Central de Pastas abre en Madrid tras la reforma dirigida por Codoo Studio, que convirtió unas antiguas oficinas de finales del siglo pasado en un obrador artesanal gobernado por la presencia del amarillo.
Este color se aprecia en la carpintería exterior, los marcos de las ventanas, las rejillas de la fachada, la estructura del rótulo, las mamparas interiores y las paredes pintadas de Central de Pastas. Todo ello debido a la identidad visual de la marca, para la cual dicha tonalidad simboliza dinamismo y vitalidad. De modo que Codoo Studio siguió a rajatabla el encargo de sus clientas, Naza y Dana, quienes buscaban un espacio donde elaborar y vender pasta fresca acompañada de salsas y vinos.
Despejar, descubrir y reinventar
Codoo Studio tuvo que lidiar con un interior completamente fraccionado (por tabiques, falsos techos…) que pedía a gritos una limpieza integral antes de poder plantear cualquier idea sólida. Una vez despejado el recinto, salieron a la luz elementos que merecían una segunda vida, como un panelado de madera y un pavimento de terrazo que llevaba años oculto bajo la tarima. La zona dedicada a la producción, por su parte, fue rematada por el equipo con pintura de alto brillo, siguiendo la estética definida por @josefromanelli y @simeonelucas, la hermana y el cuñado de Naza, respectivamente, y responsables del branding.
Además, Codoo Studio incorporó una estructura metálica acristalada que separa la producción del área de atención al público sin renunciar a la amplitud. El reto principal para crear Central de Pastas fue, según explica el despacho, generar distintos ambientes en un lugar tan limitado, algo que se resolvió gracias a los materiales que seleccionó: granito nacional para el mostrador, estanterías de acero inoxidable para el surtido gourmet y mobiliario cromado complementado con taburetes de diseño español en tono beige. “Nos trasladaban a la estética de las cajas de un colmado”, indican desde el estudio.
Una mirada hacia las raíces argentinas
Central de Pastas también mira hacia Argentina, donde las fábricas de pastas nacieron como una extensión de la vida en el barrio y de la inmigración italiana. Aquellos talleres combinaban oficio y cercanía vecinal, una referencia que inspiró la reinterpretación arquitectónica de este rinconcito en el centro de la capital. “En Argentina, compartir unas pastas en la mesa sigue siendo una de las costumbres más queridas en el entorno familiar”, nos señalan.
Un poco más de información sobre Central de Pastas
Sobre Central de Pastas, cabe destacar que el negocio funciona desde las 10 de la mañana. No sirve desayunos convencionales, aunque sus impulsoras aseguran que allí se elaboran “las mejores medias lunas de Madrid”. Por la noche permanece cerrado, ya que concluye su jornada a las 20:30 horas.
Sobre Codoo Studio
Codoo Studio nació en 2019 de la mano de Jose David Costa (Murcia, 1987) y Sergio Ortiz (Valladolid, 1989), arquitectos formados en la ETSAV y la ETSAG. “Creemos en un diseño accesible, innovador y con identidad. Nos especializamos en crear espacios con una mirada disruptiva, integrando materiales y objetos que desafían lo convencional. Fusionamos estética y funcionalidad en busca de la armonía perfecta entre lo conceptual y lo tangible”, explican en su web. Por otro lado, aseguran que su principal fortaleza se basa en “la teatralidad”, pues rehúyen cualquier propuesta que pueda disolverse en la indiferencia.
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Ficha técnica
Proyecto: Central de Pastas.
Ubicación: Madrid.
Superficie: 80 m².
Propietarias / clientas: Naza y Dana.
Estudio responsable: Codoo Studio.
Fundadores del estudio: Jose David Costa y Sergio Ortiz.
Programa: producción de pasta fresca, zona de venta, almacén.
Estado previo: antiguas oficinas compartimentadas.
Materiales principales: granito nacional en mostrador, acero inoxidable industrial en estanterías gourmet, cromados en estanterías secundarias, taburetes de diseño español en plástico beige.
Branding: @josefromanelli y @simeonelucas.
Fotografías: Germán Saiz.
