FIBARTY ES QUE NO SÓLO DE MÚSICA VIVE EL FIBER

Desde hace algunos años, ir al FIB Heineken supone una experiencia más completa que la de pegarse cuatro días de festival y ponerse hasta la mazorca. Han ido surgiendo actividades paralelas a lo estrictamente musical y algunas son muy pero que muy interesantes. Prueba de ello es la programación del FIBart de este año, que propone reflexiones sobre lo que en Benicàssim se cuece durante esos cuatro días candentes del verano. Veamos:

Para empezar, el Colectivo OTU OYO ha creado Vayatoalla!!, o lo que es lo mismo una toalla cien veces más grande que una normal, y la ha instalado en la playa a modo de zona común, como símbolo de la mezcla de géneros, estilos y tipos de gente que se genera durante el FIB Heineken. FIBART

Por otro lado, Marlon de Azambuja expone su Potencial Escultórico, en el que juega con el concepto de objeto encontrado dándoles una nueva forma mediante adhesivos y plásticos de manera que la vista del espectador se fija en ellos, viéndolos de otra modo muy distinto hasta la fecha. FIBART

Además, Yes, Negative, una intervención de Gerald Van Der Kaap que versa sobre las pruebas del VIH y que hace ver a la gente que no hay nada que temer al mismo tiempo que pone en tela de juicio según qué procedimientos pre-test y post-test. FIBART

A esto habría que añadir otras como Ritmo H2O, del Colectivo Paranoia, en la que se juega con flotadores en el mar para generar ritmos con las olas y la participación del público; o la obra de Natalia Ángel titulada Happiness en la que una falsa publicidad promete felicidad embotellada. Para las mentes inquietas que pisen Benicàssim en esta 15 edición del FIB Heineken, entre concierto y concierto, ya tienen obra que visitar. O al revés, entre obra y obra, concierto. Como prefieran.