El nuevo vino rosado de Ramón Bilbao fusiona tradición y modernidad. Su perfil afrutado, floral y vibrante tiene alma riojana, pero su diseño cosmopolita conquista por su elegancia.
Con el lanzamiento de la nueva añada, la bodega refleja tanto su espíritu innovador como su apuesta por la calidad. Esta bebida fermentada promete al paladar una experiencia refrescante. Se trata de una versión renovada del clásico rosado, que se muestra en un color rosa pomelo envuelto en una sofisticada botella. Ramón Bilbao cuida todo el proceso de elaboración, desde la selección de las uvas hasta la vinificación, reflejando su trayectoria.
Un rosado con las mismas raíces pero con un resultado distinto
Este vino rosado de estilo provenzal, que fue pionero en La Rioja, inició su trayectoria hace 13 años. Está inspirado en los tradicionales claretes del valle de Najerilla que se lograban al mezclar uvas blancas con uvas tintas. Ramón Bilbao tras cumplir un centenario ha dado un giro a su historia con un líquido más fresco. Este rosado mantiene su identidad, marcada por la historia de la bodega, pero evoluciona para adaptarse a los nuevos tiempos.
De sabor afrutado, floral y vibrante
El clásico rosado de Ramón Bilbao se reinventa para ofrecer un perfil más contemporáneo. Su textura aterciopelada le otorga un carácter elegante y sofisticado que se refleja en cada sorbo. Procede de viñedos ubicados en la zona de Rioja Alta, en concreto entre los 550 y los 770 metros de altura, lo que favorece una maduración más lenta y equilibrada de la uva. Además, con el objetivo de preservar la frescura de la fruta y reducir la graduación alcohólica se realiza una vendimia temprana.
Tras la cosecha de la uva se elabora con un 80% de garnacha y un 20% de viura, también llamada macabeo, fermentándolo a baja temperatura para conservar los aromas primarios. El resultado tiene notas de frutos rojos que le confieren una gran versatilidad y se recomienda servirlo a una temperatura de ocho a diez grados para apreciar plenamente sus cualidades.
Ramón Bilbao apuesta por un vino suave que marida con cada ocasión
Al entrar en contacto con el paladar, este rosado despierta los sentidos. Destaca su frescura y suavidad en boca. Por sus características puede degustarse en momentos que van desde un aperitivo al sol hasta una cena cosmopolita, pasando por un brunch. Y, por sus matices, acompañado de platos fríos como mariscos, ensaladas o sushi potencia la degustación.
“Hemos elaborado esta añada buscando una perfecta combinación entre tradición y vanguardia. Cada paso de su elaboración fue pensado para resaltar la delicadeza y la elegancia, desde la selección de las uvas hasta el proceso de vinificación. Buscamos crear un vino que no solo sea una expresión de la tierra, sino también una invitación a disfrutar los momentos compartidos de una manera única. Este rosado refleja la visión de un estilo de vida actual: ligero, sofisticado y fresco, pero con la profundidad de lo bien hecho”, asegura Rodolfo Bastida, director de bodegas Ramón Bilbao.
La botella refleja la nueva imagen a través de su etiqueta serigrafiada con un diseño minimalista. Mantiene la icónica ilustración que caracteriza a la bodega, pero además su acabado aporta distinción y delicadeza. Esta nueva añada de Ramón Bilbao Rosado ya está disponible para su consumo en los restaurantes y para su venta en las tiendas por un precio de 9,40 euros.