Christian Andersson

La galería von Bartha, en Basilea presenta los últimos trabajos del artista sueco Christian Andersson (1977). Una exposición en la que Andersson muestra su particular visión sobre la intersección entre ciencia, realidad y ficción con esculturas de madera en cuatro dimensiones, vídeos y grabados trompe l’oeil. En esta entrevista para Neo2, el artista nos habla de su proceso creativo.

Interés como artista: “Se podría decir que estoy construyendo un modelo o dibujando un mapa, donde amplío calles y edificios, añadiendo personajes y tramas. Este modelo se dibuja constantemente, pero en cada nueva versión algo se queda, como si fuera una estructura permanente en este terreno. En su conferencia ‘How to build a universe that doesn’t fall apart two days later‘(1978), el autor Philip K. Dick dijo: ‘Voy a revelarles un secreto: me gusta construir universos que se desmoronan. Me gusta verlos despegarse, y me gusta ver cómo los personajes de la novela hacen frente a este problema‘. Estoy totalmente de acuerdo con este método de trabajo. Este modelo que estoy construyendo es el que utilizo para probar diferentes ‘personajes’ conocidos en la historia, el arte, la ciencia, etc. Dejo que mis referencias corran por mis calles, perdido y confundido, para ver donde se instalan finalmente. Para mí esta es una manera de alcanzar una visión alternativa de los hechos, verdades e ideas del mundo que me rodea“.

Christian Andersson Dreamcatcher (fotograma), 2015. Cortesía del artista y von Bartha, Basel, Cristina Guerra Contemporary Art, Lisboa, Galerie Nord.

Ideas: “Surgen en cualquier lugar. Una idea puede venir de una escena de una película, un olor o un comentario de alguien. El truco para mí es que siempre tengo la cabeza llena con todo tipo de información. Cuando la cabeza está a punto de explotar, todo lo que necesita es una chispa. La idea de la obra Dreamcatcher (2015), por ejemplo, surgió de una tarjeta postal con una imagen que vi cuando era un niño, del pintor surrealista Giorgio de Chirico. Siempre sentí que sus primeros trabajos metafísicos contenían una noción muy específica del tiempo, como si no fueran paisajes fijos sino más bien una animación a cámara lenta“.

Christian Andersson Strike, 2012. Foto: Andreas Zimmerman. Cortesía von Bartha.

En el estudio: “¡Trabajo de una manera muy luterana! Estoy aquí desde las 8 de la mañana hasta las 7 pm. A nivel práctico lo que realmente hago en mi estudio varía dependiendo del lugar y del proceso  en el que esté. A veces me siento a mirar a la pared durante horas, sólo para pensar. Durante otros períodos me concentro en el trabajo práctico, la construcción de esculturas, haciendo bocetos, etc. Una obra de arte, a menudo, te dice en que se convertirá. Es una cuestión de ser sensible, de prever dónde va cada pieza y luego a esto le sigue el trabajo, cuando está tomando forma. Esto significa que una idea puede convertirse en un dibujo, un molde de bronce o un vídeo. En mi opinión, si fuerzas una idea nunca tendrá vida“.

Christian Andersson From Lucy with love, 2011. Cortesía Moderna Museet. Foto: Terje Östling.

Ciencia, realidad y ficción: “Tengo mucho interés en los vínculos entre ellas. Leo una novela de ciencia ficción y es ficción. Leo la revista Scientific American y se considera una ciencia. Para mí las distinciones casi no importan, porque lo concibo todo como parte de una historia en curso, en la que algunas partes se considerarán fantasías o ficción, mientras que otras se verán como  ciencia y hechos. La cuestión es por qué queremos desesperadamente separar estas dos posiciones, tal vez, porque están muy relacionadas con las definiciones de la realidad. La ficción puede servir como una zona de amortiguamiento frente a la realidad, lo cual es muy útil si se desea trazar una línea clara entre lo que se promueve como real y lo que se etiqueta como una fantasía. El concepto de la realidad no es, por supuesto, un fenómeno nuevo. A lo largo de la historia el concepto de realidad ha sido modificado de forma activa y utilizado como una herramienta para conservar el poder de ese momento en particular. Si estás en una posición de poder, puedes hacer del diablo una criatura real, y afirmar que la idea de que la tierra es una esfera es un producto peligroso de la imaginación, etc. Es fácil reírse de ejemplos como estos hoy en día, pero también es bastante ignorante confiar en el hecho de que nunca serán sometidos a las definiciones manipuladas de la realidad actual. Descartar la información como ficción o fantasía sigue siendo una forma muy efectiva de ridiculizar o amenazar a quien promueve un punto de vista subversivo. No estoy afirmando que una potencia iluminada nos mantiene en la oscuridad. Simplemente estoy diciendo que la ficción puede ser más real y útil de lo que pensamos“.

Christian Andersson Self portrait Living fossil, 2013. Foto: Dominique Uldry. Cortesía Kunstmuseum Thun y el artista.