MIGUEL NOGUERAFoto: Xavi Olmos

ENTREVISTAMOS A MIGUEL NOGUERA CON MOTIVO DEL LANZAMIENTO DE SU NUEVO LIBRO “MEJOR QUE VIVIR”, PUBLICADO POR BLACKIE BOOKS

Inefable, quizás ese sea el mejor adjetivo para definir (o intentar hacerlo) al personaje, showman, escritor y actor que es Miguel Noguera. Su carisma y brillantez le han convertido en uno de los referentes del posthumor español junto a personajes como Venga Monjas o los actores de Muchachada Nui. Dejando a un lado su faceta de monologuista en sus Ultrashows, o monólogos casi soliloquios en los que desgrana concepto tras concepto sin coherencia y unión entre sí, destaca su faceta de escritor, habiendo publicado ya cuatro libros. El primero de ellos fue Hervir un Oso, en colaboración con Jonahtan Millán, publicado por la editorial Belleza Infinita en el año 2010. Tras este primer paso, llegarían los siguientes libros publicados por la editorial Blackie Books: Ultraviolencia (2011), Ser Madre Hoy (2012) y Mejor Que Vivir, su última incursión literaria. No nos extenderemos mucho más a la hora de hablar de las maravillas y glorias de Miguel Noguera porque, realmente, es uno de los genios de nuestro país. Un personaje en donde lo absurdo y lo macabro confluyen para mostrarnos un maravilloso mundo bizarro y una forma de plantear las cosas como nunca nadie lo había hecho. Os dejamos con el genio Miguel Noguera.

¿Cómo compaginas tu carrera de humorista / monologuista / actor con la faceta de escritor?
No pienso demasiado en las actuaciones durante la semana. Solo cuando llega el día en que tengo que actuar reviso el documento con las ideas que llevaré al show y el power point de imágenes; añado algo nuevo, elimino cosas, redistribuyo, depende… El tiempo restante, es decir, la mayor parte del tiempo, lo dedico al libro y a otras cosas, como responder a esta entrevista.

¿Por qué crees que te han incluido en la ola/movimiento del Post-humor? Supongo que porque de algún modo estoy vinculado con otros grupos y personas que forman parte de lo que ha sido llamado posthumor… He colaborado con algunos de ellos, soy amigo de varios, a veces nos aludimos recíprocamente… El término “posthumor” no lo ha acuñado ninguno de los que hemos sido asociados a él, lo creó Jordi Costa. Está todo en sus artículos y en la introducción del libro “Una risa Nueva” (ed. Nausicaä, 2010) http://www.nausicaaedicion.com/ext/risa.pdf. Personalmente no pienso demasiado en el asunto.

¿De dónde viene el título Mejor Que Vivir? Lo explico en el prólogo del libro. Todo viene del eslogan del pub O’Learys que está en el aeropuerto de Málaga. El eslogan es “Better than live”, mejor que en directo; pero yo lo traduje mal, pensé que querían decir “Mejor que vivir”, como si la experiencia que te estaba vendiendo el pub superase la vida aunque solo pudieras experimentarla desde la misma vida, como si de repente te propusieran el antivitalismo como lema de vida. Y me pareció que ese juego raro casaba un poco con mi trabajo, con el registro de pensamientos residuales y chorraditas finas. En cierto modo ese registro se da al margen de la vida activa, de las metas y las relaciones, es una especie de contravida, o vida al margen de la vida, en fin…

¿Qué diferencia a este libro de los tres anteriores? ¿En qué crees que se puede notar la evolución o cambio de los tres anteriores a este? Hay que decir que “Hervir un oso” (Belleza infinita, 2010), mi primer libro, fue hecho en colaboración con Jonathan Millán y es distinto a los tres posteriores. Gran parte del trabajo es de Jonathan y es difícil situarlo en la línea de los que he hecho después en solitario, son mundos distintos. Quizá “Hervir un oso” es un libro más singular, más de culto, y los míos son como un recogido homogéneo de ideas por entregas… En todo caso, si tomamos los tres editados por Blackie Books “Mejor que vivir” se diferencia de los dos anteriores sobre todo en la compresión del material y del texto. La nueva maquetación en doble columna permite que esta vez pueda haber hasta cuatro fragmentos por página, cuando en los otros libros había dos como máximo. El estilo de los textos se acerca más a la anotación que al microrrelato, es más roto y conciso, no tan literario, y se han incluido contenidos más sutiles, observaciones y curiosidades que no hubiesen entrado en los dos precedentes pero que conforman gran parte de las notas que tomo.

