Chlöe’s Clue estrena en exclusiva su nuevo videoclip El Uniforme, un pasodoble futurista y en versión moderna y actual… La cantante publicará su nuevo EP en octubre
Chlöe’s Clue es Raquel Adalid (Valencia, 1996) y es uno de los proyectos musicales más particulares de la escena. La cantante, compositora y productora no tiene miedo a ser creepy -como ya nos mostró en Jolín– o a crear pasodobles del futuro en El Uniforme. Clue ha pasado por festivales como el SXSW de Estados Unidos o The Great Scape en Reino Unido. Tras varios discos, la cantante se aventura en una nueva etapa estilística y musical.
¿Quién dijo que el pasodoble era cosa de abuelos? Pues toma pasodoble futurista y retro chic
El Uniforme de Chlöe’s Clue llega con traje de nana suave y alma punk. Y no, no es solo una canción. Es un flechazo azul eléctrico con un mono de trabajo comprado en Confecciones Fidalgo Laborogar. Sí, has leído bien. La inspiración no siempre viene de París, a veces está en la esquina de tu calle. La canción arranca como un susurro dulce. Parece que no va a pasar nada.
El Uniforme de Chlöe’s Clue (@chloesclue) es una nana punk con olor a aguja e hilo
Pero cuidado. Poco a poco se retuerce, se rebela y acaba con un grito elegante. Chlöe acaricia lo obvio, lo ordinario. Le da brillo a lo invisible. Y lo convierte en belleza. Así, sin despeinarse. Bueno, igual un poco. La producción corre a cargo de Rubén Segovia Cobo, conocido por meterle magia electrónica a lo folclórico. Y aquí se nota. El pasodoble de toda la vida se transforma en algo nuevo.
Sencillo, sí. Pero con un toque perturbador que no se quita ni con lejía. Y el videoclip… ¡ay, el videoclip! Dirigido por Kevin Castellano y Edu Hirschfeld, es una delicia visual con aroma a musical obsesivo. Chlöe se queda sola en su taller todo el fin de semana. Y lo da todo. Tijera, hilo, locura. Cose y descose con una intensidad casi ritual.
Chlöe’s Clue
Como si el mono fuese la prenda definitiva. Su propia religión de algodón azul. Todo está cuidado al milímetro: paleta blanca y azul, luz quirúrgica y una atmósfera entre lo adorable y lo inquietante. El resultado es una fantasía textil con alma de videoclip y corazón de performance. Un homenaje a lo cotidiano. Una oda retorcida al uniforme que, sin quererlo, lo cambia todo.
Chlöe’s Clue