Granada. Foto: Lars Erik Skrefsrud
MÁS COLOR Y MENOS BUROCRACIA. EL STREET ART SIGUE EN AUGE EN ESPAÑA A PESAR DE RESTRICCIONES Y SANCIONES
Mensajes repletos de humor, protesta, pero también reflexión. El Street Art español ya juega en la misma liga que el arte urbano europeo. Cada vez son más los artistas que buscan, al aire libre, su espacio ideal para dar a conocer su obra y, de paso, embellecer unas ciudades que, pese a las continuas restricciones y sanciones administrativas, necesita más color y menos burocracia contra el arte urbano.””Todo mi trabajo está unido por la defensa del espacio público, hoy en día bastante privatizado”, declara DosJotas, uno de los artistas callejeros más importantes de Madrid y cuyas obras pueden admirarse disfrutando de cualquiera de los safaris urbanos que se organizan diariamente. Lavapiés o Malasaña son sus espacios predilectos, donde sus residentes reciben con satisfacción esta explosión de creatividad. “La gente lo va valorando, pero es un proceso bastante lento porque las instituciones no ayudan”, señala Guillermo de La Madrid, miembro de Madrid Street Art Project, una de las empresas encargadas de mostrar por toda la capital de España las diferentes muestras de street art. Aunque bien es cierto que las instituciones madrileñas comienzan a tomar conciencia de la importancia de estas obras no sólo para dar un lavado de imagen a la ciudad sino también como nueva fórmula turística a explotar. Tal es así que recientemente han comenzado varias actuaciones de colaboración para dar otro aire a algunos distritos como el de Tetuán donde se permitirá el uso de muros o mobiliario urbano para pintar.
En Valencia, si preguntamos a la mayoría de los artistas urbanos del país, la gran mayoría coincidiría en señalar el Barrio del Carmen como uno de los lugares más carismáticos de esta expresión artística. Este céntrico espacio construido entre dos murallas contiene todo un legado de obras junto a monumentos como las Torres de Serranos y las Torres de Quart, además del Instituto de Arte Moderno o el Centro Cultural de la Beneficencia, por ejemplo. El aspecto de El Carmen es degradado, por allí ha pasado el tiempo sin contemplación ni piedad, solo la labor de los artistas ha sido capaz de maquillar las arrugas que provocan los años, diseñando un recorrido pictórico del que nunca un visitante podrá terminar agotado.
Barcelona. Foto: Cane Vidar
En Vigo, por ejemplo, han comenzado las labores de embellecimiento de alguna de las fachadas más ilustres de la ciudad. A través de la plataforma Outro Vigo é Posible, se pretende impulsar el Street Art en sus calles mediante la recreación de obras de grandes pintores gallegos plasmadas en los grandes muros de sus edificios por la nueva generación de creativos que, spray en mano, son capaces de plasmar auténticas maravillas. La primera que ha tomado el Consistorio gallego en colaboración con Outro Vigo es la de reproducir en el barrio de Príncipe una de las obras más célebres del pintor Urbano Lugrís, Fiestra, con motivo del cuarenta aniversario de su fallecimiento.
Hay obras en la calle que, por su interés, deberían perdurar a lo largo de los siglos. Y eso pensó Google cuando creó su plataforma Art Project cuya finalidad es crear exposiciones itinerantes por todo el mundo recogiendo un amplio catálogo, y mostrándolo en galerías. En Málaga se ha llevado a cabo el proyecto MAUS (Málaga Arte Urbano Soho), dirigido por el experto en arte Fernando Francés y que se ha encargado de estudiar todas las intervenciones creativas en los edificios. Un proyecto en el que se ha fijado Google para mostrarlo y convertir a la ciudad malacitana en la única de España en estar incluida en el tour. Allí apreciaron las obras de artistas urbanos como OBEY, D*Face o Boamistura.
Granada o Barcelona, con su Raval y Barrio Gótico, son otros puntos calientes en el Street Art español. Un arte que para muchos sigue considerándose como ilegal pero es, en realidad, la sociedad quien otorga un masivo indulto a las obras después de entender que, tras esas pinturas no hay una simple jornada de spray y mascarilla: hay talento, esfuerzo y mucha inspiración creativa. Y la lucha continúa…
