A$AP Rocky lleva su dirección creativa para Ray-Ban a lo experiencial con un espacio inmersivo instalado en Miami Beach para Art Basel.
La Ray-Ban Clubhouse no es un mero stand instalado en el marco de una de las ferias de arte más importantes del mundo. Es un lugar donde todos los visitantes pueden sumergirse de lleno dentro del universo que Rocky ha creado para la marca y en la historia que vino antes que él. Y, para abrir las puertas a esta instalación, el golden boy de la marca llevó unas gafas que son de escándalo.
A$AP Rocky con jersey de Chanel y gafas de Ray-Ban
Ray-Ban y Art Basel Miami ahora están unidos
A$AP Rocky está muy cerca de cumplir un año como director creativo de Ray-Ban y podemos decir, por todo lo que hemos visto hasta ahora, que está desempeñando el puesto como si hubiese nacido para él. Su universo de lujo urbano ha cambiado completamente la manera en que entendemos a la firma a través de colecciones súper especiales; pero también está llevando sus ideas al terreno de lo experiencial… y tampoco lo está haciendo mal.
La nueva gran cosa del director creativo es la Ray-Ban Clubhouse, una instalación que cementa la unión estratégica de la marca con Art Basel. ¿Es una tienda? ¿Un museo? Es un chapuzón dentro de la mente de Rocky y la historia de una de las marcas de gafas de sol más icónicas de todos los tiempos. Dentro, los visitantes podrán ver al detalle cómo se ve todo desde los ojos del nuevo y flamante director creativo al mismo tiempo que se puede ver cómo ha sido la trayectoria de esta marca tan emblemática. ¿Cómo? Pues ahí es donde está la cuestión de la instalación: el espacio, ubicado en el edifico público más antiguo de Miami Beach, pone en display una infinidad de pantallas que van contando esta historia… pero no os queremos hacer demasiado spoiler.
Y, para inaugurar la Ray-Ban Clubhouse, A$ap Rocky llevó unas gafas -muy- especiales
Las reediciones de los iconos Ray-Ban que Rocky ha sacado para el público han vuelto a poner a la marca en el tope. Su lenguaje de diseño, tan grandilocuente como polarizante, se ha basado en inyectar su flare de lujo urbano a siluetas que habían sido iconos inamovibles durante años. Pero, como todo buen creative director, también se hace pares exclusivos para ocasiones como esta. Y los que llevó para la apertura de la Ray-Ban Clubhouse son de lo más top.
Esas gafas son, por supuesto, unas Wayfarer. Pero la cuestión es que intervino dos pares: las Classic y las Mega con detalles -muy- especiales. Lo más obvio lo podemos ver en los cristales, que se decoran con un print de una tirita y una X (un diseño en cada ojo). Pero, aparte de esto, venían con un detalle rematado en cristales incrustados a mano que leía “Don’t Be Dumb”, como guiño al lanzamiento de su próximo álbum. ¿Las podremos llegar a comprar? Lo más probable es que no… pero a que molaría, ¿no?
