Paloma Wool, representante de la moda mediterránea más joven, una llamada a la creatividad
Curiosidad y sutileza plasmadas en libertad y artesanía para hacernos suspirar a través de la creatividad. La naturaleza orgánica de Paloma Wool se traduce en hacernos entender que a través de cualquier ámbito del arte se pueden mover a las personas y hacer bailar sus emociones. Guiada por la intuición y salpicando su desasosiego en Nice Things, Paloma trabaja desde la atemporalidad de las prendas y la peculiaridad del arte de vestirse, algo universal que nos une a todos como personas. Más allá del Fast Fashion, elabora desde el cariño con tejidos 100% naturales, colores que hacen referencia a la naturaleza y con colaboraciones especiales como Laura Sebastianes, Candela Capitán o Marta Armengol. Paloma Wool nos hacen bailar entre la vida urbana y la mediterránea con influencia greco-romana y feminista, haciéndonos ver la importancia de ser libres, de respetar nuestro cuerpo y atrevernos a crear sin miedo.
Siendo hija de los creadores de Nice Things y Globe, ¿cómo surgió crear tu propio proyecto? Desde pequeña siempre supe que quería emprender mi propio proyecto, supongo que por reflejo de mis padres, que tenían su propia marca. De hecho, estuve apunto de empezar una marca llamada ‘Little Paloma’ cuando tenía 19 años, por suerte mi madre me frenó. Pero no fue hasta que entendí cómo desvincularme del concepto de ‘marca de ropa’ que no lo lancé, decidiendo enfocar el proyecto hacia la exploración artística y alejándome de algunos de los estándares de la industria de la moda.
Cómo es trabajar para la empresa familiar y al mismo tiempo para tu propia empresa? Qué tienen en común? Es genial, tengo muy buena relación con mi madre y trabajar a su lado es muy bonito, nos entendemos muy bien y nos apoyamos mucho la una a la otra. Ambos proyectos (Paloma Wool y Nice Things) comparten espacio físico y parte del equipo y de la infraestructura.
Paloma Wool es una llamada a la creatividad. Cuál es tu mensaje? Tengo muchas ideas que se me pasan ahora mismo por la cabeza: Podemos hacer todo lo que nos propongamos; todos podemos crear; todas las mujeres somos increíbles y debemos ser libres; hay que ser respetuoso con uno mismo y con el universo; hay que escuchar más a la intuición…
Trabajas en un espacio multidisciplinar. ¿Quiénes forman el equipo? Somos un equipo de mujeres creciendo orgánicamente. Una de las cosas que más valoro del proyecto es lo abierto y libre que es. Los colaboradores que entran y salen forman tan parte del equipo como las que estamos cada día, creando, dibujando, pensando, fotografiando…
La importancia de tu hogar para crear. Mi casa es fundamental para desarrollarme. Es el lugar sagrado en el que descanso, estoy con mi novio Pau y mis dos gatos. Hay paz y mucha luz, y eso le da claridad a mi cabeza y a mi alma, aquí nacen muchas de mis ideas. Mi casa está llena de objetos que simbolizan momentos importantes de mi vida personal y de la vida del proyecto. Al tratarse de un proyecto multidisciplinar, puedes encontrar desde un pañuelo de seda colgado en la pared de una colaboración con la ilustradora y fotógrafa polaca Tanya Posternak; a una escultura de hierro creada por Diego Cabezas que interpreta uno de los dibujos de Tana Latorre estampados en alguna de las prendas; piezas de cerámica de distintos ceramistas que fueron desarrolladas a partir de un estampado; una alfombra tejida por mujeres marroquíes con un dibujo de un desnudo femenino- portada de nuestro último libro- colgada de la pared…
El proyecto gira en torno a la importancia del ritual de vestirse. Qué nos quiere decir? El acto de vestirse es universal, puro y personal. Siempre me ha gustado la idea de cómo combinamos y elegimos colores, formas y texturas para recubrir nuestra piel y mostrarnos al mundo. Por eso me siento mucho más identificada con la idea de que paloma wool es un proyecto artístico y no una marca de ropa. Todo gira alrededor de ese acto, vestirse. Pero gira de una manera abstracta e ingenua, como si fuéramos niñas descubriendo el mundo por primera vez. Hacemos juegos, experimentos, vídeos, performances, construcciones… Y el hilo conductor de todo es la ropa.
La influencia de la historia greco romana tanto en ilustraciones como en dirección de arte de la marca. Me gusta mucho la mitología griega y decidimos bordar prendas con elementos que evocaban la Antigua Grecia. Hicimos una búsqueda (con Laura y Zoe) de mitos y de personajes griegos para desarrollar un escenario que representase cómo nos imaginábamos el Olimpo. Cogimos una escultura griega de casa de mi madre, alquilamos una máquina de hacer humo, creamos unas arpas con alambre metálico, y recopilamos objetos cotidianos que convertiríamos en posesiones de los dioses griegos. Vinieron amigos a reinterpretarlos, los vestimos con telas y mantas isotérmicas, se peinaban, se miraban en espejos, comían uvas y se hacían selfis, haciendo un paralelismo entre el egocentrismo propio de los personajes griegos y del contemporáneo.
