Un paseo por las nubes con Lulu Figueroa

A Lulu siempre la han llamado así, Lulu. Sin tilde. Salvo en el colegio, que allí respondía al nombre de Lucila. Lucila de Figueroa y Domecq. La historia de esta joven risueña (condición millennial, añada del 86) no se entiende sin su genealogía ilustre: de nieta de la condesa de Romanones en adelante. Lulu (historiadora del arte, influencer y bloguera de moda) pertenece a una aristocracia de nueva generación cuya traducción social se mide en el impacto de las redes sociales. Ella es influencer sin aplastar en cifras de seguidores. Ella influye a ellas (casi no tiene chicos que la sigan virtualmente) no por vocación sino por naturalidad. Ella es influencer por como es, como consecuencia de como ha sido educada. Un estilo de vida que no es impostado. Es vivir con un estilo propio, uno que todavía está buscando.

Imagen superior: Lulu Figueroa e Isabelle Junot posan en la Tanqueray No. TEN Sky Garden

Un paseo por las nubes con Lulu Figueroa
Imagen superior: vista general de la terraza Tanqueray No. TEN Sky Garden

Nos encontramos con ella en lo más alto del nuevo hotel NH Collection Gran Vía, la vertiginosa azotea de Picalagartos (el restaurante de Azotea Grupo, dirigido por Javier Muñoz-Calero) que ella e Isabelle Junot han decorado como un jardín urbano que sobrevuela 360º medio Madrid. La artista y diseñadora, junto a la modelo y actriz, dan así una pincelada primaveral al proyecto del estudio TBC de Mercedes Isasa. Una pincelada tropical y sobre todo verde en la novena planta de este edificio joya del neoplateresco. Verde Tanqueray, la ginebra británica premium que inaugura de esta forma el primero de los espacios que abrirá en Europa: Tanqueray No. TEN Sky Garden. Paseamos con Lulu por la terraza, en donde nos demostró su debilidad por este verde y nos contó qué y quién es ella en realidad.

Un paseo por las nubes de Madrid con Lulu Figueroa

Un paseo por las nubes con Lulu Figueroa

Imagen superior: Isabelle Junot y Lulu Figueroa posan en la Tanqueray No. TEN Sky Garden

¿Es el primer espacio que decoras? Sí, es la primera vez que lo hago.

¿Es una labor de decoración o de diseño? Más decoración. Al final te estás inspirando en una bebida como Tanqueray No. TEN y aportando en un espacio lo que es para ti esa botella.

¿Te gusta la ginebra? Sí, me encanta. Ginebra o vodka.

¿Cómo se afronta un primer trabajo como éste? Pues como un reto. Cuando fuimos a ver la terraza hace dos o tres semanas no sabíamos ni por dónde empezar. Ha sido todo muy rápido. Muy heavy. (Risas) A partir de los ingredientes de la botella y viendo las posibilidades de la terraza, Isabelle y yo empezamos a desarrollar todo. Cada una aportábamos cosas diferentes. Ella tenía muchas ideas sobre las luces y los neones, yo sobre las plantas. Nos hemos complementado bastante bien. Pero el problema era llevar a cabo la idea. Hablé con algún amigo para que me guiara un poco porque no tenía ni idea y a partir de ahí fue saliendo todo como la seda.

¿Isabelle y tú erais ya amigas? No, no nos conocíamos de nada. (Risas) Pero fue muy bien.

¿Quién ha llevado la voz cantante? Las dos estábamos igual de verdes, no teníamos ni idea. Al final hablando la una con la otra, viniendo varias veces, nos fueron gustando las ideas que teníamos. Además, el espacio ayuda muchísimo y la fuente de inspiración que es Tanqueray No. TEN mola. Tiene un fondo verde, tropical, cítrico.

Una vez que tenéis la idea, ¿qué hacéis luego? Haces un Mood Board con las aspiraciones de las dos y a partir de eso buscas distribuidores y vienes al montaje. A veces no te dejan hacer todo lo que tú quieres. Nos hubiera gustado llenarlo todo de limones y de flores pero no nos han dejado.

