PHOTOCALLS: AMOR & ODIO

Leigh Lezark lleva Chaqueta, top, short, brazalete y boy bag de Chanel

Photocalls malos y buenos. El de Chanel en el Tribeca Film Festival es de los buenos

Hay photocalls odiosos y los hay adorables. Los odiosos, para mí, son aquellos con un fondo de continuo de logotipos. La foto no es bonita, simplemente, ni aunque delante pose la mismísima Afrodita o una reencarnación de Antínoo. ¿Os imagináis una imagen de cualquiera de los 2 con un fondo lleno de logotipos? ni Andy Warhol. En un museo o una galería podría ser arte, pero como imagen de marca personalmente creo que resulta chabacano. Aunque no tengo datos, quizás sí sea una acción muy efectiva, y ante la efectividad hay que callarse, y más en estos tiempos. Independientemente de que no me gusten los photocalls con logotipos, una cosa que no entiendo en muchos casos es la conexión entre las celebrities que salen en él y la marca que se anuncia. En infinidad de ocasiones vemos photocalls con logos de moda y los personajes ni tan siquiera van vestidos de la marca anunciante. Y ya ni digo cuando se trata de una marca de calzado y en las fotos salen todos retratados de medio plano, o cuando el patrocinador es un reloj que ni tan siquiera apreciamos en la foto (este tema lo pondría como asignatura para los estudiantes de comunicación y relaciones públicas). Otra cuestión es el de las celebrities elegidas para posar en el photocall. El problema en España es doble. Aunque reconozco que no soy nada mitómano y puede que el primer problema lo tenga yo solo, pero es que en la mayoría de los casos no tengo ni idea de quiénes son los personajes que aparecen en las fotos (seguro que son alguien, pero tampoco lo parecen). El segundo problema sí que es real. Quitando a las celebrities que no conozco, las que reconozco son siempre las mismas. Son siempre los mismos en todas las fiestas (quizás por eso termino reconociéndolos), da igual el evento o lo que se promocione, las caras se repiten en todos los photocalls… Ya no es que el photocall sea un continuo de logotipos, también es un continuo de caras repetidas hasta la saciedad. Para resolver el problema de los logos, proponga la solución con la que siempre nos deleita Chanel, una de las marcas que a mi parecer mejor comunica los eventos en los que participa u organiza. No se ve un solo logotipo, los fondos de las fotos son siempre exquisitos (los puedes publicar incluso a doble página y quedan genial, parecen contenidos no comerciales), además todas las celebrities que posan van vestidas de la firma, y sus relaciones públicas lo comunican elegantemente a la prensa (principio básico del marketing: no basta hacerlo bien, hay que hacerlo saber). Como ejemplo, muestro las imágenes de la cena que organizó Chanel en el festival de cine de Tribeca, evento que homenajeaba a 13 artistas que habían aportado su obra para, no solo, una exposición durante el festival, sino también como premio a 13 directores galardonados (hasta en esto son originales, ¿no sé por qué pensamos que un premio siempre tiene que ser o una estatuilla o un cheque? Las 13 obras, premios, fueron donadas por los siguientes artistas: John Alexander, Ross Bleckner, Francesco Clemente, Renee Cox, Brandon d’Leo, Donna Ferrato, Ralph Gibson, Don Gummer, Stephen Hannock, Ryan McGinness, Clifford Ross, Timothy White y O Zhang. Aparte de todas las maravillas que aparecen en las fotos, a la cena también asistieron Robert de Niro, Casey Spooner y Cindy Sherman. Vale, puede que aquí no tengamos ese nivelón, aunque tampoco lo potenciamos. Para solucionar este segundo problema, propongo un negocio nuevo, se podría organizar en Ifema, incluso. Se trata de una feria de celebrities, con sus stands y todo, como en cualquier feria. La diferencia es que en lugar de vender o promocionar muebles, ropa, móviles o cuadros, aquí el protagonista sería el famoso. Cada stand sería de una agencia de representación. Allí se podrían alquilar celebrities internacionales, de todos los niveles, para todo el año. Podrían haber varios precios en función de a quién se contrate y cómo. Lo más caro sería, claro, contratar físicamente a una mega star. Pero también habrían opciones más económicas. Por ejemplo, fotos de la estrella con un croma detrás para que el cliente pueda poner el logotipo que quisiera a posteriori. Por supuesto, los famosos tendrían books con diferentes estilismos, unos más de verano, otros más de invierno… Con esta idea las marcas abaratarían muchos costes. Los eventos podrían empezar a ser ficticios. Me explico: te inventas una fiesta, donde quieras y cuando quieras, no hace falta que ni se celebre porque tienes lo importante, las fotos con las famosas, imágenes que previamente has comprado en la feria de las celebrities y a las que luego pondrás los logotipos a tu antojo. Con este invento las marcas ahorrarían quebraderos de cabeza y costosos gastos de producción: alquileres, aviones, hoteles, porteros, camareros, limpieza… y un largo etcétera. También será una putada para los blogguers, pero bueno, hay que apretarse el cinturón. De todas formas, siempre habrá marcas que seguirán haciendo sus happenings en vivo, donde todo el mundo podrá hacer fotos con el móvil para el facebook y para el twitter. Sinceramente creo que es una idea genial. ¿Se podrá patentar?

Alexa Chung lleva vestido y clutch de Chanel

Leelee Sobieski lleva zapatos y el look 6 de la colección primavera verano 2012 de Chanel

Heidi Mount lleva vestido y clutch de Chanel

Lily Donaldson lleva el look 65 de la colección crucero Antibes de Chanel

Naomi Watts lleva clutch y el look 3 de la colección primavera verano 2012 de Chanel

Jen Brill lleva clutch y el look 2 de la colección primavera verano 2012 de Chanel

Poppy Delevingne lleva clutch, bailarinas y el look 46 de la colección primavera verano 2012 de Chanel

Lily Kwong lleva el look 35 de la colección crucero Antibes de Chanel

Sophie Auster lleva clutch y el look 44 de la colección primavera verano 2012 de Chanel

Tallulah Harlech lleva clutch y el look 80 de la colección primavera verano 2012 de Chanel

Liv Tyler lleva abrigo y un vestido de la colección Starting Point primavera verano 2012 de Chanel