Una actriz de entraña, de intuición. Asia Ortega tiene ese arte que se siente en un tablao de flamenco o en una escena final de despedida.
Es una actriz con la que conectas, con la que te imaginas un mundo para luego envolverte en él. Asia Ortega sabe vincularse con aquello que interpreta, y esta vez se adentra en una relación tóxica desde un mundo interno desbordante.
Entrevistamos a Asia a propósito de su interpretación como protagonista en Fragmentos, el nuevo film dirigido por Horacio Alcalá, donde encarna a Alba, una joven insegura que se deja llevar por la vida sin saber realmente qué quiere.
Entre tus últimos proyectos se encuentra Hamburgo junto a Jaime Lorente, ¿cómo te llegó esta propuesta?
Asia Ortega: Pues de este trabajo me llegó una secuencia en la que salía solo yo, pero es como un punto de inflexión en la película. Jaime Lorente protagoniza una película bastante dura, en la que se habla sobre la trata de personas. Y él tiene un papel bastante accionador a la hora de cambiar la situación. Trabajé con Lino Escalera, que es el director, y con Jaime Lorente para mirar un poco la secuencia y encontrar el vínculo.
Y este año también te veremos con Fragmentos, película dirigida por Horacio Alcalá
Asia Ortega: Me llegó el verano pasado, y recuerdo que el proyecto me pareció superchulo. Me gustó mucho cómo estaban escritas las secuencias de casting. Trata de las relaciones tóxicas, de cómo un amor al final puede acabar dañándote cuando igual no está siendo un amor sano o las partes que lo conforman no están trabajadas. Fragmentos es muy interesante porque trata de dos historias de amor, dos parejas que se encuentran, que a priori parece que la pareja más joven es la que tiene los problemas… Pero luego nos vamos dando cuenta de que lo que le pasa a una pareja puede desparejar a otra. Y hacerle plantearse el vínculo, es muy potente este proyecto.
¿A qué personaje das vida?
Asia Ortega: Mi personaje se llama Alba, es uno de los cuatro protagonistas. Ella es una chica huérfana, que conoce a su pareja en un orfanato y llevan toda la vida juntos. Es muy insegura, va cambiando de trabajo cada dos por tres y arranca la película con que quiere ser actriz. Entonces su pareja le regala un viaje a Lanzarote y ahí comienza todo.
¿Cómo fue grabar ahí?
Asia Ortega: Tuvo gran carga emocional. Había volcanes inactivos y la foto de la película es tremenda. Todo contrastado, con el negro de la tierra y luego el verde. Era todo muy simbólico y bonito.
Entre tus inicios se encuentra Cuando los Ángeles Duermen, ¿qué recuerdas de este primer proyecto más grande?
Asia Ortega: Fue la primera oportunidad, esa que dices: “Estoy haciendo cine.” Cada vez que miro atrás, me ayuda primero a agradecer y después a coger un poco de perspectiva. A veces, dentro de la presión que nos ponemos las artistas, te das cuenta del estrés y la presión. Además, me hace mucha ilusión porque ese film lo compartimos con Esther Expósito, fue su primera película también y ahí nos conocimos. Luego, con Tu Hijo, volvimos a coincidir. Y me parece muy bonito el ver dónde se puede llegar. Me da mucha ternura el mirar para atrás.
Tras este trabajo, vinieron muchos más de renombre como El Internado para Prime Video. ¿Cómo fue hacer este spin-off?
Asia Ortega: En el Internado creo que fue cuando noté el peso de lo que representa ser actriz. Sobre todo en rodaje porque es muy exigente a nivel físico y emocional. Grabamos cada día, a todas las horas que hagan falta…Además, de todo el tiempo de maquillaje y antes de grabar. Ahí me di cuenta del ser actriz. Fue un trabajo tremendo, tres meses en el País Vasco y muy potente. También fue el primer protagónico, noté esa responsabilidad porque la serie va conmigo.
¿Cuánto se parece Asia a Amaia?
Asia Ortega: Amaia me recuerda a mí con 15 años, ella tiene mucha fuerza y yo he madurado (se ríe). Fue un gran repaso a tu vida. De repente pones un poco de ti para que el personaje que tenga esa entraña, y al final remueve hacer eso. Es un arma de doble filo, pero fue una experiencia muy divertida.
¿Sentiste una gran presión ante tanta expectación?
Asia Ortega: Hombre, sentía la presión de estábamos en el ojo de la cantera. Creo que lo noté cuando grabamos la promo de la primera temporada y vimos todo el empeño que estaba poniendo el equipo. La verdad es que ahí te das cuenta, de que estás empezando a entrar en el ojo del huracán.
Eres una mujer disciplinada, eres bailarina y esto requiere de mucha implicación. ¿Sientes que esto se traslada a la interpretación?
Asia Ortega: Tengo mucho ese sentir de las bailarinas, y sobre todo de las flamencas. Puede estar bonito, puede estar correcto, pero no decirte nada. Yo si a mí no me dice nada la secuencia que acabo de hacer, no me gusta. Además, soy bastante de entrañas. Una actriz muy intuitiva, de toma única, y me gusta mucho la frescura de las tomas iniciales. Y el flamenco para mí es uno de los pilares que sujetan mi templo. De aquello que es el arte para mí. La interpretación sería una, pero yo sin el flamenco no sería capaz de sentir lo que siento.
Fotografía Guille Delgado
Maquillaje Barbara Mattel
Estilismo Aina Marco
Asistentes fotografía Ander Garcia y Marta Inguanzo
Asistente estilismo María Jose Catalán
