Unas Crocs sin Jibbitz son como un día sin sol

Crocs es una de esas marcas que se han popularizado tanto que se han convertido en nombre genérico. Un clásico único gracias a sus Jibbitz Charms.

Cuando una marca pasa a ser un nombre genérico es el culmen del éxito, ha calado hondo en el alma pop. Y a pesar de haber infinidad de modelos diferentes dentro de la marca, hay un tipo de zueco concreto que todo el mundo identifica como Crocs. Me refiero a esos cómodos zuecos de resina con agujeros transpirables. El fenómeno de la generalización solo le ha pasado a unas cuantas marcas: Kleenex, La Casera, Frisbee, Aspirina, Google, Jeep… Y ahora Crocs. Eso sí, asegúrate bien que cuando pides unos Crocs, te den unos auténticos Crocs y no un sucedaneo. La tendencia de este tipo de zueco ya es legendaria, aguantando temporada tras temporada. Ha llegado a pisar las pasarelas de la mano de firmas de moda como Balenciaga, o a protagonizar colaboraciones míticas de streetwear con artistas como Justin Bieber o Bad Bunny. Estamos sin duda ante un nuevo clásico moderno que sabe reinventarse, adaptándose a las tendencias. Pero que sobre todo tiene un arma secreta: Los Jibbitz, esos charms de la marca que hacen que cada Crocs sea único.

Unas Crocs sin Jibbitz son como un día sin sol

Sin duda, una de las claves del éxito de Crocs es que se ha transformado en un lienzo en blanco para plasmar la creatividad de las nuevas generaciones creativas. Cada uno puede customizar sus Crocs a su gusto, en las redes hay múltiples ejemplos en plan DIY. Además, la propia marca te facilita herramientas para que personalices tus propias Crocs a tu rollo, gracias a los míticos Jibbitz de Crocs. Unos charms que expresan a modo de complementos lo divertida y enriquecedora que es la diversidad. Puedes jugar con los Jibbitz en la colección de Classics con sus cinco modelos icónicos: Classic Crocs, Plataform, Slide, Bae y Clog.

Unas Crocs sin Jibbitz son como un día sin sol

Hay Jibbitz para todos los gustos. Desde pins con referencias a los mundos de Disney, Star Wars, Harry Potter… a emojis de todo tipo, decenas de ideas para que tus Crocs se conviertan en un auténtico medio de expresión. Y son tan fáciles de poner y quitar que puedes crear con ellos un mood que comunique tu estado de ánimo dia a día. Puedes pillarlos sueltos o en packs de varias unidades de Jibbitz. Son este tipo de cosas las que hacen que una marca sea única por mucho que se haya generalizado.

Unas Crocs sin Jibbitz son como un día sin sol

Unas Crocs sin Jibbitz son como un día sin sol