1, 2, 3… Pérez Siquier! 

La Fundación MAPFRE presenta una exposición de fotografía sobre Pérez Siquier. Tienes hasta el 28 de agosto para celebrar a este artista que sin pretenderlo, cambió el rumbo de la fotografía en España. ¡Ah! es en la sala Recoletos.

Si hay un hobby estival que defina nuestros tiempos y que nos lleve casi más tiempo que planificar vuelos, hoteles y visitas varias esa es la proyección visual de nuestras vacaciones. Ya no solo queremos que nuestro espíritu visite lugares nuevos, como nos aconseja el Dalai Lama, que nuestras pilas se recarguen o que concluyamos, con el trópico como testigo, ese divorcio tan anhelado durante interminables meses de frío invierno. NO, ahora y con la posmodernidad a cuestas todo eso ha pasado a un segundo plano, es una mancha borrosa, analógica y desenfocada.

Foto superior: Marbella, 1974. Copia posterior, inyección de tinta. Colecciones Fundación MAPFRE © Carlos Pérez Siquier, VEGAP, Madrid, 2022

1, 2, 3… Pérez Siquier! Torremolinos, 1974. Copia posterior, inyección de tinta. Colecciones Fundación MAPFRE © Carlos Pérez Siquier, VEGAP, Madrid, 2022

Ya no es suficiente que el baño del hotel tenga secador. Que podamos bajar a las 12 al desayuno, o que la pulserita incluya también los bloody maries del hotel de al lado. Ahora necesitamos más que cualquier servicio incluido que todo eso y todo lo demás también, quede plasmado en una orgía sin fin de stories, etiquetas, emojis de agradecimiento, de paz al fin alcanzada, de mindfulness. En definitiva, pretextos varios para mostrar a tod@s que nuestros meses de duro gimnasio es la narrativa subliminal que palpita en nuestra foto del chiringuito dando las gracias al lugar de turno por acogernos con tanto mimo y cuidado. Y de todo esto nos habla Pérez Siquier.

1, 2, 3… Pérez Siquier! Cádiz, 1980. Copia posterior, inyección de tinta. Colecciones Fundación MAPFRE © Carlos Pérez Siquier, VEGAP, Madrid, 2022

Madres de la transición

Pero chic@s, hubo un pasado no tan lejano donde las dos Españas se fundían y enredaban en una nueva vocación aspiracional a la que empezamos a llamar ocio. Y si en el colegio (o dónde sea) nos metieron en la cabeza que existieron unas figuras masculinas (of course) y legendarias a las que llamamos los Padres de la Constitución, los héroes de la transición; yo aquí me arriesgo a verter mi propio granito de arena y digo que las madres de la transición fueron esas turistas que nos colonizaron de Sur a Norte con sus bikinis de flores, párpados resplandecientes, cigarrillos rubios y ganas de un mam-bo ita-lia-no con la peseta como moneda de cambio.

1, 2, 3… Pérez Siquier! Roquetas de Mar, 1975. Copia posterior, inyección de tinta. Colecciones Fundación MAPFRE © Carlos Pérez Siquier, VEGAP, Madrid, 2022

¡Aunque vaya vaya, aquí no hay playa!

Y si hay un fotógrafo español que, como un Julio Verne nacional, (porque este pedazo se señor no salió de Almería) haya inmortalizado todo ese mejunje mejor que nadie, ese es Pérez Siquier. ¡Y Madrid está de enhorabuena! Porque aunque vaya vaya, aquí no hay playa, la Fundación Mapfre nos trae un pedacito de ese universo. La historia misma de nuestro fascinante (¡y olé!) Siglo XX. Y lo que más me gusta es que no es ni grandilocuente, ni pretencioso, ni quiere entrar en el Reina… (aunque esté en el MoMA), es una visión delicada que nos cuenta quienes fuimos y en qué nos convertimos.

1, 2, 3… Pérez Siquier! Marbella, 1983. Copia posterior, inyección de tinta. Colecciones Fundación MAPFRE © Carlos Pérez Siquier, VEGAP, Madrid, 2022

Y es que nunca creí que iba a hacer semejante analogía pero mientras el Franquismo mostraba a personas sonrientes, desarrollo infinito, ladrillos resplandecientes al sol de las costas, Pérez Siquier fotografiaba La Chanca. Y si todos nos hemos convertido en franquistas de nuestras vacaciones, aquí viene Siquier y nos da a tod@s una lección de modernidad.

