Entre el documental y la ficción se mueve Generación Anti Todo. Un filme con el que Iñigo Cobo analiza cómo ha influido el mensaje de Eskorbuto entre la generación millenial a la vez que reflexiona sobre su mitificación.
Generación Anti Todo. Entrevistas a gente del entorno de Eskorbuto (desde Paco Galán, el batería superviviente, a miembros de RIP o Zarama) se entremezclan con debates sobre la banda y las partes de ficción, a cargo de los tres protagonistas, Ioritz Benito, Selam Ortega y Ander Notario, representantes de la nueva generación. Entrevistamos a Iñigo Cobo, director y escritor de la película.
Generación Anti Todo: la génesis
–Generación Anti Todo se mueve entre la ficción y el documental, ¿cuál es la intención?
La intención es que había ganas de jugar, experimentar. Y desafiar un poco las expectativas de quien se acercarse a verlo. No es lo que la gente espera ver y eso pretendíamos. La mezcla, además, es un poco simbiótica entre ambos formatos: la ficción está documentalizada, porque los diálogos de los actores son en su mayor medida improvisados por ellos mismos, hay profesionales y no profesionales, y la parte documental se desarrolla de una manera un tanto distinta al documental tradicional, como una charla orgánica entre dos o varias personas.
La parte de ficción quiere sintetizar o reflejar lo que se cuenta en las entrevistas, y de hecho se grabó después de tenerlas todas. Aparecen también personajes reales haciendo de sí mismos o cameos. Por ejemplo, el profesor de instituto es el sobrino de Jualma. Los chavales protagonistas hacen, al tiempo, versiones de sí mismos y reflejan qué siente y qué le preocupa a la generación nacida en el año 2000, en contraste a lo que cuentan las personas entrevistadas, en las que además mezclamos rostros conocidos del punk con personas más anónimas: estudiantes, jubiladas, grupos locales…
Generación Anti Todo: Ioritz Benito
-Tú estás de alguna forma representado por el actor y músico Ioritz Benito, ¿preferiste quedarte detrás de la cámara?
Ioritz tiene un perfil idóneo y perfecto, más allá de que él mismo sea músico y un gran experto en el tema, y vale para todo. Yo no soy actor ni quiero serlo, y tener a una tercera persona proporcionaba una distancia aconsejable ya que él aportaba cosas a las preguntas y al guion, y ha enriquecido mucho nuestra idea inicial con su propia forma de ser y conocimientos. Se ha convertido en un pedazo imprescindible del documental.
-Se ha rodado en Bilbao, Etxebarri, Sestao, Vitoria-Gasteiz, Santurtzi… ¿Fue la propia historia de Eskorbuto la que decidió las localizaciones?
Las localizaciones tienen un peso importante y su razón de ser. Dan aire a las conversaciones y también contexto y variedad. Cada entrevistado está definido por el lugar en el que charlamos con él, de alguna manera. A la vez que tenemos a Roberto Moso en el bar donde Iosu y Jualma se conocieron y, al mismo tiempo, se puso el nombre al grupo (por el propio Moso), Pako Galán es entrevistado bajo el Horno Alto, uno de los pocos emblemas que quedan en pie de la industria del País Vasco. Pako, además, ha estado trabajando toda su vida en la industria, incluso cuando tocaba con Eskorbuto. Hay muchos rincones y calles que vemos en el documental que fueron los otros protagonistas de la juventud de los años ochenta, noventa… Nos encantaría haber metido más.
Generación Anti Todo: el mito de Eskorbuto
-Reflexionas y profundizas sobre el grado de mitificación al que se ha llevado a Eskorbuto desde la muerte de Iosu y Jualma: libros, cómics, discos tributo, estatuas, murales, documentales, películas… ¿Qué conclusión has sacado?
Es un punto interesante, el por qué y el cómo mitificamos, y uno de los motivos por el que nos adentramos a hacer el documental, que tiene este tema como uno de los principales. Y mitificación hay con Eskorbuto y con cualquier otra cosa que nos llegue hondo. Necesitamos ídolos y gente que tener como referencia, gente que valide nuestro propio sistema de valores, y necesitamos creer en cosas, ya sean religiones mayoritarias, Harry Potter o determinadas filosofías de vida, y filosofías de vida es lo que ofrecía Eskorbuto; una manera muy concreta de ver la realidad, y esa mirada sigue válida en 2019, y así seguirá, porque el mundo no es tan distinto ahora que en 1983, al margen de lo evidente.
