He aquí un plan “etiqueta negra” para carnívoros empedernidos. Son las costillas ibéricas Foster’s Hollywood, las Black Label que se convierten en un mordisco tan ibérico como real american. Costillares de cerdo ibérico seleccionados para ser cocinados a baja temperatura, con su toque parrillero y su salsa barbacoa secreta con sirope de arce y virutas de paleta ibérica crujiente. Difícil dominarse.
Repetimos: es momento para que los instintos más primarios nos arrebaten en la mesa, pero también de que nuestro paladar gourmet nos recuerde lo mucho que nos gustan unas buenas costillas devoradas a mano. Foster’s Hollywood sabe mucho de todo esto. Ah, y tiene reservada alguna sorpresa más para el próximo Halloween. Carne tierna y susto dulce, no está mal de vez en cuando.
La cadena de restaurantes americanos fundada hace casi 50 años por un grupo de californianos a los que les pirraba España lanza ahora estas Black Label que se suman a sus ya clásicas National Star Ribs, costillas de cerdo ahumadas a la parrilla. Las costillas ibéricas Foster’s Hollywood son un paso más en cuando a jugosidad, textura y sabor. Pringarse es protocolo permitido.
Las nuevas Black Label vienen acompañadas de una guarnición compuesta por un salteado de patata asada, champiñón portobello, espárragos, cebolla morada y tomates cherry. Que no todo va a ser rebañar hueso.
Precio Costillas Ibéricas Foster’s Hollywood Black Label: 18,95 euros.
*Con motivo del próximo Halloween, Foster’s Hollywood ha preparado un postre de edición limitada “espeluznantemente delicioso”: se trata del Bloody Cake Ben & Jerry´s, que se podrá disfrutar como novedad durante toda la “Halloweek”, del 21 al 31 de octubre.
Este nuevo Bloody Cake Ben & Jerry´s de Foster’s es un postre de bizcocho y crema de chocolate, con helado Strawberry Cheesecake de Ben & Jerry´s y un acabado con salsa bloody y alguna que otra sorpresa más.
Sobre Foster’s Hollywood: En 1971 se abrió el primer restaurante Foster’s Hollywood en la calle Magallanes 1 de Madrid, de la mano de un grupo de californianos afincados en la capital que compartía un sueño: traer el auténtico sabor de América a España. Desde entonces, aquel espíritu emprendedor se sigue reflejando en la evolución de la marca.
