Diseñada por Paolo Rizzatto y Alberto Meda en 1985, la lámpara Berenice sigue siendo un producto referente de Luceplan actualmente por su elegancia y funcionalidad.
Esta clásica luminaria sopla las velas en su 40 aniversario. Su precisión mecánica y su ligereza marcan un largo camino que desafía el tiempo. La lámpara Berenice, cuatro décadas después de salir al mercado, sigue iluminando rincones de todo el planeta. En sus diferentes versiones mantiene su carácter y sofisticación inundando de luz los espacios.
Icono de iluminación sin fecha de caducidad
Alberto Meda y Paolo Rizzatto diseñaron cada detalle de la lámpara Berenice pensando en un producto tan sobrio como discreto. Estas características estéticas le han permitido trascender las distintas épocas y modas que han tenido lugar desde 1985 en iluminación. En su origen rompió los moldes establecidos en el diseño de luminarias para asentarse entre las mas vanguardistas. Su aspecto era arriesgado porque suponía un cambio en la forma de iluminar, pero se convirtió en una pieza referente.
La fórmula del éxito de Luceplan
Berenice se lanzó como lámpara de escritorio y ha ido evolucionando manteniendo su esencia. Luceplan a lo largo de estos 40 años ha ampliado la gama sacando otras versiones del producto. Al diseño de mesa se unieron las variantes de pared y de pie transformándose sin perder identidad. Los tres formatos mantienen las líneas definidas de la idea original, por lo que, aunque la lámpara se reinventa, no pierde su personalidad.
Su estructura, además de desprender estilo, representa la ligereza mecánica y la precisión en el movimiento. Gracias a su sistema de brazos equilibrados y a la rotación de 360 grados del cabezal de la lámpara es posible dirigir la luz para ajustarla a cada momento. Y, además de iluminar el espacio le otorga presencia.
Cumple 40 años desde su debut
Luceplan está de aniversario con Berenice. Esta lámpara atemporal, que resiste al paso del tiempo, marca la historia de la firma. Su vigencia, lograda a través de una pieza elegante que no refleja la ostentación, representa un tributo a la permanencia. Cumple su función con sencillez y simboliza el refinamiento sin arrogancia, ya que se acopla al interior de forma equilibrada.
En España, la lámpara Berenice de Luceplan puede encontrarse por un precio de entre 400 y 650 euros en función tanto de la versión como del acabado. La clásica de sobremesa es la mas económica, mientras que la de pie tiene el coste más elevado. Está disponible en tiendas especializadas como AndLight España, Light11 o El Maestro de la Iluminación, aunque en la web oficial se pueden localizar los distribuidores por zona.
Historia de los diseñadores
Paolo Rizzatto nació en 1941 en Milán. Estudió Arquitectura en el Politécnico de Milán hasta 1965 que se graduó. En 1978 cofundó Luceplan junto a Riccardo Sarfatti y Sandra Severi. Su trayectoria laboral transita entre arquitectura, iluminación y diseño de producto. Algunas de sus piezas más destacadas forman parte de colecciones del MoMA de Nueva York o el Victoria & Albert Museum de Londres. Su manera de integrar la iluminación en el espacio le ha llevado a ser uno de los profesionales de renombre del diseño italiano contemporáneo.
Alberto Meda nació en 1945 en Tremezzina (Como). Se formó como ingeniero mecánico en el Politécnico de Milán, donde se graduó en 1969. Fue director técnico de Kartell entre 1973 y 1979, antes de lanzarse como diseñador industrial independiente. Ha colaborado con Alessi, Olivetti, Philips o Luceplan. Además, ha sido reconocido con varios Compasso d’Oro y el título de Honorary Royal Designer for Industry en Londres.
Sobre Luceplan
Se fundó en Milán en 1978 con una premisa: unir tecnología, investigación y estética. Desde entonces, la marca italiana de iluminación ha mantenido una filosofía de proyecto basada en la innovación responsable, la durabilidad y la elegancia funcional. Su catálogo abarca lámparas de interior, exterior y soluciones acústicas con sello sostenible.
