El estudio taiwanés Waterfrom Design ha dado un giro a los centros tradicionales de medicina china con su proyecto Aqua Health Clinic, un espacio de 280m2 totalmente futurista inspirado en la obra del artista británico Damien Hirst. Con el proyecto, al que han bautizado Exhibition of Frozen Time, han renovado el concepto de las clínicas de MTC uniendo así tradición y vanguardia y tecnología punta. El nuevo centro, con un diseño espacial, parece sacado de un decorado de ciencia ficción.
Aunque en la clínica se realicen las mismas técnicas milenarias de la medicina tradicional china, como el tratamiento por pulso o la alimentación entre otras para realizar tratamientos personalizados, Waterfrom Design han querido darle una vuelta de tuerca a estos espacios anticuados. La idea era convertir el espacio en una instalación artística, y que a la vez el visitante tuviese la sensación de estar en un spa. Para ello, los diseñadores han recurrido a las texturas y a la iluminación y han recreado espacios que parecen instalaciones de arte. Para Waterfrom Design el diseño debe ser como el agua: simple, puro, orgánico y transformable. Y eso es lo que han conseguido con este proyecto, un espacio con formas orgánicas en techos y fachadas, distintas texturas y volúmenes y juegos de luces y sombras. El espacio está dividido en zonas según los tratamientos que ofrecen: zona facial, zona de cuidado del cabello, zona de cuidado del cuerpo y clínica TCM. También tiene un bar en el que se sirven infusiones y tés curativos.
Ya en la entrada de la clínica se percibe el ambiente futurista de la clínica. La recepción está enmarcada por paneles de vidrio opacos. Los techos y paredes están realizados de hormigón, y se han diseñado con formas sinuosas que invitan a entrar y crean una continuidad en todo el espacio. Para las paredes y techos se han utilizado los tonos verdes y azules corporativos. Aquí se encuentra también la zona donde se exponen los productos, en la que han colocado una vitrina con hierbas tradicionales chinas a modo de jardín interior. Con esta instalación trata de hacernos reflexionar sobre la vida y la muerte, se han inspirado en los animales disecados del po artista inglés Damien Hirst.
La zona facial está elevada sobre una plataforma de madera, y junto a los techos curvados han logrado crear una burbuja dentro del espacio. En la fachada se ha diseñado una instalación en la que se exponen casi 100 tipos de plantas medicinales chinas y minerales que se utilizan tradicionalmente en la medicina china. Se han colocado en pequeñas vitrinas de vidrio iluminadas convirtiéndolas en protagonistas del espacio. Así se consigue exponerlas pero a su vez protegerlas y ocultar el característico olor de los centros tradicionales de medicina china.
La zona del cuidado del cabello, situada en el centro de la planta, también está elevada sobre una plataforma de madera. En ella han querido hacer un juego de luces y sombras, y para ello la han enmarcado en una caja de vidrio. En el techo se proyectan imágenes aleatorias de siluetas de hojas, otra instalación dentro del espacio que favorece la relajación. “Las siluetas del movimiento que se da en el exterior y el interior del espacio se convierten en una performance en la que los espectadores solo pueden intuir lo que está ocurriendo a su alrededor”, cuentan los arquitectos.
En los pasillos, se han diseñado bóvedas como si el espacio fuese una cueva, y arcos que no llegan hasta el suelo, para darle movimiento al espacio y crear un contraste entre las formas geométricas y las orgánicas. Los arcos, inacabados deliberadamente, dan sensación de profundidad al espacio. El baño es otro espacio mágico. En la pared frontal, se ha colocado un panel grueso de cobre que se ha pulido en la zona visual hasta convertirlo en el espejo, y los clientes pueden ver su reflejo sin esperarlo y por arte de magia. La base del grifo es otro expositor de hierbas tradicionales, un guiño a la obra de Damien Hirst. Como cuentan los arquitectos, en este proyecto “Lo más simples se convierte en una instalación artística”. En todo el interior se juega con distintas texturas para crear un ambiente artistico.
Al final de la planta se encuentra la zona del bar y de MTC, también enmarcadas por formas orgánicas, arcos y bóvedas. Para el mostrador de MTC se ha diseñado un mueble a medida para guardar como ellos cuentan “miles de años de sabiduria”. El mueble está formado por cajoneras de vidrio con distintos tonos de azul imitando al mar. Se juega con las alturas de su frontal para darle dinamismo y sensación de que los cajones están flotando. En el bar se ha instalado un juego de luces en tonos azules y verdes que van cambiando y que imitan el ritmo de la montaña, la niebla y la lluvia. Las ventanas ciegas sirven para insonorizar y aislar el interior del exterior, siguiendo la filosofía del espacio, que trata de crear un ambiente de relax y aislamiento total del exterior. La idea es, como cuentan ellos, que los visitantes “sientan que entran en el espacio o que están sumergidos bajo el agua”. Un ambiente que quizá pueda crear tendencia en el diseño retail de las clínicas del futuro.
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Fotos: © Kuomin Lee
www.waterfrom.com
@waterfrom_design
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