Una experiencia visual de Douglas Gordon en la Collection Lambert de Avignon
Ya no es una novedad, en las propuestas contemporáneas, que el espacio expositivo forme parte del juego que pretende instaurar el artista. Por ello, resulta aún más interesante la confrontación paradójica entre el universo sombrío y melancólico de Douglas Gordon y la belleza arquitectónica del Hotel de Caumont (sede de la Collection Lambert). Una puesta en escena barroca (ambientes de colores estridentes, fachada redecorada…) que permite adentrarse en el conocido imaginario del artista escocés con una reflexión sobre el cuerpo y el lado oscuro de la mente humana. Videos en cámara lenta (como el ya clásico 24 hours Psycho), autorretratos, fotos de famosos sin ojos (Blind Stars) sirven de guías en un trayecto plagado de referencias (Poe, Faust, doctor Jekill y mister Hyde). Un universo inquietante bajo el sol despreocupado de la Provenza.
La propuesta se completa con la instalación de seis pantallas gigantes, en la monumental capilla del colindante Palais des Papes, en la que el artista presenta una nueva creación audiovisual. Una visión poética que se reapropia de manera original el simbolismo religioso y la iconografía fundacional de Occidente (a través de un bestiario medieval actualizado) y que, según los organizadores, debería llegar a España (Sevilla o Santiago de Compostela) en el 2009.
Hasta el 23 de noviembre. Collection Lambert. C/Violette, 5. Avignon
