BALMAIN, BALENCIAGA Y ALEXANDER MCQUEEN, LOS 3 MEJORES (POR ALEX GUTIÉRREZ)
ParÍs, independientemente de lo comercial, aúna la creatividad y el ingenio para presentar colecciones que te deja en shock, donde ves cosas que no podrías imaginar y donde cada desfile es un espectáculo. Empecemos por Balmain, sin duda la que ahora es mi marca favorita para mujer. Creo que no había visto el renacer de una firma de una manera tan impactante desde que Nicolas Ghesquière se pusiera al cargo de Balenciaga. Ha ocurrido ahora lo mismo con Christophe Decarnin, que ha inyectado a la ya famosa casa un espíritu joven, sexual y como no, de puro lujo (obviamente apoyado por todos, especialmente por Roitfeld en Vogue Paris).
El tema de Balmain es el rock, pero un rock que no tiene nada que ver con ninguno que hayamos visto hasta ahora: las chaquetas a lo Michael Jackson perfectamente bordadas y construidas, el brillo de los cristales que son muuuuchos, los mini vestidos drapeados llenos de swarovskis, y los desteñidos jeans pitillos rotos de unos aproximadamente 1.400 euros hacen de la colección, a pesar de los precios, una de las mas deseadas.
Muchas veces te puedes cuestionar el porqué las piezas de las pasarelas son tan caras sin ser piezas de alta costura, eso es un debate que tendrá mas análisis en otro momento, pero lo que realmente puede llegar a molestar es que pagues un precio elevado por algo que realmente no merece la pena, ni a nivel visual ni creativo. Lo que Balmain tiene es una elaboración increíble, rozando los acabados de alta costura (detalles en hombros y mangas), que hace que sus piezas lleguen a costar 10.000 euros o más pero que más de alguna clienta pagará gustosamente por llevar algo que de veras la hará única cuando salga a la calle.
Lo que más me gusta de este renacimiento es que un nombre tan potente como el de Balmain se ve ahora relacionado con un cliente que consume un lujo mas macarra (en el buen sentido de la palabra) dispuesta a llevar vestidos largos con jirones, jeans manchados con lejía, escotes y largos de falda imposibles, bordados de cristales sin caer en lo vulgar… y no inmutarse en el proceso.
La siguiente que me tiene el corazón ganado es la colección de Balenciaga por Nicolas Ghesquière. A diferencia de Balmain, en Balenciaga siempre observo creaciones que son espectaculares, que crean una tendencia pero que acaban siendo piezas para observar exclusivamente en pasarela. Después y como es lógico, desarrollan una colección paralela, mas asequible e inspirada en la de la pasarela para poder llegar al objetivo final, que es venderla en las tiendas (aunque en algunas ocasiones estas piezas son mas bien sosas).
Veo que muchas de las colecciones de Ghesquière pueden resultar duras para las mujeres ya que sus propuestas (futurismo, robots, amazonas, dominatrix, estructuras rígidas ) dista a veces de la suavidad que muchas mujeres solicitan a la hora de vestir en la calle. Hay mujeres que encajan en esos looks pero son las menos… al menos he visto muy pocas y no hablo de celebrities.
En esta colección de Balenciaga hay siluetas que sí darán un resultado más comercial; pero, en general, es un juego de luces (muy importante en el desfile) donde se sigue apreciando la pasión de Ghesquière por el futuro y la ciencia ficción, haciendo de las mujeres Barbarellas sacadas de otro mundo o comandantes de alguna nave espacial de Espacio 1999, creando lo que estas llevarían un su día a día o también por la noche. Me fascinan las chaquetas plisadas con mil colores brillantes, haciendo a veces un efecto degradé, también usado en minivestidos.
