Lenguas Futuras - entrevista a Fran Meana

Humidificador y leds con menta y citronela, luces de colores y humo con olor a clavo y luego olor a gengibre y bergamota. Fran Meana y yo nos escribimos por messenger, hablamos por móvil, mails, por Drive, por todos lados vaya y mientras hablamos por aquí huele a eucalipto y a ratos a saco a lemongrass. Hablamos de todas las formas, todo muy online, todo lo online que pueda, te digo, a tono con el contenido de nuestra charla sobre su trabajo, sobre pioneras, tecnología y futuro. Fran Meana (Avilés 1982) vive en Londres y su práctica artística se centra en la investigación de narrativas, de temas que intervienen transversalmente al mismo tiempo en la cultura, la industria y la naturaleza.

Fran Meana es un artista que colabora con personas del ámbito científico, particularmente de la microbiología, la ingeniería y también la programación informática y la climatología. Ha participado en exposiciones como System Recovery, Assembly Point, Londres (2018), Labour, Motion and Machinery, TENT, Rotterdam (2015), Arqueologías del Futuro, Laboral, Gijón (2016), Percussive Hunter, Akbank Sanat, Estambul (2015) y Machines for Hardrock, Avalanche, Londres (2015) entre otros. Ahora prepara un documental educativo, donde niñ@s y robots discuten el rol del juego en el aprendizaje. Ahora aquí en el presente, entre textos digitales y vapores digitales y entre sus cables y mis cables hablamos a placer de arte.

¿Crees que herramientas digitales como la impresión 3D, la animación, la programación, las pantallas led y las mini computadoras, son útiles en el arte para reinterpretar el pasado en forma de instalación?:
Fran Meana: Son muy útiles para producir y reproducir con rapidez y tienen un tipo de materialidad muy atrayente, compleja pero casi inmaterial. Es importante no dejarse engañar por esa apariencia fantasmal y entenderlas dentro de la historia de la producción industrial. Son parte de una búsqueda de la “producción ideal” que acaba transformando el trabajo físico en producción aparentemente inmaterial. Tras esa facilidad de uso y aparente levedad, se esconden problemas como la precarización o el crecimiento exponencial.

Lenguas Futuras - entrevista a Fran MeanaLenguas Futuras - entrevista a Fran MeanaLenguas Futuras - entrevista a Fran MeanaSystem Recovery – ©Ben Westoby/Assembly Point. 2018

Utilizas unos motivos geométricos, un nuevo-viejo lenguaje en tus esculturas que funciona como una forma de comunicación alternativa, como un codigo alien, marciano ¿no?, una simbología basada en tu investigación sobre los antiguos relieves que dejó un misterioso programa pedagógico convertido ahora en un lenguaje estelar. Esto funciona de perlas. A través de la combinación que haces de los nuevos medios, estableces un puente entre una comunicación del pasado y un lenguaje de pictogramas futuristas, que recuerdan al misticismo tan sexy de las líneas de Nazca. ¿a qué obedece toda esa combinación formal del lenguaje viejo-nuevo y esa estética sintética con la que lo planteas?:
Fran Meana: Crecí cerca de esos relieves, pero tarde casi 30 años en entender y poder contar que los hace algo tan especial. Es curioso porque siempre empiezo a trabajar partiendo de una preocupación u objeto actual, pero comienzas a buscar y establecer relaciones y la cosa se complica… (risas) La mirada tiene una naturaleza marcadamente histórica y es imposible, cada vez más, imaginar el futuro sin entender el pasado.

¿Qué te gusta más sobre la relación entre las formas naturales y las formas tecnológicas?:
Fran Meana: Finalmente empezamos a darnos cuenta de que las categorías que manejamos, como la tradicional separación entre naturaleza y cultura, sujetos y objetos, son arbitrarias y permeables. Algo palpable en el arte, la ciencia y el pensamiento actual y que poco a poco, irá permeando todas las facetas de la vida hasta transformarlas. O eso espero… (risas).

Lenguas Futuras - entrevista a Fran Meana Lenguas Futuras - entrevista a Fran Meana Lenguas Futuras - entrevista a Fran Meana Lenguas Futuras - entrevista a Fran MeanaFuture Archaeologies/ Arqueologías del Futuro – ©Marcos Morilla/Laboral. 2016

¿Qué nuevos modos de producción y que nuevos discursos artísticos que estés viendo te interesan?:
Fran Meana: Las pedagogías experimentales de la Escuelita, BAR, Open School East o School of the Damned. Proyectos como Fluent, Green Parrot o Yaby y la aparición de cooperativas como Traktora. Son propuestas capaces de cuestionar y ampliar lo que entendemos por arte.

¿Cómo será la Arqueología del Futuro?:
Fran Meana: Será una narrativa experimental, colectiva y transversal capaz de aglutinar saberes que provienen de multitud de campos.

