PERFECCIONISMO SE ESCRIBE CON X
Las sondas espaciales Voyager, lanzadas en el año 1977, llevaban consigo un disco de oro con sonidos e imágenes de la Tierra. La selección fue realizada por la NASA y un comité presidido por Carl Sagan. Por supuesto, en el disco se incluyeron canciones: desde el Concierto de Brandemburgo nº2 en fa mayor de Bach al Johnny B. Goode de Chuck Berry. ¿Y si tuviéramos que grabar ahora otro disco destinado a nuestros posibles vecinos espaciales? ¿Qué incluiríamos en él? Yo voto por cualquier canción de The XX para comenzar la grabación. Lo vi claro el pasado martes 13 de noviembre en La Riviera, la segunda fecha programada en Madrid del grupo, tras agotarse las entradas que puso a la venta Primavera Sound para su primera fecha, el día 14. A pesar de tener muchos fans, la duda del directo planeaba sobre la joven banda de Londres. Antes de poder despejarlas, subió al escenario John Talabot, un más que digno telonero, de hecho, casi se podría decir que en este evento no hubo teloneros, porque el barcelonés está muy a la altura de los londinenses. Amigos además todos ellos que se profesan admiración mutua. The XX subieron al escenario aproximadamente a las diez de la noche para presentar su nuevo disco, “Coexist” y todos los hits de su primer disco. Comenzaron con “Angels”, una de esas canciones que bien podrían viajar en una sonda espacial, y la formación de tres se distribuyó en el escenario con Jamie, como el genio en la sombra, en segundo plano, mientras Romy y Oliver se enfrentaban al público en primera fila. The XX en directo son perfectos. Nada se deja al azar y todo está calculado al milímetro. No hay grandes visuales ni nada impactante sobre el escenario, solo tres tipos convencidos de lo que hacen, vestidos de riguroso negro y arropados por bonitas luces que acompañan esas melodías que el público tararea desde el primer acorde. No intentan ser simpáticos, ni divertidos, solo suben al escenario para tocar su música. Y se ve que lo hacen de forma honesta, disfrutando con ello. Después de una hora de concierto se atrevieron con un bis que empezó, irónicamente, con “Intro”. Una intro para terminar y muchas canciones para una nueva sonda espacial. De la Tierra al infinito y más allá…
Fotos analógicas de Markus Rico
