El artista cántabro presenta un libro retrospectiva de su trabajo en la Munch Gallery de Nueva York
Siempre da gusto enterarse de que artistas patrios triunfan fuera del país de procedencia, pero si además descubrimos que uno de estos talentazos es Bubi Canal, la noticia aparece indicada con luces de neón y bien de colorinchi. Hace unos días, el santanderino revolucionó el Bowery neoyorquino en la presentación de su monografía bilingüe Dreamtime, en la conocida Munch Gallery. Un recorrido por su particular mundo paralelo de fotografías, objetos, vídeos e instalaciones de gran impacto visual y que evocando aquellos años 80 de exóticas inspiraciones infantiles, lisérgico colorido y escenas mitológicas clásicas revisitadas, han seducido a sus numerosos y entregados seguidores all over the world a lo largo de estos años. Páginas en las que seguimos disfrutando de lo prefabricado frente a lo artesanal, lo familiar contra lo onírico y lo extraño en perfecta combinación con aquellos recuerdos de una infancia que queda más que actualizada. Un libro publicado por ACDOS Actividad Contemporánea que nos recoge y transporta a esos mundos imposibles de los que nunca quisimos salir, mientras sigue esparciendo más color sobre una rutina que se abre a lo desconocido, creando algo definitivamente nuevo y apto para hacernos con el poder de esa realidad que siempre hemos querido colorear.