Colaboras en el Koestler Trust y el Institute of Imagination como tutor en sus programas educativos. Creo que el ámbito educativo del arte, si es un ambito innovador, actualizado, bien entendido vaya, es un espacio importante para la divulgación del arte contemporáneo que hacemos ahora mismo, mientras hablamos ¿no te parece? ¿cuál es tu experiencia?:
Fran Meana: Estas organizaciones acaban cubriendo las carencias de la educación reglada, sometida a crecientes presiones políticas y presupuestarias. Las humanidades atraviesan un momento muy complicado, y estos programas ofrecen un espacio cada vez más necesario para el pensamiento crítico y la creatividad. Es importante salir del taller, trabajar en grupo y esforzarse para que el campo del arte sea inclusivo, no exclusivo. Las sesiones son muy intensas y llego a casa agotado, pero feliz.

Háblame de tu colaboración con el mundo de la ciencia y la microbiología:
Fran Meana: Me interesa mucho la ciencia, sobre todo hecha por mujeres como Donna Haraway, Lynn Margulis, Mary Beard… uno de mis libros favoritos es Lab Girl de Hope Jahren. Algunas colaboraciones se convierten en proyectos cómo Starter Cultures donde los trabajadores de una fábrica de quesos artesanal nos explican su “relación laboral” con las bacterias responsables de gran parte de la producción. Otros como las entrevistas que realicé con Manuel Coque, técnico del Serida y responsable de la introducción del Kiwi en la cornisa cantábrica, tardan en coger forma, pero me ayudan a entender lo que Timothy Morton llama una “ecología sin naturaleza”.

Lenguas Futuras - entrevista a Fran Meana Lenguas Futuras - entrevista a Fran Meana Lenguas Futuras - entrevista a Fran MeanaThe Immaterial Material, 2014 – ©Roberto Ruiz/Nogueras-Blanchard. 2014

La novela A Woman on the Edge of Time y la ciencia ficción en tu trabajo:
Fran Meana: Es un clásico de la ciencia ficción feminista publicado a finales de los setenta pero extrañamente actual y al que siempre acabo volviendo. Recientemente utilizamos varios fragmentos en un taller de código que se realizó primero en Fluent (Santander) y luego en Assembly Point (Londres). La idea era analizar y transformar las relaciones de género, sujeto y colectividad, distancia y proximidad, codificadas en el uso de los pronombres. Aproximarse a la ciencia ficción como “thought experiment” para recombinar elementos ya presentes en el mundo.

Londres
Fran Meana: Me mudé a Londres por cuestiones personales hace ya 5 años. Mi pareja es inglesa y aunque la relación a larga distancia parecía funcionar, nos decidimos a probar. Me las apaño a pesar de llegar en un momento muy complicado para la ciudad.

Lenguas Futuras - entrevista a Fran MeanaSome Plants Grow Protected by their Image, 2013 – ©Fran Meana/Motive Gallery. 2013

Lenguas Futuras - entrevista a Fran MeanaStarter Cultures, 2017 – ©Manuel Blanco/La Casa Encendida. 2018

De tu exposición Archaeologies of the Future en Laboral (2016) además del concepto, por supuesto, me interesan particularmente y en este orden la composición espacial, las decisiones que tomaste sobre la distribución de las formas y la combinación de los metacrilatos, tus poliuretanos expandidos, el video, el text bot, el cableado y las estructuras metálicas modulares. ¿por qué tiene ésta configuración?:
Fran Meana: Traté de plantear la exposición como una cápsula temporal, un archivo en construcción, sin cerrar, para invitar al espectador a establecer sus propias conexiones. Algunos elementos como los relieves en poliuretano están llenos de huellas que permiten reconstruir su proceso de fabricación. Otros como el robot de texto están en permanente estado de transformación, moviéndose entre el signo como material y el texto final, mientras recrean posibles paisajes futuros a partir de los estudios de un climatólogo local. La estructura del proyecto es también el resultado de una decisión práctica, era importante que pudiera tener una vida más allá de esa presentación inicial. En cierta forma el contenido de la pieza es un software que puedo actualizar.

¿En qué andas interesado en estos momentos? ¿cuáles son tus nuevos proyectos?:
Fran Meana: Estoy recopilando material sobre las pioneras del arte tecnológico para un nuevo proyecto. Preparando un documental educativo, donde niñ@s y robots discuten el rol del juego en el aprendizaje, los límites impuestos por la educación y los increíbles parecidos entre algunos tipos de educación y la programación. También estoy preparando material para empezar un club de arte y ciencia en una escuela primaria del sur de Londres. Y un proyecto secreto, a medio-largo plazo, con Alex Alonso Díaz en el que nos hacemos pasar por consultores para transformar la producción de una de las grandes marcas del siglo XX. Hasta ahí puedo contar.