Cenar bien en Madrid por menos de 37 € con un buen vino parece una rareza, pero existe y se llama Aredna: una mesa íntima, platos para compartir y un sabor Mediterráneo diferente y bien ejecutado.
Abierto a finales de 2024, este restaurante ha evolucionado en los últimos meses desde la cocina libanesa hacia una mirada amplia del Mediterráneo. Platos para compartir, ambiente cálido con velas nocturnas, buena luz diurna y un ticket medio asumible dibujan una propuesta pensada para disfrutar sin solemnidades. Detrás hay oficio joven, una carta extensa y un interiorismo que invita a la sobremesa larga, la conversación tranquila y el placer de comer bien en el centro de Madrid.
Imágenes superiores: 1) Anchoas sobre brioche con mantequilla y Huevos rotos con atún rojo Balfegó. 2) Amigas cenando y compartiendo platos
¿Quién firma la carta?
Israel Ferrón Rivas es el chef responsable de dar forma a la nueva etapa culinaria del proyecto. Su trayectoria explica muchas cosas: comenzó en El Bohío junto a Pepe Rodríguez (1* Michelin), pasó por Grupo Larrumba, fue jefe de partida caliente en StreetXO y más tarde asumió la jefatura de cocina en Barra. En los últimos años ejerció como chef ejecutivo de El Perro y la Galleta y Sardo, afinando un lenguaje propio donde técnica y sabor van de la mano. En el restaurante Aredna, Ferrón plantea una lectura mediterránea basada en la temporalidad, el producto reconocible y una ejecución precisa, pero sin alardes innecesarios. Su cocina busca equilibrio: platos comprensibles, bien armados, con guiños a distintas orillas del Mare Nostrum y una clara vocación de disfrute compartido. No hay dogmas ni rigideces, sino una manera honesta de cocinar para que el comensal entienda, disfrute y quiera volver.
Gildas, Patatas bravas Aredna y Ostras al natural
¿Qué nos encontramos en la carta de Aredna?
La carta se estructura en 23 propuestas, tres tipos de sides y cuatro postres, pensados para compartir y construir una comida a medida. Entre los platos más originales destacan la Coliflor en dos texturas con crema ahumada de berenjena y remolacha, aliño de sésamo y kale frito (5,5 €); las Patatas bravas al estilo libanés, con emulsión de ajo, guindilla y cilantro (15 €); o la Paletilla de cordero a baja temperatura con beurre blanc de tamarindo, naranja y romero, pasas y escarola (16€). Junto a ellos conviven apuestas que funcionan como valores seguros: Huevos rotos con atún rojo Balfegó (16 €), Ensaladilla rusa con carpaccio de gambón y crema de piquillo (11€) o un Chuletón de tomate rosa aliñado (9€). En Aredna, la carta combina riesgo medido y confort, permitiendo tanto la sorpresa como el acierto seguro.
¿Qué precio medio tiene Aredna?
El gran acierto, de proyectos así, es su relación calidad-precio, especialmente en el contexto actual de Madrid. Os ponemos un ejemplo de una cena para tres personas compartiendo algunos platos: Tres gildas, Tres flores de alcachofa, una Ensaladilla rusa con carpaccio de gambón, un plato de Huevos rotos con atún, un plato de Láminas de solomillo, un postre para compartir como el Shoaybiyet, una botella de vino Ramón Bilbao Crianza y agua del grifo de Madrid, pagarían 36,4 € por cabeza. Una cifra difícil de encontrar en un restaurante moderno, céntrico y con una cocina cuidada. Aredna demuestra que es posible salir a cenar bien, beber vino y no sentir vértigo al mirar la cuenta, algo cada vez más excepcional y, por ello, especialmente valioso.
Flor de alcachofa frita con emulsión de huevo y queso Idiazábal
Un interiorismo cálido y confortable
El diseño del espacio lleva la firma de Carlos Rafael Moreno Fontaneda y se articula como un lugar vivido, con alma viajera. El interior fusiona bistró y taberna mediterránea a través de materiales cálidos y una iluminación muy medida. Suelos de madera reciclada, columnas que conviven desde distintas épocas y estanterías de madera llenas de libros de viaje sobre destinos mediterráneos construyen un relato coherente. Las mesas se iluminan con botellas de vino convertidas en candelabros, reforzando una luz cálida y tenue que invita a bajar el ritmo.
Los vinos, otro de los pilares de Aredna
La carta de vinos acompaña muy bien el espíritu del restaurante: es variada y pensada para disfrutar sin complicaciones, con referencias reconocibles y otras más curiosas, pero siempre con precios contenidos. Predominan los vinos españoles, con especial presencia de Rioja, Ribera del Duero, Rías Baixas y Madrid, aunque también hay guiños internacionales y generosos bien elegidos. Se puede beber, la mayoría de ellos, bien tanto por copas como por botellas, algo poco habitual hoy en día. Entre los tintos destacan opciones como “Ramón Bilbao Crianza” (26 €), “Kármán Garnacha” (22 €) o “Marino Tinto” de Madrid (36 €). En blancos, funcionan especialmente bien “As Voltas Albariño” (26 €), “Erebo Godello” (31 €) o el “Kerpen Kollektion Riesling” (35 €). Para quienes buscan algo distinto, hay generosos como “Barbadillo Manzanilla N Trinidad” (29 €) y espumosos como “AT Roca Reserva Rosado” (38 €).
Láminas de solomillo al ajillo con setas, rabanitos y patatas fritas
El Perro y la Galleta, el origen del proyecto
Detrás de este restaurante está El Perro y la Galleta, un grupo madrileño con cinco locales homónimos en los barrios de Retiro, Castelló, Juan Bravo, Malasaña y Valdebebas. A ellos se suma también Sardö, completando un pequeño ecosistema gastronómico coherente. Carlos Rafael Moreno Fontaneda y Javier Oyarzábal iniciaron esta aventura en mayo de 2014 con la apertura de Bar Galleta en la calle Corredera de San Pablo 31 de Madrid. Desde entonces han desarrollado proyectos reconocibles, de ambiente cuidado y cocina accesible. Dentro de ese recorrido se inscribe Aredna, que amplía el discurso del grupo hacia un Mediterráneo compartido, contemporáneo y pensado para el disfrute cotidiano.
Restaurante Aredna
C. de Barceló, 5, Madrid
Tel.: 682 05 03 04
horarios: Todos los días de la semana de 13 a 1 horas
Precio Medio: 37 €
Aquí puedes ver su carta de comida y aquí la de vinos