De este nuevo libro, ¿cuál es tu dibujo/concepto favorito? No sé… No lo pienso como una búsqueda del “mejor” contenido, como si existiese una jerarquía de calidades o ingenios. Además los concibo como una maraña, es decir, gran parte del sentido reside en que son muchos fragmentos, no giros autónomos. En cierto modo se ayudan o se reafirman entre ellos. Sería un tanto absurdo proponer un solo punto como expresión de lo que hago, creo que se malinterpretaría el fondo del trabajo.

MIGUEL NOGUERA

¿Por qué un póster de gatitos como obsequio del libro? Pues porque había suficientes ideas de gatos en los tres libros y Blackie Books quería regalar un detalle chulo con el libro… En realidad podríamos haber hecho un póster con ideas de rampas, viejos o perros. De hecho, con “Ultraviolencia” regalaron un póster que recogía los vehículos que salían en el libro… Esta vez han sido gatos.

Si tú tuvieras que definir tu humor ¿cómo lo definirías? (es decir, sería un sonido, un concepto, una palabra o un dibujo) Buah, no sé… La verdad es que nunca he definido mi humor, ya te digo que no pienso en términos de humor. Si tengo que explicarle a alguien en qué consiste mi trabajo intento ser bastante literal y objetivo; le digo que anoto cosas durante el día, siempre cosas que he pensado o imaginado a partir de algo que acabo de ver u oír en ese mismo instante, es decir, siempre hay un dato sensible que detona la imagen mental. Apunto estas cosas antes de que se me olviden, llevo una máquina de registro de vislumbres y anécdotas. Las guardo porque son lo único sobre lo que puedo hablar alegremente, genero lenguaje y juego alrededor de ellas, me encienden, son mi única certeza, lo único que tengo que decir. Luego escojo qué cosas quiero escenificar, o cuales voy a escribir y dibujar, y bueno, las explico (en el show o en los libros, por ejemplo), y cuando las explico entra en juego mi forma de expresarme, la que me sale naturalmente, lo que vendría a ser mi estilo, que se mueve entre el jugueteo frívolo y la vehemencia de un dictador, y bueno… eso es lo que hago. Que cada uno piense lo que le parezca.

¿Qué diferencia hay entre Miguel Noguera el personaje y Miguel Noguera, el hombre sencillo que va al coro y aprende sueco? El personaje es hetero, Miguel Noguera es gay… No, mira, supongo que el personaje puede llevar a pensar que soy un gritón, un espíritu dionisiaco, un entusiasta, etc., cuando soy más bien tímido, retraído, incluso asténico. Lo que hago en el show lo hago porque estoy en el show, es un juego, esa energía solo la movilizo delante del público. Luego se esfuma y queda un pobre diablo asustadizo y solitario (risas)

Ya llevas muchos años en el mundo del humor, desde el MACBA y los primeros monólogos hasta ahora, ¿en qué ha cambiado tu visión del mundo de aquella época a la de ahora? Bueno, desde hace casi tres años los shows y los libros se han convertido en un medio de vida. Antes trabajaba en otra cosa, hacía el Ultrashow esporádicamente por el gusto de hacerlo y escribía en un blog. Ahora soy autónomo, hago el Ultrashow con una frecuencia semanal y voy publicando libros (ya no escribo en el blog). Esto es así porque he tenido la gran suerte de haber llegado a un público que valora y consume lo que hago. No he llegado a ese público por iniciativa propia, no lo he buscado activamente; sobre todo ha sido el boca a oreja, internet y los vídeos del show en Youtube, toda la prensa que me ha procurado la editorial, estar programado en el teatro, las colaboraciones con los Venga Monjas, etc. Yo me limito a hacer shows y libros. Mi visión del mundo no ha cambiado demasiado, sí ha cambiado mi situación laboral y la visión que el mundo tiene sobre mí.

