Nina Emocional se convierte en la voz de la distopía y la hipernormalización que estamos viviendo y, con Fdm, su nuevo Ep, la electrónica experimental sube al siguiente nivel
Nina Emocional vive, ama y respira Barcelona, pero ella es madrileña. Con su anterior trabajo, Música Linda, se posicionó como uno de los proyectos musicales emergentes a seguir. Ahora, la cantante, compositora y productora evoluciona con Fdm, un interesantísimo proyecto que te evoca la nostalgia queer pero en clave futurista. Imprescindible para todos los que busquen la pura vanguardia.

La cantante y productora y su nostalgia queer son lo que necesitas para sobrevivir a esta distopía en la que hemos caído
Un viaje sonoro radical y personal que explora el deseo, la soledad y la imaginación desde un lugar íntimo. Son siete temas cargados de texturas sintéticas, erotismo y crítica social, donde la artista madrileña mezcla hyperpop, electrónica ambiental y reggaetón con influencias de Sophie, Arca o Massive Attack. Con beats dramáticos, bajos que golpean y letras intensas, Nina construye una banda sonora del apocalipsis que se aleja del frenesí capitalista y apuesta por el tempo emocional.

Cada canción revela una faceta distinta
Desde el industrial poético de 666, al reggaetón inquietante de Komura, pasando por el pop épico de Kwia con discurso antifascista incluido. Brilla en solitario, pero también junto a liza en Pussy Wet, una joya acústica donde se muestra más vulnerable que nunca. El cierre llega con Vudú, oscuro y subversivo, producido con bajos que aprendió a hacer en YouTube. Todo esto, con mezcla y máster impecables, firma un Ep fresco, valiente y lleno de carácter, que posiciona a Nina como una de las voces más provocadoras del pop experimental actual. Siempre desafiante. Siempre Nina.
La cantante y productora Nina Emocional (@nina.emocional) Fotografía: Guillermo Solas
Tema a tema, y track by track, la cantante nos explica su nuevo trabajo, Fdm
1. Track 1 de FDM: Vudú por Nina Emocional
Es la última canción que produje. De hecho, nació a partir de un tutorial de YouTube: Deep Dubstep Bass Sound Design With Ableton’s Operator. Fue, en esencia, un hechizo, un juego breve de dos días. Y, en el momento en que la terminé, supe con claridad que debía ser la obertura de FDM.
2. Track 2 de FDM: OG por Nina Emocional
Es el deseo de ser alguien, de superarse. En este caso, una relectura del término Original Gangster. Las percusiones, por su parte, son cuchillos afilados que resuenan en mi cabeza. Así, OG representa la tensión que sostiene la columna vertebral de FDM.
Es, al mismo tiempo, la voz de mi madre diciéndome: ¡Ponte recta! Asimismo, encarna la incomodidad de enfrentarse al juicio interno, el miedo a fallar, pero también esa pulsión inevitable por transformar todo en algo nuevo. De cada vídeo, un film. Porque, sencillamente, estoy obsesionada.
3. Track 3 de FDM: 7 por Nina Emocional
El número siete representa la perfección; sin embargo, si lo inviertes, sugiere justo lo contrario. Fue después del concierto de Massive Attack en el BBK 2024 cuando sentí el impulso de crear algo desde ese lugar.
Ahora bien, no se trata de hacer Trip Hop, sino más bien de jugar a hacerlo. 7 habla de los secretos que guardamos y de cómo, poco a poco, nos secan la boca. También habla de imaginar quién cantará el día de nuestra muerte. Siete canciones en el EP, siete trompetas en el Apocalipsis. En definitiva, esta cifra actúa como un espejo: puede ser total o rota, según cómo la mires.
4. Track 4 de FDM: Pussy Wet por Nina Emocional
A liza no le gustan demasiado las fiestas. Un día me pasó un mp3 con unas guitarras preciosas: Ey, me recuerda a ti. Me pilló en el estudio. Al momento escribí la letra y grabé las voces.
Pedro estaba en una fiesta cuando se la pasé de vuelta, pensó en irse, pero en ese momento recibió mi wav y se encerró en el baño a escucharla 4 o 5 veces mientras me enviaba fotos superemocionado y stickers de gatitos voladores. En ese momento supe que Pussy Wet iba a ser la balada de Fdm.
5. Track 5 de FDM: Komura por Nina Emocional
La segunda colaboración del Ep. Esta canción surgió de un día en el estudio con Jack, recién despertada de mi sueño retorcido semanal, en el que mi madre se transforma en el doctor Komura para reconstruirme los labios.
Tengo una mente poderosa y una sensibilidad sumisa que convierte mis fantasías en dignas competidoras de la vida “real”(?). A veces, prefiero lo que imagino a lo que vivo, de eso habla Komura.
6. Track 6 de FDM: Kwia por Nina Emocional
Kwia es el nombre de un bar de ambient de Berlín al que fui el año pasado. El sintetizador principal de la canción está diseñado a partir de un audio que grabé allí. La grabación de campo ha sido una práctica esencial para construir la identidad sonora de FDM.
No podía hablar del fin del mundo sin dejar que el mundo hablase por sí solo. Después de estar como voluntaria en la Dana, en Valencia, sentí la necesidad de recuperar las palabras de La Pasionaria para reforzar el poder del pueblo como antídoto a la frustración que nuestra generación experimenta frente a la acción política.
7. Track 7 de FDM: 666 por Nina Emocional
Esta canción la hice una noche en mi casa #emo, atrapada entre el Bien y el Mal, Estás buscando el bien en mí, no se si disfrutarlo. A veces hay que aceptar las reglas del juego. Esa noche entendí que no quería huir.
Quería quedarme. Y eso me hacía peor… ¿o no? No lo sé. A pesar de todo, me gustaba estar ahí. Wake up…! A veces el querer y el usar pueden convivir. También hay algo de verdad en ese intercambio tramposo.
