LA MÍTICA NOVELA DE KEROUAC EN PANTALLA GRANDE
Una de esas novelas que todo el mundo dice haber leído, de esas que te marca como a las reses del ganado, la gran On The Road de Jack Kerouac, ya ha sido llevada al cine y se estrena este próximo viernes, 19 de abril. Aunque servidor ha oído hablar maravillas del libro, no he querido leerlo antes de ver la película. Acudí virgen a la sala sin saber ni lo que iba a ver, algo que aconsejo hacer antes de ver ninguna cinta ni escuchar ningún disco, alejarse de ese mal de nuestro tiempo que es la opinión (el dejarse llevar por la masa en la mayoría de los casos). On the Road es una de esas películas donde te gustaría irte a vivir. Con un tempo narrativo impecable (le sobra cuarto de hora como a casi todas, pero es lo que hay), un reparto lleno de caras más o menos nuevas, muy bien armado y a las ordenes de Walter Salles (Diarios de Motocicleta).
Aunque es una película de género, no es una road movie 100%, es un film urbanita y callejero a la vez, con multitud de escenas transcurridas fluidamente en costrosas habitaciónes de hoteles de mediados del siglo XX, donde el sexo emana de las paredes para pringar cada poro de unos muchachos a punto de abandonar la pubertad. Un pedazo de chulazo, atractivo, sexy, tierno, desvalido y desvergonzado Garret Hed Lun (el objeto de deseo) y Sal Reily levantan una pelicula que en manos de otro equipo artístico sería fallida, pero que en este caso resultan un pack que funciona por sí solo a las mil maravillas. ¿Qué mas da si el libro es mejor? ¡Qué mania más absurda! Si tan fan es uno de la lectura, que aprenda de cine y no gaste sus 9 euros en la entrada de algo que no va a superar a la pieza madre, como tampoco lo hacen los innecesarios y rentables remakes con los que nos atufa la industria cinematográfica. Muy disfrutable y con muchos hallazgos.
“On the Road” se estrena en cines el próximo 19 de abril
