Entrevista: Patricia Montero

Protagonizar una de las series más populares del momento la puso a Patricia Montero en boca de todos, pero su carrera ya estaba plagada de éxitos desde que era una niña. Ahora reparte su tiempo entre el cine y su hija recién nacida.

Mamá, quiero ser artista: “Lo mío es vocacional, con seis años ya lo tenía claro. Recuerdo que en mi primer casting le dije a mi madre: ‘mamá, esto me encanta’. No me importaba pasarme horas rodando un anuncio. Siempre he estado muy ligada a la interpretación y a la danza, que para mí tienen muchísima similitud. Empecé bailando y lo hice durante muchos años, y al final bailar es actuar y contar historias”.

Cumpliendo un sueño: “No me considero actriz profesional. Aunque suene a tópico, sigo aprendiendo con cada trabajo. Pero sí recuerdo cuándo tuve claro que quería dedicarme a esto por completo, y fue con once años, haciendo una TV movie con Ana Duato e Imanol Arias. Estábamos grabando y me dije: ‘quiero ser Ana Duato, hacer esto el resto de mi vida’. Ahí se terminó de formar la idea”.

Bailando: “Siempre digo que fui, soy y seré bailarina toda mi vida, aunque ya no me dedique a ello. Forma parte de mi vida. Bailando puedes expresar mucho más que actuando porque puedes introducir el cuerpo, y en la interpretación estás más limitado, únicamente es vocal o emocional”.

Yo soy Bea’: “Para mí la serie siempre será mi pareja y mi hija. Además fue la oportunidad de dar el salto a una cadena nacional y darme a conocer. También un reto, porque apenas tenía dieciocho años y era un personaje protagonista. El ritmo de la serie era bestial, no tenía vida. Rodábamos treinta o cuarenta páginas al día. Me aprendía un capítulo diario, no sé cómo estudiaba. Cuando salí me sentí muy preparada”.

De repente, ser popular: “En aquel momento el boom de ‘Yo soy Bea’ era bestial, lo veía todo el mundo. Yo no era consciente de nada porque no salía a la calle: de mi casa al plató y del plató a mi casa. Entonces recuerdo el día que fui a un centro comercial a las afueras de Madrid y noté que me miraba todo el mundo. Se hizo una piña de gente y pensé: ‘¡ay madre!’. Además recuerdo que salieron unas fotos en una revista del corazón porque había paparazzi fuera. A día de hoy soy consciente de que forma parte de nuestra profesión. Nos debemos al público, a la gente que nos sigue y lo llevo muy bien”.

Últimos proyectos: “Ahora se estrena ‘La noche que mi madre mató a mi padre’. Fue todo un reto porque nunca había hecho comedia tan dura y extrema. Cuando te dicen que vas a compartir reparto con Eduard Fernández, Belén Rueda, Maria Pujalte y Fele Martínez, actores que dominan tanto esa rama, asusta un poco. Pero ha sido maravilloso, porque todo reto para mí es una experiencia. Además de que ha sido un intensivo, he aprendido muchísimo”.

La maternidad: “Siempre he querido ser madre joven, y si no lo he hecho antes ha sido porque laboralmente no he podido. Aparte he tenido la suerte de tener una pareja y una relación estable, que creo que es lo más importante. Sí me he podido plantear qué iba a pasar con mi carrera, pero cuando de verdad lo deseas no te puedes preocupar por eso. Además yo he sido afortunada, porque cuando empecé a hacer la película no sabía que estaba embarazada, y al enterarme pensé que me iba a quedar sin papel. Pero Inés París, la directora, es madre y entendió que estar embarazada no es estar enferma y que puedes trabajar”.

La industria y las mujeres: “Es verdad que hay más papeles de chicos que de chicas, pero yo no me he sentido nunca en una posición inferior. Al final la que consume televisión es la adolescente, y le gusta el chico más que la chica. A no ser que te conviertas en un fenómeno fan, que entonces sí que te siguen por como te vistes o por tu forma de ser. Pero no, no creo que haya tanta diferencia como en otros sectores”.

Tras las cámaras: “Soy una chica natural, espontánea, divertida, valiente y luchadora. Me gusta decir las cosas a la cara, soy sincera. Y soy muy de mis amigos, de rodearme de gente saludable y positiva. Y que sonría mucho, que es muy importante sonreír”.

 

La maquilladora Maite Tuset, M·A·C Senior Artist España y Portugal,  nos habla sobre el make up para Patricia Montero

Patricia estaba un poco preocupada porque no suele maquillarse mucho. Así que nada, hemos empezado marcando un poquito el ojo con el Coffee Eye Pencil, simplemente delineando la parte interna con un tono carne para abrir la mirada. Luego, mucha máscara de pestañas Upward Lash, y en el contorno de los ojos tonos marrones con las sombras Soba Eye Shadow y Wedge Eye Shadow.  Encima le puse Prima Eye Shadow, un pigmento plateado que encaja muy bien con el suéter de espejosc. A los labios les di un poquito más de fuerza con uno de los nuevos labiales Retro Matte de M·A·C, una textura fluida, como si fuera un brillo. Se extiende súper bien y luego, al cabo de unos minutos, se seca y queda totalmente mate, con acabado como aterciopelado. Se llama Retro Matte High Drama, es un tono como berenjena oscuro muy bonito. Pómulo rosadito muy suave . Como tiene la piel blanquita, la verdad es que quedaba bien un rollo dulce pero con un toque punk, un poco más duro.

——————————
Entrevistas: ROBERTO JUANES / Fotógrafo: JESÚS LEONARDO / Estilismo: JAVIER DE JUANAS / Plató: LUMIERE STUDIO / Maquillaje: MAITE TUSET + CARITINA RAMOS para M·A·C Cosmetics / Peluquería: KLEY KAFE
——————————
Top LOEWE + Pendientes & Anillos HEVN +  Maquillaje Colección Primavera Verano M·A·C Cosmetics