Opera Viva es el calendario social de Lavazza 2013. El público se convierte en protagonista. Se trata de un calendario online diseñado por Marco Brambilla con la contribución de videos e imágenes realizadas por todo tipo de colaboradores. Describir un día en segmentos de dos horas y doce secciones diferentes permiten completar un año.
¿Es posible almacenar y registrar lo que sucede en 365 días en un sólo día? Si bien el calendario del artista digital Marco Brambilla no hace de la concentración su único objetivo, propone un viaje al tiempo subjetivo en el que transcurre nuestro día a día. En vídeos anteriores, Brambilla investigó el modo de presentar la historia de la humanidad en unos pocos minutos. En este día dividido en 12 secciones la percepción del tiempo adquiere otra dimensión que la que trasmite un calendario tradicional e introduce cientos de experiencias colectivas. Neón, Sueño, Oscuridad, Despertar, Arreglarse, Trabajo, Sol, Sombras, Hora Punta, Hogar, Comida y Diversión son los nombres de cada uno de los 12 grupos con los que Brambilla construye su línea temporal y que representan los 365 días del año. Con estas palabras como referencias, miles de participantes subieron vídeos e imágenes a través de la pagina web, de Facebook o de la aplicación diseñada para móviles y tablets. El conjunto de propuestas seleccionadas por el artista construye una especie de caleidoscopio cibernético y sonoro donde la dimensión temporal se vuelve tan subjetiva como la vida misma. A cada episodio o momento del día le corresponde un tipo de emoción desplegado como un reflejo temporal en los distintos meses del año. Sin distancias entre usuarios y productores el almanaque de Marco Brambilla, cuya celebración participativa se resume en el Opera Viva de su título, arranca cuando visionamos la página operaviva.lavazza.com. Aquí el año impar que acaba de arrancar nos ofrece la posibilidad de asistir a una multiplicidad de ciclos donde la vida se expone con la misma euforia y liviandad con la que es experimentada. Se trata, como el propio Brambilla señala, de “un reto ambicioso y fascinante. Un intento por reconstruir la propia idea del tiempo y representarla como si se basara más en el flujo de la consciencia que en ciclos lunares o solares. Estoy muy contento de haber conseguido llegar a un equilibrio entre estilo y esencia, dando vida al calendario a medida que se iban subiendo a la página diferentes vídeos y fotografías”. Opera Viva, el Social Calendar de Lavazza, incorpora a la tradición de realizar calendarios fotográficos, con firmas como las de LaChapelle, Newton o Leibovitz, la investigación digital. Junto a las distintas secciones que organizan el día a día de este calendario hay también una sección dedicada al celebrado café “espresso” de Lavazza, “el núcleo emocional de un día ideal” que aparece en todos sus calendarios y se hace también aquí un hueco para narrar aquellos momentos donde el café forma parte de nuestro paisaje.
“Opera Viva”: “Todo el proyecto en general es un estudio de contrastes, entre mi percepción subjetiva del tiempo y la perspectiva objetiva de los colaboradores. Podríamos decir que Opera Viva ‘visualiza’ la consciencia de un momento particular del día”.
Vídeo calendario: “En este caso la técnica utilizada no es la del vídeo-collage, aunque en principio esta sea la base de la que parte el proyecto. El modo de trabajo que he decidido implementar tiene más que ver con la construcción de una estructura, una interface que sirve para comunicar las dos partes del proyecto, es decir, mi propia percepción y la percepción del usuario, de un modo muy atractivo y dinámico”.
Doce secciones: “Dividir el día en segmentos ‘mensuales’ fue un modo de reprocesar el tiempo, convertir la rutina diaria en un calendario. Cada ‘página’ de este calendario se convierte en un retrato de dos horas, estos retratos logran expresar un sentimiento o un tipo de actividad que solemos desarrollar en ese momento particular del día”.
Concentrar tiempo y acontecimientos: “Creo que es muy importante entender completamente el contexto de tu trabajo y convertir tus ideas en el concepto central. De este modo, jugar con la escala del tiempo me pareció un experimento muy interesante, por ello me interesó reflexionar sobre ciertos formatos y hacer coincidir el diseño que debería tener un calendario en la actualidad a través de los medios de los que disponemos y utilizamos”.
Nuestra vida en imágenes: “Se podría pensar el proyecto como una traslación de los modos en que nuestra vida se construye a partir de las imágenes que compartimos. La forma en que nuestro consciente colectivo adquiere la información a través de los medios de comunicación y la naturaleza transitoria del acceso instantáneo a la información”.