Todas las plantas son de plástico. Sí. ¿Te da la sensación de que es plástico?

En algunos casos más que en otros. Bueno, pero por la noche todos los gatos son pardos, no se va a notar. (Risas) Aunque es verdad que la terraza también estará abierta por el día.

¿Te ha picado el gusanillo para decorar más espacios? No lo sé. Esto lo he hecho como algo puntual. No es lo mío…

Vale. (Se ríe) ¿Me entiendes?

Sí. Pero ¿te ha gustado la experiencia? Sí, me ha encantado. Sobre todo porque me gusta el sitio, me gusta mucho la ginebra y me gusta mucho Tanqueray No. TEN.

Estás muy identificada. Claro, tendría que ser algo que tuviera mucho que ver conmigo. Si no, no lo haría.

Un paseo por las nubes con Lulu Figueroa

Imagen superior: uno de los rincones de la azotea Tanqueray No. TEN Sky Garden

Tu currículo: eres historiadora del arte, pintora y bloguera de moda. (Pone cara de extrañeza) Ah, ¿no? Sí, sí, cierto, es que como lo cambian todo el rato… De repente eres influencer, de repente eres… Pero sí, soy bloguera. Creía que habían cambiado lo de bloguera por influencer. Estoy perdidísima.

Pues tú mandas. ¿Qué eres? Artista.

¿Es con lo que te sientes más cómoda? Sí, yo antes decía que era pintora pero me decían que quedaba raro. Artista abarca muchísimos ámbitos, así que tendría que poner artista plástica, ¿no?

Incluiría ser decoradora, que tiene también algo de artista. Sí, por supuesto, pero decir que soy decoradora…

Un paseo por las nubes con Lulu FigueroaImagen superior: Lulu Figueroa posa en la terraza Tanqueray No. TEN Sky Garden

Pintas escenas realistas y cotidianas que mezclas con muchas flores y grandes explosiones de color. Sí, cuando empecé en serio hace mucho lo hice a lo grande y pintando en óleo, pero lo dejé y volví al formato pequeño y con acuarela. Ahora estoy volviendo a lo grande.

¿Qué es lo que te gusta de la pintura? Buah, es que me flipa. Me quedaría horas sentada pintando.

¿Es lo que más te gusta? Sí, me apasiona. Yo quería hacer Bellas Artes pero siempre tenía miedo porque antes había un examen de ingreso muy difícil y me costaba. Todos los años decía que me presentaba y que lo iba a compaginar con Historia del Arte pero al final acabé Historia del Arte y nunca hice Bellas Artes.

¿Te gustaba pintar desde siempre? Sí, bueno, al principio era muy realista, luego empecé a hacer cosas bruscas con los cambios de luz, marcando mucho las luces y las sombras. He ido cambiando todo el rato y ahora estoy en un punto que necesito evolucionar. De hecho, he retomado las clases de pintura con un profesor que tuve hace muchos años para pintar al natural. Quiero seguir aprendiendo. Es una cosa que he perdido porque al final acabo pintando de una fotografía. Coges una foto y la pasas a un formato más grande, pero quiero pintar al natural porque quiero perfeccionar el retrato que es algo que me gusta mucho y es muy difícil y me cuesta muchísimo. De esa forma sale tu estilo.

Necesitas encontrar tu estilo, a ti misma. Yo creo que sí.

Un paseo por las nubes con Lulu Figueroa

Imagen superior: detalle de los cuadros de rosas de Lulu Figueroa

[A partir de aquí empieza una diatriba entre el interés de este reportero por la fotografía y el estilo. Lulu se ríe cuando le cuento que me gusta fotografiar más edificios que a seres humanos porque la arquitectura no se mueve. Corto cuando me sugiere dejar el periodismo y retomar mi vieja afición.]

Estamos hablando demasiado de mí. Sí quieres damos una vuelta por la terraza y te voy contando.

Mejor.