Cómo surgió la colaboración junto a la ilustradora Tana Latorre? Tana trabaja tanto en Nice Things como en Paloma Wool desde hace varios años y además es una de mis mejores amigas. Es una persona muy importante en el desarrollo del proyecto, así que más que una colaboración aislada, es una relación de amor y de amistad eterna. Yo no sé dibujar y Tana expresa con pincel o lápiz las cosas que me gustaría ilustrar, estampar o bordar. Hay una conexión muy bonita, los estampados nos salen de manera muy natural e intuitiva. Una vez lloré de emoción mientras dibujaba, y luego nos dio un ataque de risa por lo sentimental y rara que se había puesto la cosa.
¿Cuáles han sido las colaboraciones que más te han llenado como creadora? Muchas. Por ejemplo la performance con Candela Capitán en la que bailaba con un grupo de chicas en la Sierra de Granada en pleno diciembre desnuda. Fue increíble conocerla y tuvimos que superar muchos problemas para poder grabar el vídeo. Hace dos años, 8 ceramistas de distintas ciudades del mundo reinterpretaron un estampado que había dibujado Tana de jarrones. Cada uno de ellos reinterpretó de manera libre un dibujo, y poco a poco fui recibiendo en casa de mi madre sus piezas de cerámica. Era increíble abrir las cajas, desenvolver los jarrones envueltos en papel de burbujas y descubrir esas piezas preciosas. También la instalación que realizamos hace poco con Laura Sebastianes, en la que compusimos un espacio llenándolo con materiales naturales y nobles. Luego vinieron amigas a interactuar en él, podían actuar libremente en ese espacio, y fueron entrando una a una por orden de nacimiento. Queríamos mostrar cómo vamos pasándonos el mundo de generación en generación, cómo nos lo encontramos al llegar a él, cómo interactuamos con lo que nos rodea durante nuestra vida y cuál es la huella que dejamos. Creo que todos los que estuvimos ese día ahí lo recordaremos siempre, fue mágico. En junio construímos una pirámide de madera de más de 3m de altura en colaboración con Marta Armengol, fue una experiencia increíble, queríamos transmitir que trabajando en equipo y ayudando y siendo ayudado, se puede conseguir cualquier cosa que uno se proponga.
¿De dónde obtienes los tejidos 100% naturales? Los buscamos en ferias de tejidos o los conseguimos a través de nuestros proveedores de confianza.
No crees en las temporadas. ¿Cómo funciona la organización dentro de la producción? No me siento atraída por el concepto moda, es por ello que no hago colecciones por temporadas. No me gusta cómo se incentiva al consumo, no creo en el fast fashion ya que no hay detrás una conciencia sostenible. No creo tampoco en las colecciones primavera-verano y otoño-invierno del prêt a porter, apuesto por hacer prendas atemporales, en ediciones limitadas, y lanzarlas a la venta cuando sea su momento, sin seguir calendarios impuestos. No creo en las rebajas ni en el Black Friday. Cada pieza tiene su valor, y creo que eso debe ser algo inmutable.
Tiene Paloma Wool Influencia e inspiración en figuras femeninas de la historia? No, más bien en mujeres contemporáneas, en las mujeres que me rodean.
¿Qué implica crear una marca Made in Barcelona? Implica mucho esfuerzo e ilusión, me siento muy orgullosa de haber podido desarrollarme en mi ciudad y de contribuir a que pasen cosas bonitas en ella, de que nos juntemos personas de aquí y de allá y nos desarrollemos multidisciplinarmente. La parte más difícil es la producción de la ropa, es complicado encontrar tejidos de proximidad nuevos y que aporten algo nuevo.
Los colores neutros que usas naturalizan y calman nuestras caóticas vidas. ¿Qué tonos sueles usar? Siempre tiendo de manera inconsciente a los mismos tonos: azules, verdes, tierras, crudos, blanco… Son colores que me remiten a la naturaleza, a la fuente de todo. Aunque últimamente estoy escogiendo colores fuera de mi paleta habitual: lilas, naranjas, verdes manzana, azules más eléctricos… y disfruto mucho mezclándolos.
Patronaje. ¿Se fusiona la vida urbana junto a la vida mediterránea en tus colecciones? No me había planteado hasta hace cosa de unos meses la fuerte influencia del Mediterráneo sobre mi trabajo. Y me hace gracia porque la gente lo ve como algo muy obvio, como una de las características principales de la estética del proyecto, tanto por las imágenes, como por los colores o los tejidos. Sí, pienso que en Paloma Wool se fusiona la vida urbana junto a la mediterránea. Por ejemplo, utilizamos mucho el lino en nuestras colecciones, un tejido muy de vacaciones en el mar que a mí me encanta llevar en la ciudad aunque sea septiembre. Hay una fusión muy importante de estos dos conceptos en mi trabajo y en mi vida. La ciudad vs. la naturaleza, ambos lugares mi casa y mi fuente de inspiración.
En tus fotografías podemos apreciar a una mujer creativa y libre, abierta a otras modos de vida. ¿Es un reflejo? ¿De mi? No lo sé, supongo que sí. Por lo menos es lo que quiero promover y despertar en otras mujeres que vean las imágenes. La importancia de ser libres, de respetar y amar nuestro cuerpo y de crear sin miedo.
Paloma tiene su propio libro. ¿Qué nos cuenta? De hecho hay dos. Narran en primera persona cada año de vida del proyecto. Cada página tiene una fecha impresa, así se relatan de manera cronológica las experiencias artísticas, las colaboraciones y algunas reflexiones íntimas en lo que acaba siendo un retrato fiel y personal del proyecto.
Defínete en una palabra: Curiosa.
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