Gramática Arquitectónica: Casa Máxima, una danza doméstica

Gramática Arquitectónica presenta su última obra en Galicia, la Casa Máxima. Una multiplicación de plazas que danzan con desparpajo al ritmo de una coreografía doméstica y un paisaje.

Inscrita en el horizonte de Poio, Galicia, Gramática Arquitectónica (Teresa Sánchez Táboas, Laureano Pereira Peón, Andrés Suárez Outeda, Josep Ramón Solé, José Antonio García Otero y Petrica Butusina), aterriza entre jardines de hortensias y campos de maíz, la Casa Máxima. Un relato de secuencias domésticas que afronta un diálogo mediado por el bellísimo cromatismo de la luz, los volúmenes que la cercan y los umbrales que quedan atrapados entre ellos.

Gramática Arquitectónica: Casa Máxima, una danza doméstica

Un proyecto es una mirada y son varias miradas. Un texto – este artículo -, son otras múltiples miradas abiertas sobre una arquitectura que, en este caso, conglomera en su gramática, paisaje y arquitectura. La arquitectura con que Gramática Arquitectónica aproxima la Casa Máxima se somete a la preexistencia del lugar sin apriorismos, apreciando la importancia de los valores más permanentes y definitorios del entorno. En mímesis con el paisaje rururbano gallego y sobre el terreno irregular de una antigua red de minifundio, la Casa Máxima, supone un límite muy difuso entre la ciudad y el paisaje agrario.

Gramática Arquitectónica: Casa Máxima, una danza doméstica

Desarrollando todo su programa funcional en planta baja y rodeada en cada esquina por la presencia discreta de la naturaleza, la Casa Máxima, se erige en una parcela donde la secuencia orográfica adquiere resonancias aquí y allá, introduciendo el protagonismo iniciático en el que parecen florecer unos pequeños volúmenes que se conectan unos con otros, articulando así la danza de los diferentes usos domésticos.

Gramática Arquitectónica: Casa Máxima, una danza doméstica

Frente a la tentativa de aterrizar en este paisaje un concepto de planta abierta, Gramática Arquitectónica opta en primer lugar por relacionar la experiencia del usuario con la topografía. Ligada a la cuestión del movimiento, la Casa Máxima, promete una sucesión de estancias donde se despliega una gran capacidad coreográfica con la atmosfera que la circunscribe: a cada estancia le corresponde una comunicación con el cielo a través de un pequeño lucernario, por lo que cada espacio es testigo de como la luz va cambiando a lo largo del día. Del mismo modo, y con la ayuda de un elemento cromático continuo en el pavimento, cada volumen tiene también su propia apertura hacía un exterior ajardinado, consiguiendo así que desde cualquiera de las estancias se tenga la sensación de habitar en el umbral entre la casa y el paisaje.

Gramática Arquitectónica: Casa Máxima, una danza doméstica

A grandes rasgos Gramática Arquitectónica proyecta una arquitectura -la de la Casa Máxima- basada en establecer profundidad de campo organizando direccionalidades transversales, donde cada volumen se adapta y genera un tangram de tipologías de cubiertas que disgrega la casa en otras pequeñas casas dentro de ella. Sin explicitarlo, su arquitectura introduce algunas nociones sobre como trabajar con la naturaleza y evitar la pesada carga de lo tectónico, ambos temas de una profunda vena pintoresca, algo que se entrevé en el mero hecho de no generar excavaciones al terreno que corten las escorrentías naturales del territorio donde se asienta.

Gramática Arquitectónica: Casa Máxima, una danza doméstica

De fuera hacia adentro nos guía un paseo perimetral que rodea los volúmenes y que traza las curvas de granito y las diagonales generatrices de los tres espacios exteriores. En un primer término encontramos la cocina, una plaza semicircular holgada, ocupada por una isla de fogones que se anexiona a una gran mesa. Consecutivamente se agregan dos plazas rectangulares que organizan los grandes espacios de día: sala de estar y piscina. En último término se dispone una plaza interior triangular, un espacio privado cercano a los tres dormitorios, los cuales permiten disgregar cuatro áreas distintas dentro de sí mismos.

Gramática Arquitectónica: Casa Máxima, una danza doméstica

La caja central divide la zona de vertíbulo previo de la habitación en la zona de las armariadas, la zona de escritorio y finalmente el área de la cama en contacto con el jardín de hortensias. El mismo esquema se reproduce en la zona intersticial de llegada a la vivienda, esta vez utilizando un armario para abrigos, que separa dos espacios diferentes, uno más pequeño de bienvenida y otro que funciona como una sala de lectura con conexión a la plaza interior.

Gramática Arquitectónica: Casa Máxima, una danza doméstica

En términos de eficiencia energética y materialidad, se instalan suelos radiantes con aerotermia. También se presta especial atención a la utilización de aislamientos de fibras naturales. Correlativamente, la separación del terreno se acomete mediante un forjado sanitario y vidrios de bajos emisivos. Las paredes exteriores se presentan en granito gris gallego, con marcadas juntas horizontales para reforzar el peso y la conexión a lo terrenal.

Gramática Arquitectónica: Casa Máxima, una danza doméstica

Por otra parte, las cubiertas reproducen grandes aperturas al cielo y se rematan en zinc, un material ligero. En el interior, únicamente se rompe la pureza pálida de los paños, con los pavimentos en tonos grisáceos. El resto de acabados busca marcar los las líneas de unos volúmenes puros y prístinos. En este sentido, la búsqueda de la simplicidad de la que parte Gramática Arquitectónica en la Casa Máxima deviene el más contemporáneo de los esfuerzos y su mejor conquista. No renuncia a una complejidad interesante, sino que asocia la intensidad del esfuerzo al establecimiento de sistemas con los que obtenerla a través de operaciones tan elementales como es posible.

 

————————

Autor: Gramática Arquitectónica
Localización: Poio, Galicia
Año: 2019
Superficie: 300 m2
Cliente: Privado
Equipo: Teresa Sánchez Táboas, Laureano Pereira Peón, Andrés Suárez Outeda, Josep Ramón Solé, Jose Antonio García Otero, Petrica Butusina
Colaboradores: Construcciones Fontexil
Fotografías: Andrés Fraga Pérez

————————

+ www.gramaticaarquitectonica.com