Un paseo por las nubes con Lulu Figueroa

Imagen superior: detalle de algunos cuadros de Lulu Figueroa

[Lulu Figueroa intenta convencerme de que algunas plantas dan el pego como naturales, a pesar de su brillo sospechoso. Le encanta cómo ha quedado la enredadera del techo, aunque quisieron poner limones alrededor de todas las columnas, y me hace ver que hay que esperar a la noche para observar el contraste de las luces rojas que recuerdan el sello de la botella. Además, me señala que uno de los murales de la barra principal es un guiño a la pared de ladrillo verde de una terraza vecina. Seguimos hablando de los colores de acuarela y de los distintos tipos de verde.]

Un paseo por las nubes con Lulu Figueroa

Imagen superior: detalle de algunos cuadros de Lulu Figueroa

Qué pena que la terraza no tenga piscina. Esa idea la tuvo Isabelle. Quisimos crear un efecto de agua con vinilos para dar un toque refrescante.

Bueno, va, pregunta recurrente y obligatoria: ¿qué significa para ti ser influencer? (Se pone seria) Un punto de referencia para la gente que te sigue en cuanto a forma de vivir, estilo, arte, moda… Lo que tú eres la gente lo utiliza como fuente de inspiración. Me estoy muriendo de calor y este tema es calentito.

Vamos a la sombra. Te siguen más chicas que chicos. Sí, el 85% de mis seguidores son chicas.

Lo tienes muy clarito. Hombre, lo puedes ver directamente en el móvil. A mí no me sigue ningún chico.

Alguno te seguirá. Bueno, un 15%.

Vale, nos seguiremos mutuamente. ¿Vas a volver a exponer pronto? Sí, en diciembre de este año. En Échale Guindas de Madrid. Tienen tres cuadros míos de hace mucho tiempo que puedes ir a ver.

A ver ésta: ¿te sientes más aristócrata o influencer? Ninguna de las dos cosas.

¿Ni siquiera influencer? Si me has dicho que notas esa capacidad de inspirar a la gente. Tampoco me gusta ponerme una etiqueta. Soy un poco de todo. Artista y ya está.

Pero eres aristócrata. ¿No te sientes como tal? A ver, no sé.

Significará algo. Sí significa. Es historia y no reniego de ella. Es algo que va conmigo, es algo que he vivido toda mi vida. No lo puedo ver de otra manera.

Te acompaña. Me acompaña.

Como influencer, colaboras un poco con quien tú quieres. Y con los que quieren.

Pero hay influencers e influencers. No siempre se mide por la cantidad de seguidores. Yo tampoco tengo muchos. Acabo colaborando con las marcas con las que me siento identificada. Si fuera una de whisky a lo mejor no lo haría.

¿Por qué marcas bebes los vientos? Por Tanqueray No. TEN, de por vida. (Risas)

No es excluyente. Pensaría en una marca de pintura. Me fliparía Schmincke, la marca de acuarelas que uso. Me darían pintura para el resto de mi vida y eso es muy caro. (Risas)

Pues ya has lanzado la propuesta. Siempre intento ir hacia lo llamativo, lo diferente, lo colorido. Me encanta el maquillaje, me encanta experimentar. No soy maquilladora pero me flipa maquillar.

¿La tecnología no te va? Lo llevo fatal. Me encantaría aprender Photoshop para hacer collage con mis pinturas. Mezclar colores para ver cómo quedan. Me encantaría también aprender vídeo, pero me cuesta muchísimo. Me acuerdo cuando empecé con el blog…

Próximos proyectos. La exposición. Y voy a empezar a pintar bolsos a mano. Anna Cortina tiene varios modelos de bolsos y varios artistas. Uno que me encanta es Philippe Boonen. Hace perros y es genial. Conviertes el bolso en una obra de arte. Sería trasladar mis pinturas del papel al bolso. Será después del verano.

¿Qué más? Nada, pasar el verano.

Eh, ¿qué haces? Busco en la tabla de colores de Schmincke el verde de la botella Tanqueray No. TEN. Mira, es el verde de helio. ¿Tú qué crees?

Sí, es ese verde.