El casting de First Dates cada vez es más sofisticado. Anoche asistimos a la cita de Marc, nieto del artista Antoni Tàpies.
Una de las cosas que más me maravilla del programa de televisión First Dates es el casting. Todos los días tienen que conseguir que un montón de gente vaya a la tele a buscar pareja en una cena, que además se la tienen que pagar ellos mismos. En el mejor de los casos, pueden encontrar pareja. Y en el peor, pueden hacer un poco el ridículo. Pero eso no importa porque, afortunadamente, los españoles tenemos cada vez menos sentido del ridículo. Y, bueno, pasé lo que pase en First Dates siempre puedes echar unas risas, y hacernos pasar un rato curioso a los telespectadores. Tal como hizo anoche Marc, el nieto de Antoni Tàpies.
Todos alguna vez hemos recibido un mensaje privado en Facebook invitándonos a ir a First Dates. En esa toma de contacto te dicen cuánto te pagarían. Supongo que no todo el mundo tenga el mismo caché. Pero vamos, que si decides ir a First Dates por la pasta (económica), ya te digo que no se manejan grandes presus y encima te tienes que pagar la cena, y lo mismo hasta la de tu acompañante, depende del rollo que lleve cada uno.
Entonces, ¿Qué puede motivar a Marc, el nieto de Antoni Tàpies a ir a First Dates?
Bueno, lo primero que hay que decir es que el nieto de Tapies tiene todo el derecho a ir a First Dates. Lo que ya rayaba un poco es que no parará en ningún momento de decir que Tápies era su abuelo. Nos lo dijo en el vídeo de presentación, un par de veces. Posteriormente, en modo guionizado, se lo volvió a preguntar por si no había quedado claro. Y finalmente… en la misma cena. Después de que su pareja, Sandra, explicará que lo suyo era la música. Él, Marc, metió lo de su abuelo Tàpies, otra vez, con calzador: “¿Y el arte… la pintura… la escultura?…” y acto seguido le dijo a Sandra que era nieto de Tapies. Ella, la verdad, no quedó impactada. Le respondió que le sonaba pero poco más. Ignoraba que era uno de los artistas españoles más importantes del siglo XX… De familia de políticos catalanistas, catalanista él mismo, Premio Príncipe de Asturias, Medalla de Oro de la Generalitat de Cataluña… Fundación Antoni Tàpies… y nombrado Marqués de Tapies por el rey Juan Carlos I en 2010…
A Sandra no le impresionó nada lo de Tapies, ni que Marc pudiera heredar el título de Marqués de Tàpies algún día. Lo que más le moló a Sandra de Marc es que fuera un “punkarra de los buenos”… Y es que Marc lucía una camiseta con el mensaje “Generación Anti Todo” (título del documental sobre Eskorbuto)… y corte a lo mullet, pero exagerado, con melena teñida, tattoos, piercings… vamos, lo normal. Y en el plano materialista, a Sandra lo que le más gustó es que Marc tuviera un bar propio, donde ejercía de camarero.
Marc la verdad es que se presentó como un tío súper sincero… nos contó que el arte de su abuelo cada uno lo tenía en entender como buenamente pudiera… y que por circunstancias de la vida, su padre falleció y con la herencia compró un piso, y así se quitaba de los líos de los alquileres.
La reflexión inevitable, otra vez, es qué hacía el nieto de Tàpies en First Dates. Ya sé qué tiene todo el derecho. Pero, al final la lectura fácil que queda es: “¿Es más fácil ser de la generación anti-todo siendo nieto de Tàpies?”… Y ya puestos, la siguiente reflexión sería: ¿Y qué piensa la familia Tàpies?…. o… ¿Por qué no nos dio Marc una pista sobre la dirección de su bar?… y… ¿Sandra se tirará de los pelos por haber dejado escapar a este “punkarra de los buenos”? Bueno, al menos quedaron en volver a verse si ella iba a Barcelona y él a Madrid. Hacían buena pareja. A ver quién sale hoy en First Dates, cada vez está más interesante.
