatro miradas sobre la materia
La muestra El arte de lo efímero. Gotas de eternidad propone un diálogo entre cuatro artistas que, desde generaciones y lenguajes distintos, coinciden en su interés por la materia como espacio de transformación. Pilar Acosta transita entre la pintura, la escultura y la instalación para explorar lo orgánico, lo filtrado y lo velado; sus piezas, construidas con materiales encontrados y residuos marinos, invitan a detenerse y a mirar lo que normalmente pasa desapercibido. Iván Arana se adentra en los estudios queer para interrogar el cuerpo y el deseo, desplegando instalaciones, serigrafías y litografías que confrontan los imaginarios normativos y abren espacio a nuevas formas de representación de las identidades disidentes.
Pilar Acosta. Estudios sobre mallas, 2024-2025
Mario Rubio, por su parte, convierte objetos y materiales pobres en arquitecturas poéticas que cuestionan la linealidad de la realidad; sus llamados “juguetes del Antropoceno” abren grietas para imaginar otros caminos posibles en un mundo marcado por la crisis ecológica y la incertidumbre. Finalmente, Paco Vivo presenta una práctica multidisciplinar que va de la pintura a la instalación, con obras que se mueven entre lo figurativo y lo abstracto, entrelazando naturaleza y cultura para hablarnos de fragilidad, memoria y posibilidad.
Paco Vivo. Sin título
“El arte local tiene una fuerza enorme, pero a veces carece de plataformas para mostrarse en diálogo con otras voces. Con esta exposición inaugural queríamos justamente poner en valor trayectorias diversas y hacer que convivan miradas consolidadas con discursos emergentes. ” Belén Vera
Inauguración de Efímera entre amigos. Foto: © Pilar Morales
El recorrido se completa con un texto curatorial del escritor cartagenero Alejandro Hermosilla, que expande el sentido de la exposición y enlaza las piezas con reflexiones literarias y filosóficas. Algunos fragmentos de este texto, junto con material adicional, se recogerán en el primer número de XYZ, la revista editorial de Efímera, que te puedes descargar en este enlace.
Mario Rubio. La enfermedad y la cura
Identidad visual: el lenguaje de Diego Lizán
En paralelo, la exposición Mirar atrás. Seguir adelante invita al público a descubrir cómo se gestó la identidad visual del espacio. El artista y diseñador Diego Lizán comparte collages, referencias y motivos que conforman el ADN visual de Efímera. Su propuesta parte del espíritu editorial de la revista Avant Garde y de la tipografía creada en los años sesenta por Herb Lubalin, rescatando un referente gráfico sólido del pasado para traerlo al presente y resignificarlo. El resultado es un sistema vivo y mutable que combina lo gráfico con lo simbólico, un lenguaje visual que crece y se transforma al mismo tiempo que el propio proyecto.
Diego Lizán. Identidad visual Efímera. Foto: © Pilar Morales
“Trabajar con Diego Lizán ha sido un proceso muy natural porque compartimos la idea de vivir en transformación constante, de forma consciente. Su diseño no es un logotipo cerrado, sino un lenguaje que se despliega, un cuerpo gráfico que se adapta y que cuenta historias.” Belén Vera
Diego Lizán. Identidad visual Efímera. Foto: © Pilar Morales
Así, la identidad de Efímera no se limita a acompañar las exposiciones, sino que se convierte en una extensión narrativa de su filosofía, conectando con la línea editorial del proyecto a través de la revista trimestral XYZ y reforzando la idea de que todo en Efímera está en tránsito.
Portada XYZ. Diego Lizán
Interior XYZ. Diego Lizán
Un proyecto que trasciende el espacio
Efímera no se limita a su sede en la calle Mariano Vergara, el proyecto tiene una proyección programática que busca activar la ciudad como un espacio de intercambio cultural. Además de exposiciones, se celebrarán charlas, presentaciones y otras actividades artísticas que conecten artistas, comisarios y público, fomentando una comunidad activa y crítica. En este crecimiento han sido claves las aportaciones de la arquitecta María José Climent, asesora de diseño del espacio, que ha contribuido a dar forma a un lugar flexible y vivo, pensado para acompañar los procesos artísticos.
Vista general de la exposición. Foto: © Pilar Morales
Dentro de esta visión expandida, la música ocupa un lugar central. Cada trimestre, el experto musical Javi Botella comisará una selección de piezas que acompañarán las muestras y generarán atmósferas sonoras en diálogo con las obras. La sección Derivas musicales subraya esta dimensión, entendiendo el sonido como un territorio de exploración; en esta primera edición, se presenta el último trabajo de la artista sonora Susana López, que resonará en el espacio a lo largo del trimestre y que además tendrá un momento de activación en directo, invitando al público a vivir su propuesta como experiencia performativa.
Vista general de la exposición. Foto: © Pilar Morales
“La música es fundamental en Efímera. Es quizá la más inmediata de las artes y ha acompañado a prácticamente todas las manifestaciones artísticas que podamos recordar. Las conexiones con el arte contemporáneo son infinitas y nos interesa explorarlas.” Belén Vera
Vistas de la exposició. Foto © Pilar Morales
Slow Art y ecología
En un mundo acelerado, Efímera propone otra temporalidad, un arte que se cocina a fuego lento, que atiende a los procesos y escucha a las personas. No busca la inmediatez, sino un crecimiento sereno y consciente, hecho con mimo, cuidando los detalles y consolidándose paso a paso. La sostenibilidad y la urgencia medioambiental atraviesan la línea curatorial del espacio, utilizando el arte como catalizador de conciencia y como herramienta para imaginar otras formas de habitar el mundo. Esta visión se traduce en una programación que invita a detenerse, observar y conectar con el entorno, dejando que cada proyecto respire y se despliegue a su propio ritmo.
Paco Vivo. Espiral de energía
La inauguración fue también un momento de celebración y un reflejo de esa filosofía, con la colaboración de Viñedos Balmoral, bodega ecológica situada a 1.050 metros de altitud, que acompañó el inicio de Efímera con su delicioso vino espumoso de larga crianza. Un brindis que recordó que lo efímero y lo duradero pueden convivir en un mismo gesto. “Queremos ser un espacio que escuche al contexto en el que habita, que dialogue con él y que permita que ese diálogo se refleje en nuestros discursos y programaciones. Apostamos por un arte de proximidad, hecho con calma y con cuidado, donde cada detalle cuenta.” Belén Vera
Inauguración de Efímera entre amigos. Foto: © Pilar Morales
Del 3 de octubre al 19 de diciembre puedes visitar las exposiciones: El arte de lo efímero. Gotas de eternidad, con Pilar Acosta, Iván Arana, Mario Rubio y Paco Vivo y Mirar atrás. Seguir adelante, por Diego Lizán. Más información sobre Efímera aquí.