Como dicen en el documental, Eskorbuto era nihilista, y era nihilista de una forma guay, hacían lo que les daba la gana, eran transparentes, y quién no quería o quiere ser como ellos, quién no quiere luchar contra el sistema después de fichar del trabajo. En la actualidad, el contraste entre el ser y el aparentar, en pleno auge de Instagram, es mayor. Que un adolescente de 16 años se apropie de Eskorbuto, en este caso, es como un contraataque.
Generación Anti Todo: BSO
–Generación Anti Todo, ¿alimenta el mito o desmitifica?
El objetivo era ser lo más neutrales posibles, incluso cuando semejante cosa como la neutralidad no existe, pero es lo que hemos intentado. Lo que ha resultado, mínimo, ha sido no dejar indiferente a nadie y que la gente salga de la película haciéndose preguntas y cuestionándose todo. Es lo mejor que puedes lograr. Dentro del documental hay opiniones de todo tipo y sobre muchos temas. La librera a la que acudía Iosu te va a contar que era un chaval normal. Su sobrino te dirá que su tío era normal. El que oiga las historias de los tres con veintipico años de memoria cambiante entre medias, te dirá otras cosas. Cada uno elige cómo percibe las cosas, si lo ves desde un punto de vista crítico y con distancia o si te lo tragas y punto.
-La mayor parte de la banda sonora de la película es, por supuesto, Eskorbuto. ¿Ha habido problemas a la hora de conseguir los derechos de sus canciones?
No ha habido problemas. Hemos tenido muchas facilidades.
Generación Anti Todo
-En general parece que el denominado ‘Rock Radical Vasco’ está más de moda que nunca. Además de Eskorbuto, la biografía de Cicatriz va por su cuarta edición, RIP también tiene la suya, y La Polla Records han arrasado en ventas tanto de su biografía como de su nuevo disco y de las entradas de su gira de regreso. ¿Es todo parte del mismo fenómeno?
No sé si la palabra adecuada es “cariño,” pero la gente tiene mucho apego a esa época. Muchos de los compradores de productos son personas que vivieron eso y quieren revisitarlo, y por otro lado hay gente que ahora está en su veintena o treintena y quiere descubrir las cosas de una época que no se ha vivido, que pasó hace nada pero que parece lejísimos, y que se narra desde una manera muy particular, porque esa libertad ya no existe, aun cuando ahora pensamos que el siglo XXI es la época más libre, y precisamente hoy día es cuando más controlados estamos. Por otro lado, a nivel económico, hay un enorme mercado ahí, por esas mismas razones: se sigue pidiendo hablar de eso y se seguirá haciendo.
Generación Anti Todo: biopic de Álex de la Iglesia
-En plena promoción de Generación Anti Todo se ha anunciado el biopic oficial de Eskorbuto producido por Álex de la Iglesia, Demasiados enemigos. ¿Os ha pillado por sorpresa o era cuestión de tiempo?
No ha sido sorpresa porque ya estábamos al tanto de ese proyecto y de la implicación de su productor, que lleva años queriéndose hacer realidad y ha pasado por muchos vaivenes, al menos hasta donde nosotros conocemos. Es una propuesta muy diferente a nuestro Anti Todo, y les deseamos mucha suerte porque sabemos que no será un camino de rosas. Es, de hecho, un reto monumental. Reproducir la zona, que ha cambiado tanto, y conseguir a actores que estén a la altura de sus versiones reales, muchos de los cuales siguen vivos, y los otros muy frescos en los recuerdos… Caerán palos, eso no lo puede negar nadie. Veremos.
-Quien quiera ver Generación Anti Todo, ¿cómo puede hacerlo?
Ahora en otoño tenemos previstas muchas proyecciones, más las que nos quieran ofrecer. Es una película que cuesta mucho mover, por sus características, pero había que hacerla y se hizo, y tan contentos; de todas formas, en unos pocos meses estará disponible en, al menos, una plataforma de streaming, y se comercializará también; en qué medida, aún no sabemos.