Balenciaga también es bien conocido por sus accesorios y en esta ocasión lo que más impacta son esos zapatos que se mimetizan perfectamente con la ropa haciendo una única pieza en conjunto. Y algo que no suele ocurrir y que me alegra muchísimo, es que haya presentado looks para hombre (más de lo normal en un desfile femenino) con un espíritu 100% Ghesquière y totalmente distinto de lo que suelen ofrecer en sus tiendas. Espero que lo desarrollen como es debido y la colección masculina sea igual o mejor que la de mujer algún día.
La tercera mejor colección parisina es la de Alexander McQueen en la que el diseñador vuelve a hacer referencia a su pasión por la naturaleza pero con un toque entre lo romántico y lo crudo que esta tiene. Ya en la colección del verano de 2008 había presentado sus creaciones al ritmo de Supernature de Cerrone, con estampados de mariposas, plumas y mil colores más. En esta ocasión la pasarela se convertía en un mini zoo con elefantes, osos polares, jirafas, tigres, leones… inspirado, según Mcqueen, en el origen de las especies de Darwin y en la industrialización del hombre (Si os fijáis, un estampado es de la Torre Eiffel).
Y eso es lo que presentó Alexander McQueen, un desfile feroz con un espíritu comercial indudable gracias a los estampados coloridos, su tailoring perfecto y la originalidad en la combinación de ambos. Los estampados, que no llegaban a saturar ninguna silueta, fueron para mí la parte mas especial por que creaba un efecto caleidoscópico gracias a materiales como la madera y las piedras preciosas.
Como contraste a ese colorido y quizás de aspecto más frío, Alexander McQueen presentaba piezas de cuero, de color negro y algunas mas rígidas que no perdían en ningún momento la belleza de lo que habíamos visto hasta ahora gracias a los detalles, los bordados y la pedrería.
La elaboración artesanal que caracteriza a Mcqueen se veía reflejada en esta pedrería bordada en chaquetas, vestidos y zapatos (Atención especial al los monos cubierto totalmente de piedras).
Y como broche final, el propio Alexander McQueen vestido de conejito dentro de su propio zoo. No sé, a mí los adultos disfrazados así me dan miedo…
Fotos: Estrop / Carles Cubos
21 de octubre de 2008 a las 0:17
Si se va Margiela de que va a hablar en clase Gabriel Torres???
14 de octubre de 2008 a las 11:57
Muchas gracias Fad Fix! me alegra que te guste y compartas mi opinión…cualquier comentario es bien recibido.
No, no trabajo en ningún otro medio, de momento la exclusiva la tiene Neo2 :-)
Saludos
Alex
13 de octubre de 2008 a las 20:31
me gusta como escribes y comparto tu punto de vista. Trabajas en algún otro medio?
Saludos
Fad Fix
13 de octubre de 2008 a las 0:27
Espero ver reacciones a la cole de Chloé.
¿Tomadura de pelo?
Tributo a la galleta Fontaneda?
Dí la verdad
12 de octubre de 2008 a las 15:53
Esperemos que efectivamente sea de otra manera, como bien dices porque puf, son poco agradecidas, eh?
Me gustaría ver a mí a Mireia Belmonte o a Arantxa Ramos con hombreras. Tiembla Robocop!!
Un bsito y muchas gracias por el feedback!
12 de octubre de 2008 a las 15:12
Muchas gracias Ana! Pues te tengo que decir que en la pasarela el primero en rescatarlas fue Margiela… ya sabes que dicen que todo vuelve,pero de otra manera. yo de momento no he visto ninguna en la calle…aunque tanto lo de Balmain como lo de Balenciaga son estructuras que sobresalen del hombro, nada que ver con aquellos trozos esponjosos que se pegaban con velcro :-)
12 de octubre de 2008 a las 3:21
para mi que mcqueen cada vez se parece mas a ghesquiere
11 de octubre de 2008 a las 22:03
Pedazo de artículo te has currado Alejandro!! Sí señor!
Yo creo que me quedo con Balmain.
Una duda: no me digas que vuelven las hombreras!!! No please, nooo!!! ;-)