La marca de mobiliario neozelandesa Resident, acaba de lanzar la silla Jiro, un diseño del británico John Tree. Se trata de una pieza minimalista que aterriza en el momento en el que el teletrabajo se extiende globalmente. Un silla híbrida (casa-oficina).
Nos encontramos con una silla que es un híbrido entre una silla de comedor y una silla de oficina. No llega a tener todas la cualidades de una silla de oficina pero casi. El respaldo en madera contrachapada le da cierta flexibilidad lo que la hace más ergonómica que una silla con respaldo fijo. “El objetivo fue diseñar algo simple, no demasiado técnico, pero sutilmente ergonómico” Explica el diseñador John Tree
Otro elemento que incorpora la silla Jiro es el pistón de gas elevador, otro de los elementos habituales de una silla de oficina arquetípica. La base está disponible en negro o blanco y el mecanismo elevador y giratorio está elegantemente oculto, lo que le da a la silla un aspecto limpio y simple. Es un pieza que está pensada para su uso en casa o también para espacios donde también se puede trabajar eventualmente como puede ser una cafetería.
La silla giratoria Jiro se tardó 18 meses en fabricar y utilizó el diseño y la experiencia técnica de Auckland, Londres, Copenhague, Estocolmo, Budapest y Guangzhou.
Lo que más nos sorprende de la silla Jiro es su refinada forma, sus proporciones, su simplicidad. Seguramente que no es una silla en la que puedas estar sentando una jornada de trabajo, pero por su aspecto, parece un paso intermedio entre una silla rígida de comedor y una silla anabolizada de oficina. Se podría decir que es una silla híbrida que mezcla característica de una silla doméstica y una silla de oficina.
Su precio es de 550€ y se puede comprar aparte los los cojines a medida para el asiento