Dentro de todas estas aventuras/viajes/shows/presentaciones, ¿tienes alguna anécdota divertida que te haya pasado y llamado la atención? Joder… en realidad no. Siento decepcionarte, pero una anécdota que trascienda lo privado, algo digno de ser contado, no sé… Aunque visito varios lugares, suele ser todo muy técnico: llego, actúo y me marcho. La gente que me invita a los sitios es amable y he conocido muy buenas personas; pero una anécdota divertida… ¡Ah, bueno! Está lo de los príncipes, eso fue loco, claro. Vinieron a uno de mis shows…

Si tuvieras que escoger tu idea/concepto favorito de todo este tiempo, ¿cuál sería? Ninguno, no escogería ninguno… Claro que hay ideas que han caído en gracia y otras han pasado desapercibidas. Mira el “Cristo mal”, que de repente fue ensalzado o enarbolado como un gran qué. Supongo que porque es sencillo, arquetípico, breve y directo… En todo caso, es algo que no depende de mí. Yo voy haciendo, intento exponerlo todo con cariño y cuidado (ese es para mí el auténtico esfuerzo: querer lo que hago, no perder de vista el juego), y siempre habrá ideas o imágenes que sorprendan más que otras. Una vez las he explicado dejo de tenerlas presentes, con el tiempo se desdibujan, me desconecto del impulso que las creó… Lo importante es la maraña actual y el juego.

¿Podrías decirme, por favor, qué es lo que verdaderamente te influye e inspira a la hora de sentarte a dibujar y plasmar lo que te rodea? Bueno, en realidad no importa demasiado qué me inspira; cada cual tiene sus afectos recurrentes. En los libros puede verse… en todo caso, suelen ser formalismos extraíbles del panorama ordinario: paradojas, intensificaciones, combinaciones de cuerpos y de significados… (hojea “Mejor que vivir”) Mira, por ejemplo “Nave de ladrillo”, lo viejo y lo nuevo, una nave espacial hecha de piedra, en fin… “Uñas cóncavas”, ¿ves? En vez de convexas son cóncavas, yo qué sé… puro formalismo. Ah, uno de los libros de David Bestué se llama “Formalismo puro”. David es escultor, no humorista (aunque su obra sea divertida), de hecho me siento más cercano a él que al mundo de la comedia. Y puestos a mencionar artistas amigos, aparte de David os recomiendo con fuerza a Jonathan Millán (el de “Hervir un oso”) y a Efrén Álvarez

¿Cuáles son tus influencias humorísticas constantes? (me explico, tus básicos del humor que siempre recurres a ellos, tus básicos-clásicos, vamos) Bueno, a ver, hay muchas personas bellas… Faemino y Cansado, los Chanantes, los Venga monjas, Ignatius Farray, Álvaro Carmona, Alberto González (Querido Antonio), los Canódromo Abandonado (aunque no estén tanto por la risa), Nacho Vigalondo (que no es humorista pero es muy gracioso), Chiquito de la Calzada, Bob Esponja, Tim & Eric Awesome Show, los vídeos de Impacto Total, etc.

Si una persona te dijera que quiere seguir tus pasos y ser humorista, ¿qué le dirías? ¿le darías algún consejo? Si sigue mis pasos no será humorista, ¡no será nada! Nunca he querido ser humorista, yo hago lo del registro ese y los formalismos…

Tus planes a corto/largo plazo. A corto plazo cumplir con mis compromisos escénicos, a largo terminar el siguiente libro “La vieja tigresa o el erotismo en la senectud” (desde que acabé el último libro voy bromeando con este título para el siguiente, ojalá termine llamándose así).

MIGUEL NOGUERA