Star Wars ha dado para mucho, y a pesar de la seriedad y solemnidad propias de las sagas épicas, también ha tenido hueco para el humor. Muchas han sido las parodias y algunas las películas basadas en las locuras de sus fans, pero hasta el elenco original protagonizó su propia versión cómica. Aprovechando el estreno en cines del Episodio VIII de la línea oficial, Los últimos Jedi, repasamos los momentos más delirantes de la galaxia. 

Star Wars: Las comedias más locas de la galaxia

The Star Wars Holiday Special (1978)

Aprovechando el éxito de la primera entrega de la trilogía original, La guerra de las galaxias (lo que después vino a llamarse Episodio IV: Una nueva esperanza), el año siguiente se estrenaría esta rareza desconocida para el público general de hoy día debido a sus estrepitosos resultados. Se trata de un telefilme protagonizado por Chewbacca y su familia (padre, parienta y churumbel), pero que contaba también con la participación del elenco original: Carrie Fisher (Princesa Leia), Mark Hamill (Luke Skywalker) y Harrison Ford (Han Solo), los androides R2D2 y C3PO e incluso James Earl Jones prestando de nuevo su voz a Darth Vader. Un especial televisivo que aprovechaba el incipiente filón de los personajes galácticos para contar una historia familiar y para todos los públicos, todo plagado de gags y con hueco incluso para los momentos musicales. Solo se emitió una vez en EE.UU., el 17 de noviembre de 1978 en la CBS (los canadienses también lo vieron en la CTV), y a pesar de que la desastrosa aceptación de la audiencia impidió su reemisión, sí que existe una versión doblada al castellano (latino) emitida en Sudamérica. Quienes se quejen de los eawoks que le echen un vistazo a esto. Infumable hasta para los fans más acérrimos de la saga.

Star Wars: Las comedias más locas de la galaxia

La loca historia de las galaxias (1987)

El gurú de la comedia hollywoodiense Mel Brooks, curtido ya en la parodia en producciones como Superagente 86 o El jovencito Frankenstein, fue el encargado de hacer la caricatura oficial de la saga de George Lucas. El resultado fue Spaceballs, que en España se tradujo con el nombre que todos conocemos hoy día. Una barrabasada muy acorde a los cánones de la época, plagada de chistes efectistas y humor absurdo, y que no dudaba en hacer guiños también a otros títulos famosos de la ciencia-ficción como Alien, Star Trek o El planeta de los simios, fiel a esa tradición de parodia antológica que ya habían explotado Top secret! o Aterriza como puedas y que se mantendría en la década siguiente con la saga de Scary movie. Un clásico ochentero que no ha envejecido nada bien y que si revisas en un acto de nostalgia no conseguirá arrancarte todas aquellas carcajadas que te sacó de pequeño.

Star Wars: Las comedias más locas de la galaxia

Padre de familia: Trilogía de Star Wars (2007)

Fan reconocido de la ciencia-ficción, Seth MacFarlane se pegaría el capricho de hacer su propia adaptación de Star Wars reasignando los personajes de la familia Skywalker a sus Griffin. Contó con el respaldo de LucasFilm, lo que le permitió utilizar sintonías, nombres y diseños oficiales a su antojo, y parodiaría la práctica totalidad de las escenas de la primera entrega de la trilogía original en el primer capítulo de la sexta temporada de Family guy, que se alargaría para la ocasión hasta los tres cuartos de hora bajo el título Blue Harvest (el nombre de rodaje de El retorno del Jedi). La dirección corrió a cargo de Dominic Polcino, que consiguió una animación de un nivel espectacular, sobre todo gracias a los efectos 3D. El éxito trajo consigo las inevitables parodias de las secuelas originales: Something, Something, Something, Dark Side caricaturizaba en 2010 las aventuras de El imperio contraataca, siendo el episodio 20 de la octava temporada dirigido de nuevo por Polcino; Peter Shin y James Purdum rematarían la faena en 2011 con It’s a Trap! (¡Es una trampa!, la icónica frase del almirante Ackbar), versión de El retorno del Jedi que se emitió como el decimoctavo episodio de la novena temporada. La trilogía al completo se lanzaría al mercado en DVD y Blu-Ray.

Star Wars: Las comedias más locas de la galaxia

¿Hacemos una porno? (2008)

Otro famoso cineasta que no ha parado de rendir homenaje a La guerra de las galaxias en su vida y obra es Kevin Smith, que ya había metido a la saga galáctica en muchos de los monólogos y gags de sus primeras películas independientes: Clerks, Mallrats, Persiguiendo a Amy… Tras sus devaneos por el cine de encargo y comercial, en 2008 volvía de alguna manera al espíritu de sus inicios con Zack & Miri, que en España se tradujo de nuevo con un título bastante más contundente. El director utilizaría detalles de su propia vida (Clerks, su ópera prima, la rodó en el videoclub donde trabajaba junto a sus amigos) para escribir la historia de un grupo de perdedores asfixiados por las facturas que se asocian para grabar su propia película porno y salir de pobres. El desmadre empieza cuando deciden hacer la versión hardcore de Star Wars: Star Whores (que en castellano viene a ser La guarra de las galaxias). Se aconseja ver en versión original para no perderse las bromas que los juegos de palabras dieron de sí.

Star Wars: Las comedias más locas de la galaxia

Fanboys (2009)

En 1999, dieciséis años después de El retorno del Jedi, George Lucas va a estrenar Episodio I: La amenaza fantasma, nueva película de su saga galáctica a modo de precuela. El problema es que uno de los amigos de la pandilla se está muriendo y no llegará a tiempo de verla en cines, así que la vieja cuadrilla de frikis del barrio se vuelve a reunir de nuevo para enrolarse en una misión suicida: viajar hasta el rancho de George Lucas para robar una copia y verla antes que nadie. Desbarre con todo tipo de chistes cómplices y cameos del elenco original, Carrie Fisher incluida. Una historia parecida la protagonizaría años después en la vida real Daniel Fleetwood, enfermo terminal de cáncer que en 2015 consiguió ver antes que el público general (y cinco días antes de morir) el Episodio VII gracias a su campaña viral en redes sociales. La realidad siempre supera la ficción.