Ayer se presentó el short film creado por Javier Balaguer para presentar el modelo Mazda CX-30. Una película inspirada en la filosofía Kodo que utiliza la danza como discurso narrativo.
En la filosofía de diseño Kodo aplicada por Mazda en sus automóviles hay cuatro conceptos fundamentales. El primero es el YohakuYohaku: El arte del espacio vacío, la belleza del espacio diáfano que se percibe, por ejemplo, en la fluidez y la atmósfera del habitáculo del Mazda CX-30.
Además se aplica el concepto Ma: Es el espacio o los intervalos entre elementos, un clásico de la arquitectura japonesa. Se aprecia en el contraste entre el carácter a la vez envolvente y abierto del Mazda CX-30. Menos es más.
A su vez Sori son las curvas que se encuentran en la arquitectura tradicional japonesa y la fabricación de espadas. Presente, por ejemplo, en los arcos que parten de los faros del Mazda CX-30, recorre los pasos de rueda delanteros y llega hasta las ruedas traseras.
Por último Utsuroi es el juego entre las luces y las sombras. Por ejemplo, en la forma en que las superficies laterales de la carrocería del Mazda CX-30 manipulan la luz, reflejando una forma en “S” que cambia según la perspectiva del observador o cuando el coche se mueve.
Sobre estos conceptos el director de cine Javier Balaguer y el coreógrafo Federico Barrios han creado el short-film Kodo, Alma en Movimiento para presentar el modelo Mazda CX-30.
Se trata de una pieza audiovisual rodada en unas localizaciones impresionantes como es el desierto de Mahoya y las Salinas en Torrevieja. El film se divide en cuatro fases: la creación, la concepción, el nacimiento y la revelación. A lo largo de ellas, dos bailarines de danza contemporánea ejecutan una coreografía a través de escenarios de gran impacto visual.
El trabajo ha sido dirigido por Javier Balaguer y en él ha trabajado el coreógrafo Federico Barrios, el compositor de música Basilio Martí y los bailarines Oriol Anglada y Silvia Álvarez Esteva.
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