
Curvas imposibles, silueta galáctica y espíritu setentero: la F300 Lounge Chair está de vuelta. Medio siglo después de su lanzamiento, esta butaca que parecía llegada del futuro -y que terminó en la colección permanente del MoMA- regresa a la producción industrial con materiales del siglo XXI, lista para seguir descolocando el canon doméstico.
El autor de semejante artefacto fue Pierre Paulin, escultor frustrado por culpa de una mano maltrecha. Sustituyó el mármol por la espuma y el pedestal por la alfombra. Lo que siguió intacto fue su empeño por atrapar el movimiento en la quietud. Influido por figuras como Charles y Ray Eames, George Nelson o el diseño escandinavo, Paulin se definía como funcionalista, aunque siempre matizaba que a sus piezas les añadía “dos gotas de poesía”. La F300 Lounge Chair no escapó a esa lógica rebelde. Sin respaldo definido y sin la menor intención de parecer una silla convencional. Y, no obstante, cumplía su función con una eficacia casi insolente. Hoy, Gubi la reedita preservando su alma insumisa, pero sustituyendo los compuestos originales por una solución contemporánea: Hirek, un polímero técnico de altas prestaciones fabricado a partir de residuos plásticos.

Un material perfecto para la Gubi F300 Lounge Chair
¿Y por qué este nuevo polímero y no otro? Porque ofrece una mayor resistencia al uso diario, al sol y al paso del tiempo. Se limpia con facilidad, soporta traslados improvisados y no exige cuidados especiales. La fabricación se realiza en Italia, empleando moldes específicos que reproducen fielmente la estructura sinuosa ideada por Pierre Paulin. “La Gubi F300 encarna a la perfección el enfoque de mi padre hacia el diseño y el equilibrio entre escultura, elegancia y comodidad que buscaba en su trabajo”, explica Benjamin Paulin, hijo del creador.


El cuerpo manda
Alejándonos de los tecnicismos, lo que hace única a la Gubi F300 Lounge Chair es su forma de ser utilizada. No está pensada para sentarse recto ni mucho menos para mantenerse quieto. Permite acomodarse de lado, con las piernas cruzadas o colgando por un extremo. “Es cierto que la F300 es una silla visualmente impactante, con un toque lúdico y mucha personalidad, pero es mucho más que una escultura fotogénica. Su diseño se basa en la investigación y en una comprensión práctica de cómo se sienta la gente. Su forma es tal que resulta casi imposible no relajarse al hacerlo”, señala Benjamin Paulin.


Una compañera a la altura
Imposible pasar por alto que Gubi ya había sellado su compromiso con la exaltación del acervo creativo de Pierre Paulin mediante la resurrección de la famosa Pacha Lounge Chair, caracterizada por una perfilada y aterciopelada volumetría, desprovista de patas.”Nos complace ampliar el porfolio de diseños de Pierre Paulin en Gubi e incluir otra pieza igualmente rompedora. A su manera, la F300 es tan icónica como algunas de las sillas más celebradas del siglo XX”, afirma Marie Kristine Schmidt, Ceo de Gubi.

Disponibilidad y precios
La Gubi F300 Lounge Chair ya está a la venta en la web oficial de Gubi. Su precio es de 2.999 euros, independientemente del acabado elegido. La T877 Side Table, su aliada perfecta, está disponible por 299 euros.
Más sobre Pierre Paulin
Pierre Paulin forjó una estética disruptiva que desmanteló las rígidas premisas del diseño moderno. En su fructífera etapa con Artifort alumbró piezas paradigmáticas como la Mushroom (1959), la Tongue (1963) o la Ribbon Chair (1966). Su evolución estilística transitó hacia el hedonismo, marcado por la pureza del trazo, expresado en líneas fluidas y ergonomías libres. Tal sensibilidad le granjeó el encargo de intervenir en los interiores del Palacio del Elíseo bajo los mandatos de Georges Pompidou y François Mitterrand, si bien él optó por un discreto alejamiento de cualquier ostentación pública.
Al desdén por la notoriedad añadió el retiro voluntario a la serenidad agreste de las montañas de Cévennes, donde su última creación, acaso inesperada, dejó de ser un mueble para convertirse en una arquitectura doméstica en plena sintonía con el terreno en el que eligió vivir.
En la actualidad, el epistolario creativo de Paulin perdura bajo la rigurosa tutela de su familia, que desde el estudio Paulin, Paulin, Paulin impulsa la realización de proyectos inéditos y reediciones que consolidan la perennidad de su legado.
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F300 Lounge Chair – Pierre Paulin
Ancho: 80 cm
Profundidad: 69 cm
Altura: 61 cm
Materiales:
Estructura en Hirek® moldeado por inyección, disponible en blanco alabastro o verde pastel. Tapizado disponible en varios acabados textiles y pieles naturales.
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T877 Side Table – Pierre Paulin
Ancho: 50 cm
Profundidad: 50 cm
Altura: 27 cm
Materiales:
Estructura en Hirek® moldeado por inyección, disponible en blanco alabastro, verde pastel, violeta hielo, dorado miel o Molé.

