LA VIDA NO ES EN BLANCO Y NEGRO, ES EN ORO
Anna dello Russo lleva una década intentando inculcarnos que el dorado es el nuevo negro, olvidando que en materia de champanes siempre ha habido un negro-dorado triunfante, un rey sol burbujeante llamado Moët. Una estrella brillante que no para de reinventarse. Moët & Chandon vuelve a sorprendernos con una colección cápsula para estas Navidades bautizada como Diamond. La maison cierra 2012 presentando su clásica botella Imperial de 3 litros revestida por una malla centelleante de diamantes y etiqueta a tono personalizable. Para contrarestar tanta luz, la clásica pajarita de Moët & Chandon ha sido representada en una chapa negra y complementada con un auténtico sello de cera símbolo de la casa francesa. Lo que no cambia es su interior, Moët mantiene su sabor maduro, afrutado y vigoroso heredado de las tres variedades de uva que contiene. La engalanada botella se ha presentado junto al Golden Diamond Suit, un estuche isotérmico que garantiza la frescura y el Twinkle Box, versión renovada del paquete regalo tradicional. Además de darse a conocer la caja regalo Festive Box que esconde la lujosa botella Diamond, se ha presentado el Share the Celebration, nueva experiencia digital que difunde el glamour de Moët & Chandon durante esta época mágica, incorporando fiestas de la vida real a internet y trasladando celebraciones virtuales a la vida real. Y es que ya lo dijo a finales de los noventa la rubia de cuello infinito que anunciaba J’Adore de Dior: “la vida no es en blanco y negro, es en oro”.