El tipo llega y nos dice, my dears, no seáis horteras ya que es la CaraB de las cosas la que merece la pena observar, donde sí sabes mirar, crece la poesía. E ironías de la vida, será el propio régimen el que más tarde le pedirá fotografiar esa otra cara, que no llega a ‘A’ con mayúsculas sino que se queda en un limbo entre bienestar, apariencia y un sin fin de carencias. Un turismo parche que viene a contar muchas de las historias de una España embobada con el pelotazo, la minifalda, las hipotecas y un sol que pareceque nunca se apaga.

1, 2, 3… Pérez Siquier! Marbella, 1983. Copia posterior, inyección de tinta. Colecciones Fundación MAPFRE © Carlos Pérez Siquier, VEGAP, Madrid, 2022

Ternura moderna y subversiva en Pérez Siquier

Y la Chanca es a Pérez Siquier, lo que las Hurdes fueron a Buñuel. No obstante, si en Buñuel encontramos la fascinación del burgués que pisa por primera vez territorios hinóspitos, Siquier mira con mucha más ternura. Y esa ternura es además moderna y muy subversiva. Cómo destacan los comisarios de la expo, Carlos Gollonet y Carlos Martín, Siquier se caracteriza por haber sido un artista periférico, no quiso viajar a Barcelona o Madrid y se quedo en Almería fascinado con un cambio local que contaba a su vez el ‘gran cambio’ español. Y ahí radica mucha de su grandeza. Ya que, como también hemos escuchado un sin fin de veces, el arte, cuando es arte de verdad, supera sus márgenes para convertirse en universal.

1, 2, 3… Pérez Siquier! La Chanca,Almería, 1965. Copia posterior, inyección de tinta. Colecciones Fundación MAPFRE © Carlos Pérez Siquier, VEGAP, Madrid, 2022

Grupo AFAL

Pero, y para finalizar, hay que decir que Siquier no sólo superó regionalismos, prejuicios, la periferia, el ladrillo visto y demás, sino que fue un verdadero referente de innovación y como dicen sus comisariosen la nota de prensa “se convirtió en el catalizador del colectivo fotográfico más influyente de su tiempo, el Grupo AFAL”. Y destaco con verdadera admiración parte de sus palabras. Ya que en dicha nota dan en el clavo al afirmar que si bien Almería podía parecer como un espacio más bien lejano, una idea romántica al más puro estilo Mérimée (y esto lo añado yo). Pérez Siquier construyó un corpus fotográfico que de manera profunda y mordaz, se adentraba de lleno en los debates clave de la época.

1, 2, 3… Pérez Siquier! S/T 1965. Copia posterior, inyección de tinta. Colecciones Fundación MAPFRE © Carlos Pérez Siquier, VEGAP, Madrid, 2022

1, 2, 3… Pérez Siquier! S/T 1965. Copia posterior, inyección de tinta. Colecciones Fundación MAPFRE © Carlos Pérez Siquier, VEGAP, Madrid, 2022

Planazo de verano

Así que chicas, chicos, chiques, si estáis en Madrid ir a celebrar a Siquier y adentraros de lleno en esos debates, en su mirada mordaz, en su poesía, profundidad, en su Chanca querida y en esas décadas locas que transformaron nuestras costas para bien, para mal y para siempre.

1, 2, 3… Pérez Siquier! La Chanca, Almería, 1958. Copia posterior, plata en gelatina. Colecciones Fundación MAPFRE © Carlos Pérez Siquier, VEGAP, Madrid, 2022

1, 2, 3… Pérez Siquier! La Chanca, Almería, 1957. Copia posterior, plata en gelatina. Colecciones Fundación MAPFRE © Carlos Pérez Siquier, VEGAP, Madrid, 2022

1, 2, 3… Pérez Siquier! La Chanca, 1963. Impresión cromogénica sobre papel fotográfico  Fujichrome. Colecciones Fundación MAPFRE ©Carlos Pérez Siquier,VEGAP, Madrid, 2022

Texto: Jesús Nebreda


Perez Siquier, hasta el 28 de agosto

Fundación Mapfre